Maldita Castilla EX - Análisis para Xbox One

¿Echáis de menos las aventuras arcade que jugabais en los salones recreativos por el módico precio de cinco duros la vida? Pues no os perdáis nuestro análisis de Maldita Castilla EX, ya que hay gente que no solo echa de menos esos juegos que marcaron una época, sino que se dedican a homenajearlos, pixel a pixel y sprite a sprite y ofrecerlos a la comunidad de jugadores para que todos puedan disfrutar de este precioso hobby.

Juan Antonio es un publicista y diseñador malagueño que, como todo hijo de vecino, tiene una familia y unas obligaciones que atender. Sin embargo, por la noche se transforma en Locomalito (a quien pudimos entrevistar hace poco), un insaciable desarrollador de videojuegos y creador de experiencias clásicas. ¿Su lema? Crear juegos clásicos que vayan directos a la acción, homenajear a los juegos arcade clásicos sin ocultar las referencias y, sobre todo, recompensar al jugador que ha invertido tiempo en sus juegos con secretos, bonificaciones y huevos de pascua.

Lo mejor de Locomalito es que lleva más de 10 años creando videojuegos que ofrece de forma gratuita en su web, y con cada juego ha ido aprendiendo nuevas cosas y refinando la fórmula. Maldita Castilla llegó en 2012, no es su última obra, pero sí es una de las más redondas. 

La versión extendida llegará mañana a Xbox One por 11,99€ (aunque tendrá un descuento hasta el 1 de agosto de un 10%) y no solo mantiene la calidad del original, sino que introduce nuevos elementos, como armas y niveles, y mejora algunas de las cosas del original que podrían no funcionar tan bien hoy en día.

¡Por el Rey y por Castilla!

Aunque Maldita Castilla EX es un juego que aboga por la acción directa como primera y última premisa, hay una historia, un contexto a esa acción desenfrenada. Es el año 1081 y la bruja Moura ha dejado caer cinco de sus lágrimas por las tierras de Tolomera del Rey, algo que ha desencadenado que una horda de muertos vivientes y otras bestias demoníacas, como Arpías o algún que otro Ñuberu, campen a sus anchas por la tierra de Castilla. 

Uno de los elementos que hacen grande a Maldita Castilla es que no solo el escenario está inspirado en pueblos y ciudades de nuestro país, sino que la mitología, casi en su totalidad, es la nuestra. Gamusinos, el Bú, los Malismos o el Tragaldabas son algunas de las criaturas que nos encontraremos en Maldita Castilla (amén de alguna sorpresita novelesca) y es algo que, además, conseguirá arrancarnos más de una sonrisa, porque a todos nos han asustado de pequeños con alguno de los monstruos de este juego.

Nuestra misión será recuperar las lágrimas de Moura, algo que no solo no será tarea fácil, sino que desencadenará diferentes finales en función del tiempo en el que nos pasemos el juego, los secretos que encontremos y las lágrimas que tengamos al finalizar la partida.

Para devolver el mundo a la normalidad, el Rey Alfonso VI manda a cuatro de los mejores caballeros del reino a Tolomera. Nosotros encarnaremos a Don Ramiro, pero nos acompañarán, de vez en cuando, Quesada, Don Diego y Mendoza. Don Ramiro es un caballero de estatura media que lanza… ¡cuchillos! 

Si gráficamente ya nos recordaba a Ghost’n Goblins, los paralelismos entre Don Ramiro y Sir Arthur terminarán de convertir el juego en todo un homenaje al clásico de Capcom, un homenaje hecho desde la pasión por los juegos clásicos. Jugablemente, Maldita Castilla EX es un juego tremendamente justo. No es tan difícil como los juegos de antaño, pero esto no significa que nos vayan a poner las cosas fáciles.

Tendremos que medir los saltos al milímetro, sobre todo cuando estemos recibiendo ataques enemigos, y necesitaremos estudiar bien los ataques para que no nos sorprendan en ningún momento (al morir, por ejemplo, unos enemigos explotan lanzando huesos en distintas direcciones, mientras que otros, los muertos vivientes, resucitan al dar unos pasos).

Casi todos los enemigos caerán de un golpe, pero la dificultad radica en la cantidad de enemigos que hay, sus movimientos, los ataques a nuestro alrededor (como bolas de fuego, dagas o burbujas) y el propio escenario. Moriremos, y moriremos mucho hasta que nos aprendamos los escenarios, pero habrá infinitos continues, aunque esto sea algo que reiniciará nuestra puntuación.

