Descubrir cosas sobre juegos cancelados que no llegaron ni a anunciarse nos deja una sensación algo extraña. Uno sabe que no tendrá la oportunidad de jugar aquello que está viendo con total seguridad, pero no ello deja de sentir curiosidad por cómo habría terminado el proyecto de haber seguido adelante. Saints Row The Cooler es el último ejemplo de una larga lista negra que aumenta poco a poco cada año.
Saints Row The Cooler era un juego de lucha y acción en tres dimensiones para PlayStation 3 y Xbox 360 que comenzó su desarrollo en el 2010 de la mano de Heavy Iron Studios, un pequeño estudio de THQ. La versión de la consola de Microsoft iba a tener un sistema de control que aprovechará las bondades de Kinect, mientras que la de Sony haría lo propio con Move.
El sistema de juego de Saints Row The Cooler consistía en recorrer escenarios de la saga mientras luchábamos con todo lo que se movía, pudiendo coger diferentes objetos distribuidos por el escenario para emplearlos en combate. Vaya, un beat'em up de toda la vida con alguna mecánica interesante respecto a su cámara y modo de combate que intentaría aprovechar el gancho que estaba comenzando a labrarse el nombre de la saga y que intentaría subirse al carro de los juegos para Kinect y Move.
El título que hoy nos ocupa estuvo en desarrollo durante medio año en el que un grupo de 40 personas dedicaron su cuerpo y alma en sacarlo adelante. Los motivos de su cancelación vienen de arriba, de THQ, que decidió poner punto y final a Saints Row The Cooler por motivos relacionados con la calidad del producto. Estaba al 60% de su desarrollo cuando se decidió echar el freno al trabajo de Heavy Iron Studios, y no llegó ni a anunciarse públicamente. Pero su esfuerzo no fue en vano, ya que parte de su trabajo se reaprovechó en UFC Personal Trainer The Ultimate Fitness System.
El resto de la historia ya la conocemos todos: THQ quiebra y Deep Silver rescata Saints Row, que en estos momentos está disfrutando de un buen estado de salud tras el éxito de Saints Row 4. La de vueltas que da la vida, ¿no?
Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.