Ya está, ya ha salido 3DS. Más de 300.000 consolas vendidas en dos días en toda Europa. Sé de buena tinta que en Nintendo Ibérica están satisfechos. Supongo que Iwata se lo habrá dicho en persona, que también sé que ha estado hace poco aquí (haciendo negocios y disfrutando de la comida patria, como Yoshinori Ono, que se pasó los dos días comiendo jamón; eh, que lo confesó él mismo :)).
No me desvío. Digo que la consola ya está, que ha gustado, que está en ello –convenciendo a los que aun no lo estén-, y que creo que ya podemos hacer un balance inicial de la situación. Al menos en lo que a juegos se refiere.
Yo no escondo mis favoritos. Son Street Fighter y PES 2011. Me estoy divirtiendo con ellos como no me pasaba hace tiempo. Jugando a saltos, que hemos cerrado la revista hace nada, pero con pasión futbolera (y luchadora). Y no siempre en 3D, conste. Tampoco escondo mis decepciones: Splinter Cell no me ha convencido y Los Sims 3 tampoco. Me esperaba más de ellos, sencillamente. También de Nintendogs, que sabe “engatusarme” de primeras pero luego me enseña la cara más “perra”: faltan novedades, falta el plus que esperaba.
Luego hay un abanico de tres títulos que yo consideraría finalistas. Por este orden: Rayman 3, Pilotwings y Ridge Racer. Al primero lo echaba de menos, después de ser destronado por los Rabbids. Y su vuelta, aun versionada, me ha dejado buen sabor de boca. Pilotwings es todo sensaciones... pero la isla se acaba pronto. Al menos para mi, que no soy de los que compiten a muerte por tener todos los secretos. Y RR es Rápido y tiene buen buen Ritmo, pero a veces se me pasa de Revoluciones.
Aun me faltan dos detalles para subrayar el éxito de la llegada de 3DS. Uno, que aun no tengas DS y quieras jugar con los mejores juegos de la portátil: Pokémon Blanco y Negro y los Dragon Quest (apunta Okamiden, que tiene mérito). Y dos, que tienes un par de días o tres ocupados en trastear con la máquina sin conectar una sola tarjeta: Streetpass, cámara 3D, atrapacaras... Pero luego hay que comprar, eh...
Todo esto está bien, pero como periodista de videojuegos que soy me gusta mucho pensar en el futuro, tratar de anticiparme a él. Y lo que anticipo es tan ilusionante, que tengo muy clarito cuál es la consola que ahora mismo me hace soñar. Vienen Dead or Alive, Ocarina of Time, Resident Evil por partida doble y hasta tres títulos de Mario. Sin olvidar un ¿Sonic?, un ¿nuevo Pokémon? y un Driver. Lo dicho, mis sueños son en 3D. Y sin gafas, por supuesto. Os dejo con un vídeo impactante. Que soñéis bien.
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