Antes de que el cómic se llamara cómic en España y su forma de entender la producción artística de los personajes en viñetas se decantara por la visión yankee del negocio, había una miríada de personajes de "tebeo" que era el referente de la juventud. Anacleto Agente Secreto, Doña Urraca, Angelito, las hermanas Gilda...
La mayor parte de ellos, no obstante, sucumbieron a la crisis del sector y a finales de los noventa desaparecieron definitivamente, debido al cierre de las revistas de tebeos y a la transformación de la industria española, favoreciendo la producción de cómic, manga y álbumes.
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Sin embargo, unos cuantos de estos personajes lograron sobrevivir a esta debacle y, de aquella manera, seguir viendo publicadas nuevas aventuras, que no reimpresiones de material antiguo. De hecho, os vamos a proponer los nombres de siete de estos personajes, que lograron sobrevivir a los noventa y que pudieron gozar (a veces fugazmente) de nuevas aventuras en formato álbum.
Mortadelo y Filemón
Creados por Francisco Ibáñez en 1958, como parodia de las agencias de detectives, la incansable pareja de desastres calvas son con diferencia los personajes de cómic con más salud en la actualidad. Aunque sus historias empezaron siendo bastante inocentes, acabaron evolucionando para seguir tramas de espías, a imagen y semejanza del cine de James Bond.
Desde los años 90, parte de su éxito se ha debido a que su creador y su equipo de colaboradores se han centrado en la sátira social y política, adaptando el discurso de este tebeo a todas las edades. Tanto los jóvenes como los adultos que llevan leyéndolos durante casi 60 años conocen a estos personajes y raro es aquel que diga a día de hoy no haber crecido con ellos. En años más recientes, la crítica política se ha intensificado, como en uno de sus últimos álbumes, en donde se trata el caso Bárcenas. Sin embargo, los tradicionales especiales de mundiales de fútbol y Juegos Olímpicos siguen siendo una costumbre a la que Mortadelo y Filemón no faltan.
Por cierto, Mortadelo y Filemón también han sido los personajes de tebeo español más adaptados al cine. Comenzaron con diversos cortos y un largometraje animado en los años 70 (graciosos aunque también muy criticados). En la pasada década tuvimos dos películas de acción real y más recientemente una película de animación digital, muy valorada por su fidelidad al cómic.
Superlópez
Nuestros anteriores personajes son seguidos de cerca por otro habitual de las secciones de cómic español: Superlópez. Juan López Fernández, "Jan", lo creó allá por 1973 como una serie de tiras cómicas (al principio mudas) en la revista Erudit. Su posterior vinculación a Bruguera llevaron al dibujante a trabajar con Francisco Pérez Navarro "Efepé", emulando a las historias de superhéroes más tradicionales. Esto dio lugar a dos de los álbumes clásicos más celebrados del personaje, aquellos en los que colabora con el Supergrupo, una parodia de los grupos de superhéroes tradicionales.
Tras el final de esta colaboración, Jan trabajó en solitario, centrándose en historias de crítica social, con un marcado tono europeo. Esta diferenciación del resto de personajes de la editorial le ha valido la distinción entre el público. De ahí que su criatura sea la segunda más rentable en la actualidad, por detrás de los Mortadelo y Filemón de Ibáñez. Aún así, debido a un descenso en sus ventas, Jan hubo de volver a colaborar con Pérez Navarro recientemente para volver a juntar a "Súper" con el "Supergrupo" en una serie de historias. Esto ocurrió después de que Efepé y Nacho (Dragon Fall) volvieran a colaborar en un álbum para rescatar a estos personajes.
Por cierto, un detallito: Dicen que Dani Rovira va a ser el Superlópez del cine, tras haberse abortado el proyecto de adaptación de Alex de la Iglesia con José Mota como protagonista. ¿Cómo veis esta elección?
Zipi y Zape
Los hermanos mellizos creados por José Escobar siguen vivos, a su manera. Los dos traviesos hermanos del tebeo español, famosos por las calabazas, las bicicletas, el cuarto de las ratas y el rimbombante y ampuloso lenguaje de sus padres fueron unos históricos en su día. Desgraciadamente, les costó mucho modernizarse. Ya en los años 80 eran personajes anacrónicos y basados en fundamentos que se habían quedado viejos y el fallecimiento de su creador en 1994 no ayudó, ya que aparentemente les puso fin.
Sin embargo, en el año 2000, Ramis y Cera, dos de los últimos autores de Ediciones B y de la "Escuela Bruguera", rescataron al dúo, realizando una serie de álbumes que logró revivir sus aventuras un par de añitos más con un tono más moderno. Su pervivencia, curiosamente, no ha venido de mano de los cómics, sino del medio audiovisual. Si bien a principios de los ochenta tuvieron una desastrosa y (bastante) vergonzante adaptación a película, en 2003 contaron con una serie animada que más o menos cuajó y que tuvo una secuela en forma de película animada que solo salió en DVD. Más recientemente hemos tenido dos películas de acción real, realizadas por Oskar Santos, sobre las cuales mejor que os leáis nuestras críticas si no habéis corrido a verlas ya.
