No son zombis, no son humanos, son "retornados": han estado en contacto con un virus que puede llevarles a transformarse en cuestión de horas si no son tratados con una proteína que empieza a escasear. Su dosis es lo que se les separa de un trágico final.
En la presentación de Retornados, Manuel Carballo ha afirmado que uno de los objetivos de la película es restablecer la dignidad de los zombies, que han devenido una “figura degradada y sin ningún tipo de glamour”. Los zombies de la película, ha afirmado Carballo, no dan miedo; “los que dan miedo de verdad son les seres humanos que circulan por ahí con comportamientos bastante deleznables”.
En palabras del realizador, el guión ofrece una lectura del miedo a los demás; en este caso, del miedo a los “retornados”, seres limítrofes. El guión, según su director, ya era potente de origen, pero se desarrolló en equipo, llegando a ser “un hito del subgénero, dentro del que hay que ser ambicioso".
La película no es en absoluto una trepidante producción plagada de zombis masticacerebros, sino que puede definirse como “cine fantástico postzombie” pero también de “un drama romántico road-movie”.
Kate (Emily Hampshire, Cosmópolis) es una doctora que trabaja en la investigación para encontrar una cura definitiva antes de que la plaga se expanda exponencialmente.
Y tiene poderosas razones para encontrar una cura que van más allá de su interés puramente profesional, ya que su pareja, Álex (Kris Holden-Ried, The Listener), es uno de los afectados.
Retornados se estrenará en España el 15 de noviembre con 115 copias en todo el Estado y nosotros os ofreceremos la crítica muy pronto en nuestra web. Entre tanto en este enlace podéis ver el tráiler.
Descubre más sobre Raquel Hernández Luján, autor/a de este artículo.
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