Hace 20 años, la saga intocable del fútbol, FIFA Soccer, vio cómo temblaba su reino ante la llegada de una saga casi desconocida: International Superstar Soccer Pro llegó a PlayStation y dio el pelotazo... Nunca mejor dicho. Los fans ya se habían alegrado con un par de entregas de International Superstar Soccer desde la etapa de gloria de Super Nintendo, pero con el nacimiento de la coletilla "Pro" fue cuando llegó su verdadera eclosión.
Iss Pro, conocido en Japón como Winning Eleven 97 (y el rimbombante Goal Storm 97 en EEUU), aportaba varias revoluciones frente a sus predecesores: por un lado, tenía un apartado técnico de escándalo, con gráficos totalmente poligonales y enormemente fluidos; por otro, una sensación de simulación inaudita, que afectaba tanto a los movimientos del balón como al repertorio de trucos que los futbolistas podían llevar a cabo. Paredes, pases al hueco o centros se unían a una barra de potencia que permitía ajustar la precisión de los tiros como nunca.
También era un juego más difícil, pero eso era precisamente lo que parecían desear los jugones, demasiado acostumbrados a unos partidos arcade en los que no costaba llegar al 10-0. El resultado no podía ser más claro: en la lista de alternativas del género, Hobby Consolas colocó a ISS Pro por delante del todopoderoso FIFA 97. Es cierto que el juego de Electronic Arts tenía más equipos y opciones (ISS Pro solo contaba con 32 selecciones nacionales y con nombres falsos), pero las sensaciones de estar ante un partido de verdad eran más creíbles y disfrutables con el nuevo contendiente. No aparecía el nombre de Zubizarreta o Valderrama, pero era como tener a los jugadores del momento "en espíritu" dentro del juego.
Ya sabéis cómo continuó la historia: la saga seguiría adelante con más entregas de ISS Pro (Nintendo 64 también tendría sus propios títulos de la saga) hasta convertirse en Pro Evolution Soccer en 2001. Para eso todavía quedaban varios años, pero en 1997 ya habían nacido dos nuevos iconos. Por un lado, el enfrentamiento entre las sagas de Konami y EA Sports (cuyo reinado incuestionable desde 1994 ahora debía pelearse a fondo), que quizá hoy esté desequilibrado, pero en aquella época se comparaba al mejor de los derbis. Por otro, usar la expresión "echarse un Pro" como sinónimo de pasarlo como nunca jugando en grupo a la consola.
La semana que viene seguiremos investigando los grandes análisis de videojuegos que hicieron de 1997 un año inolvidable. Mientras eso sucede, podéis repasar estos otros análisis históricos de Hobby Consolas:
VALORACIÓN:
Para DISFRUTAR del fútbol, este título funciona tan bien que todas sus ausencias se pasan por alto. Dejó atrás a sus competidores.LO MEJOR:
Su sensación de simulación, absolutamente rompedora en la época.LO PEOR:
Se quedaba algo corto de opciones y variedad de equipos.Plataformas:
Retro
Versión comentada: Retro
94
Excelente
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