Tras los rumores surgidos sobre la empresa y su posible reestructuración, hoy podemos confirmar de la mano de la propia THQ, su plan para evitar el cese de actividades. Eso sí, hay todo tipo de medidas por medio.
La primera de ellas y la peor sin duda, es el recorte de más de 200 trabajadores. Estos cesarán su relación contractual actual, entre el mes de mayo y septiembre de 2012. THQ confirma que no habrá ningún desarrollador de juegos afectado por dicho recorte.
Y quizás, la medida más modélica ha sido la de Brian Farrell, CEO de la compañía que ha aceptado reducirse su salario a la mitad, al menos, hasta febrero de 2013, que volverá a regularse sus honorarios. Algo en línea con otras empresas que han afrontado la crisis actual de manera similar. Deseamos mucha salud a THQ y una pronta re-colocación a los posibles afectados.
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