Pafman
El titán de Logroño ha sido otro superhé.. personaje de tebeo español que tras quedar congelado en los 90, regresó en la década de los 2000. Joaquín Cera, uno de los responsables de traer de vuelta a Zipi y Zape, lo creó en 1987 como parodia de los cómics americanos. Pafman es un superhéroe torpe y bastante obtuso (no, la verdad: es idiota perdido) que suele luchar contra distintos villanos, cuyos planes suelen ser muy chungos. Normalmente, sus aventuras acaban como el rosario de la aurora. Sin embargo, y a pesar de un humor muy parecido al de Mortadelo y Filemón, Pafman suponía una revolución respecto al resto de personajes de Ediciones B: era tremendamente friki.
Su autor, Cera, no paraba de hacer referencias a los videojuegos, el anime y el cine. De hecho, muchos personajes estaban inspirados en Dr. Slump, Terminator o incluso en Dragones y Mazmorras. Al recurrir de manera habitual a personajes de otras ficciones, introduciéndolos en el cómic, resultaba tremendamente divertida. De hecho, en uno de sus últimos álbumes, las referencias a World of Warcraft, Dungeons and Dragons y El Señor de los Anillos son constantes. Este último, permitid que os insistamos, es tan divertido, que os recomendamos encarecidamente su lectura, ya que los gamers y comicófilos le sacaréis muchísimo partido. Se titula Pafman: En la Tierra Mediocre y lo podéis encontrar con relativa facilidad en grandes superficies y comercios online.
El Capitán Trueno
¡Un clásico donde los haya! Aunque Víctor Mora, su creador, hace mucho que no escribe nada del personaje, el Capitán Trueno sigue vivo. Pero, eso sí, no de manera tan prolífica. Aquí donde le veis, el Capitán Trueno, un guerrero cruzado de origen español, fue el personaje más popular de los tebeos en los años 50. A partir de la década de los 70 comenzó un lento declive que fue capeando mediante la adaptación del discurso tradicional (tildado de xenófobo por algunos críticos hoy en día) hacia uno más abierto e integrador. Aunque, maticemos, en general, el Capitán Trueno era mucho más progresista que otros héroes de su tiempo.
En la década de los 80 y 90, sus aventuras se sofisticaron, tornándose más cercanas al cómic europeo en grandes álbumes que recordaban a los presupuestos de Slaine, Conan el bárbaro y otras historias de fantasía y espada. Armonía Rodríguez, esposa de Víctor Mora, publicó en 2006 El Gran Libro del Capitán Trueno, un compendio que servía de guía imprescindible del personaje. Sin embargo, el remate para nostálgicos fue el cómicEl Último Combate (2010), de Ricard Ferrándiz y Joan Boix. En él, el héroe afrontaba su último desafío antes de convertirse en leyenda. No sería su última historia editada. Distintas historias como Atlántida o El Capitán Trueno y la espada invencible se editarían en los años siguientes.
Por cierto, el Capitán Trueno tiene también una película de acción real, realizada en 2011 y que recibió pobres críticas, a excepción de su protagonista, Sergio Peris-Mencheta.
Los Xunguis
Antes os hemos dicho que Cera y Ramis fueron los responsables de la supervivencia de Zipi y Zape y tambíén que Cera logró que su Pafman volviera a verse en numerosas. En 1992, Joaquín Cera y Juan Carlos Ramis crearon una serie de libros al estilo ¿Dónde está Wally?" en el que los lectores tenían que encontrar a los Xunguis en medio del caos del planeta Tierra. Les seguirían historietas cortas y, luego, en 1995 y 97 dos álbumes autoconclusivos en la que estos aliens gamberros pasarían de protagonistas a antagonistas.
Actualmente los dos álbumes se encuentran recopilados en un tomo de Superhumor de los Xunguis y hay numerosos álbumes de los Xunguis, publicados por Ediciones B.
El Guerrero del Antifaz
Cerramos nuestra sección de personajes del tebeo español que lograron sobrevivir a los años 90 con un coetáneo del Capitán Trueno, considerado por muchos su primo hermano: El Guerrero del Antifaz.
Manuel Gago García (autor de Roberto Alcázar y Pedrín) fue el mismo responsable de crear esta serie, inspirada en novelas bélicas medievales. La trama proponía cómo el hijo de un caballero cristiano, criado por un rey musulmán en época de los Reyes Católicos, se volvía contra este al saber de su origen. Para preservar su identidad, por motivo de vergüenza, el caballero ocultaba su rostro, ayudando a los cristianos en la Reconquista.
Debido a su discurso maniqueo y (no nos engañemos) racista y nacionalista, el cómic envejeció muy mal. Posteriormente, la serie adquiriría toques un poco más retorcidos e inexplicables, llegando a introducir samuráis y elementos orientales a finales de los años 70. Recientemente se anunció su regreso en un cómic titulado: Las historias jamás contadas.
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