En una época en la que los juegos de 8-bits no eran más que un 'puñado' de píxeles que se movían ortopédicamente en los monitores de nuestros ordenadores y con los que teníamos que hacer un gran esfuerzo imaginativo para saber qué era lo que estábamos viendo, Advanced Microcomputer Systems nos dejó boquiabiertos con un espectacular y original juego cuyos gráficos estaban a años luz de la gran mayoría de producciones vistas hasta el momento. Su nombre era Dragon's Lair y, más que de un juego, se trataba de una 'película de acción interactiva' en la que manejábamos al bueno de Dirk el Intrépido, un valeroso caballero que se enfrentaba con infinidad de peligros para rescatar a su amada, Daphne.
Las animaciones de Dragon's Lair fueron elaboradas por Don Bluth, un ex-trabajador de Disney amante de los ordenadores. La mecánica de juego era bien sencilla: nosotros veíamos una película en la que éramos partícipes activos. En ciertos momentos se nos indiciaba, mediante destellos, qué botón debíamos pulsar para que Dirk the Daring saliese indemne de su aventura y continuase con su misión. Los reflejos eran vitales, pues con que reaccionásemos apenas unas milésimas de segundo tarde podíamos pifiarla estrepitosamente.
Así es, como habréis adivinado, el misterio del juego, una vez pasado, no era nada del otro mundo, y es que podíamos llegar a sabérnoslo de memoria y pasárnoslo casi literalmente con los ojos cerrados, aún así era muy divertido y vistoso, un soplo de aire fresco que le vino la mar de bien a la industria.
Ahora Microsoft Studios y Digital Leisure anuncian la llegada de este clásico (después de que su segunda parte aterrizase en Nintendo 3DS) a Xbox 360. Será distribuido a través del bazar de Xbox LIVE Arcade y, tal y como ha confirmado Microsoft, será el primer juego compatible tanto con el mando clásico de la consola como con Kinect.
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