La verdad, la última entrada que escribí el pasado miércoles ensalzando el verano, los videojuegos y el tocamiento ombliguil durante estos días de vacaciones pensaba que sería la última antes de volver al tajo a finales de agosto. Pero no ha sido posible...
Ayer saltaba la noticia de que Nintendo 3DS baja de precio. Y no es una bajada cualquiera. No. Es una burrada. Una reducción salvaje del precio que, todos dicen, se debe a un posicionamiento por la llegada de PS Vita y que otros, menos generosos con Nintendo, achacan a un presunto batacazo en ventas de la portátil 3D.
Pues miren lo que les digo. Me da igual si es por una cosa o por otra. Si es por PS Vita o por que las sandías del Sáhara ya no tienen pepitas... ¡¡la broma de comprarme una 3DS me ha costado 80€ más que al resto de mortales a partir del 12 de agosto!! Ni Sony con su PSP Go bajó tanto, y estamos hablando del mismo precio (y eso que el guantazo de la PSP sin UMD ha sido de los que hacen época) de 250 euracos...
Los que alguna vez han leído en este blog, sabrán que otra cosa no, pero flores a Nintendo he tirado unas cuantas. Razón no me falta. Pero como dice el refranero español y el primer mandamiento del decálogo de cosas evidentes, "siempre hay una primera vez para todo". Y Nintendo 3DS, de repente, ha pasado a costar un tercio menos de lo que valía cuando salió hace apenas cinco meses. ¡¡Cinco meses, Dios Santo!!
Eso sí, al menos desde Nintendo nos dicen que después del veranito, los que la compramos en temporada alta pasaremos a ser "Embajadores de 3DS" . ¿Ein? Y que nos regalarán 20 juegos de la e-Shop entre pitos de NES y flautas de Game Boy Advance. ¡¡Vaaaaaale!!
Pues miren, a mí lo de Embajador no me hace ninguna gracia porque hay destinos que no son nada seguros. ¡¡Imagínense que me mandan a la cancillería de Atenas con la que está cayendo!! Es más, no tengo muy seguro que los que se compren la 3DS a 170€ me hagan genuflexiones por mi condición de Ambassador. Como mucho esperaría de ellos cachondeo del bueno y risotadas a mogollón por haber pagado 80€ más que ellos por lo mismo.
Por una vez y sin que sirve de precedente, diré a los Sres. de Nintendo que menuda gracia con el precio. Que en vez de títulos nobiliarios de la Ínsula de Barataria casi que prefiero tener 80 euros más en mi bolsilllo para gastármelos en lo que quiera: en una mariscada, en un cable HDMI forrado en oro o para pillarme por 80€ más una 3DS nuevecita, que mi hija todavía no tiene una.
Y ya por pedir, decir que antes que Embajador casi que prefiero ser Apóstol de 3DS por la iglesia de Nintendo. Así, una vez en el otro barrio, tal vez tenga posibilidades de ser elevado a beato y, después, proclamado Santo de los 80€ por la Gracia de 3DS...
Y ahora sí... me voy de vacaciones.
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