La séptima temporada de The Walking Dead empezó con mucha adrenalina.
¡ATENCIÓN, SPOILERS! Esta noticia contiene información de la séptima temporada de The Walking Dead, si no la has visto aún, mejor que no sigas leyendo.
De un golpe (bueno, ya me entendéis, fueron varios golpes con bate con pinchos), Glenn y Abraham desaparecieron para siempre. A Rick casi le dio un “jamacuco” que casi se deja matar por una horda de zombis, le costó volver a ser el de siempre media temporada, y la otra mitad se la pasó ideando un plan y consiguiendo armas, municiones y un ejército de personas. El plan le salió mal, pero logró que Negan y sus hombres se fueran, eso sí, ahora ya saben las intenciones de los de Alejandría y les aventajan en número, en armas, coches, comida, gasolina y un largo etcétera.
El público (yo incluida) esperábamos ver un gran enfrentamiento entre Rick y Negan, pero nos quedamos con la miel en los labios. Los showrunners de la ficción lo han dejado todo para la octava temporada de The Walking Dead, la cual llegará en octubre, lo cual nos deja algunos meses para informar y contaros todo tipo de noticias oficiales o no sobre los nuevos capítulos.
La noticia de hoy la recoge el medio TVLine, quien indica la incorporación de dos nuevos personajes al bando de Rick, “los buenos”, y ya era hora porque se estaba quedando sin personas. De hecho, si hacemos números, en la temporada 7 han muerto 5 personajes semi-protagonistas, a los dos mencionados anteriormente se suman el de Spencer, Olivia o Sasha, pero la lista suma algunos más.
Los dos nuevos personajes que veremos en la temporada 8 de The Walking Dead son Dillon y Abbud, un joven y satírico veinteañero y un musulmán algo desquiciado, ya que lleva demasiado tiempo vagando sólo por el apocalipsis zombie. Ninguno de ellos aparece en los cómics, por lo que pueden ser individuos “de quita y pon”, ¿aunque no lo son todos?
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