Justo al lado de la conferencia de Microsoft, en el Shrine Auditorium de Los Angeles, Electronic Arts ha celebrado una presentación "a lo grande", cargada de estrenos y con la presencia de algunas estrellas del deporte. El maestro de ceremonias, Peter Moore, se ha mostrado eufórico con la línea de títulos que se van a presentar para PS4 y Xbox One, comenzando por algo tan inesperado como el "shooter" en tercera persona (cargado de humor) Plants vs Zombies Garden Warfare, de PopCap. Después le ha tocado el turno a los juegos "más serios". Por una parte todos los simuladores deportivos realizados con el nuevo motor Ignite: FIFA 14, Madden 25, UFC... y el regreso de NBA Live, con Irving (el jugador de los Cleveland Cavaliers, en el escenario).
El resto de los juegos presentados, corrían sobre el motor Frostbite 3, de DICE. De este modo hemos visto Battlefield 4 en una impresionante demo en las calles de Shangai, con modo comandante y 64 jugadores simultáneos, Need for Speed Rivals, cuya presentación se ha coronado con un trailer de la película y unas palabras de su protagonista Aaron Paul (Breaking Bad). También hemos vuelto a ver Titanfall, desarrollado por Respawn Entertainment (que ya estuvo en la conferencia de Microsoft) y nos han sorprendido con dos anuncios más a cargo del estudio sueco DICE: la secuela de Mirror´s Edge y el próximo Star Wars Battlefront.
En general, como ha ocurrido con todas las conferencias de este año, nos llevamos la sensación de que se apuesta fuerte por las consolas de nueva generación, PS4 y Xbox One (sin dejar de lado PC) pero que el catálogo es conservador: shooter, velocidad y deporte para los próximos meses.
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