Análisis de Call of Duty Ghosts para PS4

No tiene sentido detenerse en explicar por enésima vez todo lo que nos ofrece Call of Duty Ghosts. Aquí podéis ver nuestro análisis y también el comentario de la versión para Wii U. El "shooter" desarrollado por Infinity Ward ha incorporado pequeñas novedades en la campaña (como el uso de una unidad K9, el perro Riley, el francotirador remoto o los niveles en el espacio) para "animar" un desarrollo espectacular pero que apenas ofrece libertad de acción. En lo que respecta al multijugador, la versión de PS4 (como la de Xbox One que podéis ver analizada aquí mismo) incorpora un total de 18 jugadores, con los mismos modos de juego del original y, por supuesto las opciones de personalización reunidas dentro de "crea un soldado". Ya adelantamos que el juego "next gen" también cuenta con los extras modo pelotones y modo extinción, contra los aliens, así que es mejor que dejemos a un lado estos aspectos comunes y nos detengamos en las diferencias.

Como ocurría en Xbox One, el juego se beneficia de las funciones sociales de la consola, y nos permite compartir vídeos a través del botón share (ha desaparecido el modo cine de CoD Black Ops II). Sin embargo, el panel táctil del mando no se aprovecha (y tampoco la luz que hay en el frontal del Dual Shock 4). La conexión de Call of Duty Ghosts en PS4 también cuenta con servidores dedicados, y funciona de forma fluida, sin apenas cambios respecto a otras consolas. Por cierto, el juego requiere instalación en el disco duro, lo que nos puede llevar más de 30 minutos, y además hay que pagar la suscripción a PSN para jugar. 

Entonces ¿dónde marca las diferencias?  Como os hemos adelantado, la mejoría es puramente visual. Todas las versiones de Call of Duty se mueven a 60 frames por segundo, pero esta tasa es más estable en las consolas de nueva generación. Puede que en PS4 observemos algún pequeño salto que no hay en Xbox One, pero en este sentido son casi idénticas. Si las ponemos una junto a otra, el juego es más nítido en la consola de Sony (se nota especialmente con televisores grandes). La paleta de colores es más oscura y la luz y los reflejos son aún mejores. Lo malo es que si no ponemos ambos juegos uno junto al otro, todo esto es inapreciable. Y tampoco marca la diferencia respecto a los juegos "inferiores" de PS3 y Xbox 360. 

Es verdad que se trata de la mejor versión de todas, y que Sony ha facilitado las cosas para pasar de la versión de PS3 a la superior. Pero seguimos sin encontrar los elementos diferenciadores que justifiquen la potencia de la nueva consola. Habrá que tener paciencia, y ver lo que puede dar de sí el motor gráfico de IW en las futuras entregas para PlayStation 4.