Earth Defense Force 2: Invaders From Planet Space - Análisis

Earth Defense Force, la mítica serie que nació en un sello de bajo presupuesto -Simple Series de D3 Publisher- y que creció hasta independizarse y formar su propia saga, acaba de volver por segunda vez, tras Earth Defense Force 2017 Portable, aVita. Y lo ha hecho por partida doble, tanto en digital como en formato físico, cortesía de Badland Games. Un título que, sin ningún tipo de dudas, conquistará a los fans de la acción.

Como su propio título adelanta, Earth Defense Force 2 es un remake para Vita del segundo juego de la serie, aparecido en PS2 hace más de una década. Como aquél, estamos ante un juego de acción puro y duro, donde nuestra principal actividad se limita a disparar, disparar y seguir disparando a ingentes hordas de invasores alien, entre los que hay hormigas gigantes, robots que parecen sacados de La Guerra de los Mundos e incluso clones de godzilla. Vamos, serie B en estado puro.

Una máquina de matar

Un desarrollo que se repite a lo largo y ancho de sus cerca de 80 misiones, cuya dificultad va creciendo de forma exponencial, y que van introduciendo elementos como la posibilidad de conducir vehículos. Tres, para ser exactos: una moto (muy veloz y difícil de controlar), un helicóptero -con una fuerza destructiva limitada- y un tanque, que sin duda es el más efectivo.

La trama que une todas las misiones trata del resurgimiento de una invasión alienígena, 20 años después de que una nave nodriza se estrellase en la Tierra. Así, las misiones se ambientan en ciudades como Londres (al lado del Big Ben) y en otras partes del mundo, en lugares tan dispares como una ciudad de noche o las galerías excavadas bajo tierra por los aliens.

Todas las misiones, como decíamos, consisten a grandes rasgos en liquidar todos los puntos rojos que aparecen en nuestro radar. Otras, en acabar con un jefe final. Pero poco más hay que hacer: ni cumplir objetivos secundarios, ni realizar alguna acción especial: solo matar, matar, matar... ¿y después? Seguir matando.

Modos y opciones para refinar la experiencia

A esta tónica general se suma otro elemento y es que, algunos enemigos, al ser masacrados, sueltan ítems como aumentos de armadura o nuevas armas. Recogerlos es clave para mejorar a nuestro personaje, ya sea descubriendo nuevas armas (podemos llevar 3, entre escopetas, lanzacohetes, rifles de precisión...), lo que nos va permitiendo adaptar nuestra forma de jugar a la misión.

Como hemos adelantado, la dificultad de las misiones va aumentando de forma considerable según avanzamos en el juego, y lo que comienza siendo un paseo sin excesivas dificultades, se acaba tornando una pesadilla según avanzamos. Ahí es donde entra en juego otra de las virtudes de Earth Defense Force 2: el cooperativo. Hasta 4 jugadores pueden unirse online o ad-hoc para superar las misiones que el anfitrión tenga desbloqueadas (online podemos elegir cuales queremos que estén disponibles). Sobra decir que es en cooperativo es donde el juego brilla a su máximo potencial.

También incluye otro modo multijugador, tanto ad hoc como online, llamado Rumble. A grandes rasgos, se trata de un modo versus competitivo en el que hasta 4 jugadores pueden “sobarse el hocico”. El único problema es que, hoy por hoy, resulta bastante complicado encontrar jugadores online, tanto para el modo cooperativo como para el competitivo.

Y no es su única novedad. También se ha añadido una tercera clase de soldado, que se une a la infantería (es tipo de unidad más equilibrado) y Pale Wing (capaz de volar con un jet pack). Esta nueva unidad es el llamado Air Raider, y en su arsenal brillan las armas de apoyo, tales como trampas o minas. Jugar con él en solitario es complicado, pero como personaje de apoyo en cooperativo es bastante divertido.

Una remasterización digna de la mejor serie B

También se ha añadido un nuevo doblaje en inglés (que ambienta de lujo, por ejemplo, con los gritos de otras unidades EDF que están siendo masacradas), así como un ligero lavado de cara. Ahora todo se mueve más fluido (no están presentes las horrendas ralentizaciones del juego de PS2) y todo tiene un poquito más de nivel de detalle... aunque se le siguen notando sus raíces de PS2.

Es más, hasta ciertos efectos visuales están acorde a su naturaleza de “serie B”, como por ejemplo, la destrucción del entorno. Edificios, puentes y otras construcciones son susceptibles de caer con nuestros “pepinazos” y ver como se desmoronan, como si fueran de cartón piedra, añade otra capa más a su encantadora “cutrez” que remite a las películas de los años 50.

Por último, no menos encomiable resultan las enormes opciones de configuración de control (podemos controlar la cámara incluso tocando la pantalla táctil). Un detalle que se agradece en un shooter que se basa tanto en la puntería... aunque el sistema de control por defecto, con los dos sticks de Vita, funciona bastante bien y es lo suficientemente preciso para avanzar sin problemas.

El broche lo ponen los efectos sonoros, en especial los sonidos de los aliens y las armas, culminando así una ambientación que captura perfectamente el tipo de cine al que rinde homenaje. Un detalle más para un juego que, a pesar de las apariencias, a pesar de lo “cutre” que pueda parecer es tremendamente divertido y con una capacidad de enganche e-nor-me.

Su desarrollo es repetitivo, sí, pero ofrece una enorme cantidad de contenido y si lo dosificas en partidas no demasiado largas, para evitar caer en el tedio, tienes juego y diversión para rato. Suma el cooperativo y el resultado es un juego de acción divertido, que gustará sí o sí a los fans de la acción, aunque no está de más recordar que llega completamente en inglés...  Si no tienes Vita, también tienes a su hermano mayor, Earth Defense Force 4.1 en PS4.