La semana pasada estuvimos en París descubriendo los nuevos juegos que, más tarde o más temprano, verán la luz bajo el sello de Focus Home Interactive. Entre todos ellos, brillaba con luz propia Vampyr. Y eso que es un juego con una atmósfera de todo menos luminosa…
Los zombis siguen estando en un momento álgido de popularidad, protagonizando multitud de videojuegos e invadiendo algunos otros en los que, en principio, no contábamos con ellos. Pero eso no ha impedido a Dontnod Entertainment colocar a un vampiro como protagonista de su próxima propuesta. El estudio francés, autor del irregular Remember Me, vuelve a asociarse con una editora (en este caso Focus Home Interactive) tras gozar de plena libertad en el desarrollo de Life is Strange, toda una aventura de culto cuya clave de su éxito hay que buscarla, según nos confesó el director narrativo del estudio Stéphane Beauverger, en la libertad con la que trabajaron en este juego (por cierto, también nos comentó que no hay prevista una secuela, al menos de momento).
Con Vampyr van a cambiar de registro completamente, embarcándose en un juego de rol de acción con una perspectiva en tercera persona que, según nos contó el propio Beauverger, es “el juego más grande y ambicioso” en la historia del estudio, en el que están trabajando 60-80 personas. Y se han inspirado en clásicos de la literatura como Dracula de Bram Stoker o Frankenstein de Mary Shelley; y también del cine, como Nosferatu, de Murnau.
Vampyr está ambientado en un decadente Londres victoriano, concretamente en 1918, en un momento en el que la gripe española hace estragos en su población. En este difícil contexto, un médico especializado en transfusiones de sangre llamado Jonathan Rein es transformado en vampiro. Antes de convertirse en una criatura de la noche, su objetivo era tratar de frenar esta terrible epidemia. Ahora, además, tendrá que descubrir quién le convirtió en vampiro y por qué, en una interesante trama llena de giros que prometer desembocar en distintos finales, según nuestra actuación.
Y es que Vampyr nos planteará difíciles decisiones morales a cada paso. Como vampiros que somos, podremos decidir si nos alimentamos de nuestros paisanos londinenses o no. Eso tendrá sus consecuencias: cuanto más nos alimentemos de humanos, más fuertes nos haremos, pero el precio será segar la vida de más de 60 personajes que no serán anónimos como en la inmensa mayoría de los juegos, sino que tendrán una vida, una familia, un trabajo (médicos, soldados, prostitutas, etc.)… Conoceremos sus vidas gracias a los documentos que encontraremos durante nuestra investigación. Además, muchos de ellos nos propondrán misiones y si les ayudamos, en el futuro podrían “agradecérnoslo” de distintas formas. ¿Nos dejaremos llevar por nuestra sed de sangre o seremos misericordiosos con la especie humana a la que no hace mucho nosotros también pertenecíamos?
Sus creadores nos aseguraron que es posible terminar Vampyr sin matar a un solo humano, pero será muy difícil. Y es que una orden de cazavampiros irá tras nuestros pasos, agobiándonos sin descanso. Tendremos que luchar contra ellos en combates que prometen ser muy intensos, y nuestra fuerza y habilidades (que podremos ir mejorando gracias a la experiencia como en todo buen juego de rol) dependerán de la cantidad de humanos que nos hayamos “merendado”.
En cuanto a la duración de Vampyr, sus creadores nos confirmaron que la historia principal durará entre 15 y 20 horas. Y si queremos verlo todo y completar todas las misiones secundarias y coger todos los coleccionables, puede superar tranquilamente las 30 horas. Y además, Vampyr será muy rejugable porque podremos volver a jugar sin matar (o matando, en función de lo que hayamos hecho en la primera partida) ya que el desarrollo será muy diferente.
Vampyr sacará buen partido del motor Unreal Engine 4, presentando un enorme escenario semiabierto, con enormes áreas interconectadas entre sí, desde los muelles hasta distritos míticos como Whitechapel (donde operó treinta años antes otro “amante” de la sangre: Jack el Destripador). El diseño artístico está a la altura de lo esperado con una ciudad oscura y en la que por doquier se respiran los efectos de la grave epidemia que sufre. En cuanto al rendimiento, lo cierto es que lo que pudimos ver en esta presentación no distaba demasiado de lo que Dontnod mostró en las últimas ferias internacionales, aunque desde el estudio nos prometieron que pronto podremos disfrutar de una demo nueva con el juego más avanzado (suponemos que ya será de cara al E3).
Aunque aún nos falten algunos interrogantes por despejar., como mínimo Vampyr es un juego muy interesante. Si el crédito es para quien se lo merece, después de maravillar a medio mundo con Life is Strange, este estudio francés se merece que estemos pendientes de su nuevo proyecto, que será distribuido en España por Badland Games y que lo esperamos para finales de año.
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