Until Dawn Rush of Blood es uno de los primeros juegos que hemos probado en PS VR. Se trata de un juego de disparos en el sentido más tradicional, en que el jugador no controla el movimiento (según vuestra edad, la referencia más evidente será Operation Wolf o los posteriores Time Crisis o House of the Dead) pero con el atractivo de la realidad virtual. En esta ocasión no contamos con una pistola de luz, el periférico estrella del género, sino que jugamos armados con dos PS Move, que se transforman en armas (nosotros hemos visto pistolas y escopetas de cañones recortados) en cuanto nos ponemos el headset.
Si habéis jugado a Until Dawn os vais a llevar una sorpresa. Os podéis olvidar del "survival horror" con guiños al cine "slasher" que jugamos hace unos meses en PS4. Cualquier rastro de la aventura original ha desaparecido, salvo por la presencia del psicópata (también llamado el maniaco o el asesino) que tiene varias encarnaciones, y por la posibilidad de controlar a los ocho protagonistas. Ahora nos limitamos a participar en una atracción de feria: una casa del terror, en que una vagoneta atraviesa una serie de escenarios aterradores.
Puede que sea por una ambientación muy cuidada, por el sonido envolvente o el uso de la realidad virtual, pero Until Dawn Rush of Blood sí que consigue ponernos "nerviosos". Desde el inicio de la demo, en que Dan T. el feriante (con el atuendo tradicional de sombrero de paja y camisa de rayas) nos cuenta las reglas del juego -hemos inhalado un gas que nos hace ver cosas extrañas- hasta el enfrentamiento contra un monstruo final, donde acaba el nivel, estamos completamente en tensión.
El desarrollo, sin embargo, es sencillo. Se limita a apuntar y disparar (a dos manos) tratando de esquivar los obstáculos que de vez en cuando se cruzan en el camino de nuestra vagoneta. Y aquí es donde hemos encontrado la principal virtud de Rush of Blood. La selección de escenarios nos encanta; desde el comienzo, en una atracción de feria decadente, pasamos a un matadero, donde los cerdos gritan mientras unas sierras circulares los masacran, y luego a una casa embrujada. La iluminación y el modo en que PS VR juega con nuestros sentidos -la vagoneta parece inclinarse, o caer como en una montaña rusa- nos sumergen en una experiencia muy intensa.
La precisión de las armas es suficiente, aunque no está al nivel de Farpoint, que nos hizo sentir como si empuñásemos un fusil de verdad, y la verdad es que el nivel se nos hizo corto. Y aquí es donde radican nuestras dudas acerca de Until Dawn Rush of Blood. A falta de ver el juego definitivo, que se pondrá a la venta junto con PS VR el próximo 13 de octubre, la profundidad del juego se limitaba a sobrevivir al paseo y recoger extras (disparando a unas dianas ocultas por el nivel). No estamos seguros de que, después de jugarlo un par de ocasiones, vaya a perder el impacto de la primera partida.
El juego de Supermassive Games y Sony tampoco parece muy largo. Serán siete niveles, entre diez y quince minutos de duración, con caminos alternativos y cuatro niveles de dificultad. El final auténtico sólo se revelará si conseguimos superar el juego en dificultad máxima, con una sola vida, lo que va a ser una tarea complicada. En cualquier caso, el precio de este juego de terror también está muy ajustado, tan sólo 19,90 euros por una experiencia que aprovecha al máximo PSVR. Porque, si os lo estáis preguntando, el juego se ve perfectamente nítido por muy rápidos que sean nuestros movimientos con el headset de realidad virtual, y en ningún momento nos sentimos mareados. Cuando terminamos de jugar el nivel de demo, de hecho, nos quedamos con ganas de seguir. Si vosotros también os habéis quedado con ganas de más, aquí os dejamos con los mejores juegos de terror de realidad virtual.
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