Aunque en España se publicitó como el enfrentamiento entre Takeshi Kitano y 42 estudiantes, la verdad es que Battle Royale era mucho más. La película de Kinji Fukasaku del año 2000 es una adaptación de una novela de Takami Koushun (que también se ha llevado al manga) y que transcurre en una línea histórica alternativa. En el mundo de Battle Royale, la juventud japonesa ha perdido los valores tradicionales por completo, y no respetan a sus mayores. Por eso el estado ha diseñado la Reforma Educativa del Milenio.
Las clases que son seleccionadas para participar en el "Battle Royale Act" se trasladan en autobuses hacia la zona de enfrentamiento. Allí cada uno de los participantes recibe un kit con equipo básico: un mapa, una botella de agua... y un arma (puede ser desde una ametralladora a una tapa de una cacerola o una cápsula de veneno) y tiene la misión de acabar con sus compañeros. Para asegurarse de que los alumnos de Battle Royale cumplen su misión, cada uno de ellos lleva un collar modelo Guadalcanal 22 que explota si se intenta manipular o si se mantiene en la zona de peligro.
La verdad es que si no habéis visto la película, con una estupenda actuación de Takeshi Kitano y Chiaki Kuriyama (la actriz que hacía de Gogo Yubari en Kill Bill), ya estáis tardando -no es apta para estómagos sensibles-. Incluso la segunda parte Battle Royale II: Requiem, tiene un excelente arranque en que los alumnos deben asaltar una isla en que hay un grupo de terroristas. El director, Kinji Fukasaku, murió durante el rodaje y se nota que el resto de la cinta (dirigida por su hijo) pierde intensidad.
A lo mejor os resulta más conocida la versión "edulcorada" que pudimos leer y después ver en las dos primeras entregas de Los juegos del hambre. En este caso, en lugar de los alumnos de un instituto, los chicos participantes en la masacre son los tributos que entrega cada uno de los distritos que componen un país futurista.
La verdad es que sorprende que hayamos tardado tanto en tener una adaptación de esta idea de Battle Royale a los videojuegos. Las claves son el enfrentamiento todos contra todos, en un tiempo limitado y en un área que se va reduciendo de forma progresiva. Además, el juego tiene que tener elementos de supervivencia, y la aleatoriedad de las armas le añade un atractivo especial. Partiendo de estas premisas ¿cómo hemos llegado al éxito de PUBG y Fortnite?
El modo de juego Battle Royale se popularizó con mods de Minecraft (bautizados como Los juegos del hambre) y de ARMA 2 -un FPS militar, con un nivel de simulación muy alto, que se desarrolla en entornos abiertos-. Pero ha estallado con Playerunknown´s Battleground y Fortnite. Y esto es sólo el principio. Dentro de muy poco podremos disfrutar de PUBG en Xbox One y más adelante en PS4, y ya se ha anunciado un nuevo "todas contra todos" para 1000 jugadores desarrollado por Automaton. Este modo se ha convertido en el nuevo "deathmatch", un imprescindible en los shooter.
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