No creáis que iremos desnudos a la batalla, ni mucho menos. Al empezar el primer nivel, y al utilizar un continue, Don Ramiro lanzará dagas a sus enemigos. A medida que avancemos por el escenario veremos cofres que tienen varias armas para elegir, desde hocetas (muy efectivas), bombas o boleadoras (las mejores armas del juego, en mi opinión), además de escudos, bonificadores como invulnerabilidad momentánea, botas de doble salto y hadas que nos ayudarán en combate. Os dejamos el gameplay del primer nivel para que os hagáis una idea:

Vaya, que no va a ser fácil, pero eso lo convierte en un juego tremendamente reconfortante cuando conseguimos terminar un nivel. Eso sí, aunque en el original no hay checkpoint entre niveles y no podemos continuar la partida donde lo dejamos, obligando al jugador a completar el juego en una sentada, en esta versión extendida si tenemos un punto de guardado entre niveles que nos permite continuar la partida, algo a agradecer, ya que los nuevos niveles nos obligarían a pasarnos el juego en más de una hora de sesión continua (sin morir), un tiempo que no siempre tenemos disponible.

Esto es completamente intencionado, ya os hemos dicho el amor que Locomalito tiene por los juegos clásicos, y la intención es emular las partidas en las máquinas arcade de los salones recreativos, esas que conseguían desplumarnos de pequeños y nos obligaban a buscar monedas donde no las había.

Una versión extendida

Aunque el espíritu del original sigue intacto, Locomalito ha introducido algunos cambios en la versión extendida para consola. No sólo se han añadido elementos (como armas y escenarios), sino que se han corregido algunas cosas que no funcionaban.

Un ejemplo clarísimo lo encontramos al empezar el segundo nivel, en el que encontramos las botas de doble salto que ahora, por suerte, sí tienen una utilidad real en el juego al ofrecernos un doble salto real y no quedarnos suspendidos en el aire. Algunos enemigos también dan la sensación de haberse cambiado en algunas fases del juego. 

También se han añadido nuevos escenarios, como las catacumbas, el acueducto, algo que es muy curioso ya que, como nos contaron en nuestra entrevista a Locomalito y Gryzor87, el nivel del acueducto ya estaba en los planes iniciales, por lo que se han recuperado esos bocetos para crear los nuevos escenarios.

Ademas, en el menú encontraremos un códice que explica todos los elementos del juego, una especie de manual digital cargado de humor y nuevas melodías.

Pixel-art

En el apartado visual, Maldita Castilla poco ha cambiado respecto a lo que vimos hace casi cuatro años en la versión de PC. Encontramos un producto que es un homenaje (se que repito la palabra pero es la que mejor lo define) a Ghost’n Goblins, por lo que encontramos un diseño muy parecido, pero mucho más refinado visualmente.

Los enemigos están muy bien recreados y es de esos juegos que volverán a hacernos pensar cómo se puede hacer tanto con tan pocos píxeles. Los enemigos son una versión ‘castellanizada’ de algunos que vimos en juegos como Ghouls'n Ghosts (los murciélagos que te tiraban vasijas en llamas ahora son búhos), y algunos sprites nos recordarán sobre manera a la época de mediados de los años 80. Además, en esta versión extendida tendremos una serie de filtros que emulan diversas máquinas y que os dejamos en una galería bajo estas líneas:

Ver galería

Filtros de Maldita Castilla EX (8 imágenes)

Lo que termina de meternos de lleno en dicha época es el sonido, un sonido (y banda sonora) creado por Gryzor87, un artista que emula el sonido del chip Yamaha YM2203, remasterizado para la versión de Xbox One con sonido estéreo y nuevos temas, tanto para los menús como para los nuevos jefes y fases. ¡Ah! Importante, esta versión extendida llega con textos en castellano.

Audiovisualmente, Maldita Castilla EX es un regalo para todo jugón ‘’viejuno’’ que se precie, pero también despertará la curiosidad del público más acostumbrado a ver otras obras de arte como Uncharted 4 o The Witcher 3.

Conclusión

Maldita Castilla EX mantiene todo lo bueno del original, como la dificultad justa, los incontables secretos escondidos por el escenario, los diferentes finales dependiendo de nuestras acciones, el apartado visual y el diseño de niveles, así como sus giros de guión (si se les puede llamar así), y lo mejora con nuevas melodías, añadidos jugables en forma de armas y cambios en los enemigos, así como nuevos niveles y filtros que le dan al jugador más posibilidades para ver el juego como él quiera, desde un filtro CRT con laterales de recreativa hasta un modo panorámico.

Estamos ante un clásico actual, un juego que consigue todo lo que se propone y nos hará pasar un gran rato frente a la consola. El Quijote es una obra universal, es algo indiscutible, pero Maldita Castilla también debería ponerse de ejemplo en las carreras de videojuegos.

Es un videojuego hecho con pasión, con la mera intención de compartir un hobby, y, además, es uno de los mejores videojuegos retro actuales que hemos jugado. ¿Podría tener más niveles en esta versión extendida y más extras? Sí, pero con lo que tiene ya nos lo hará pasar en grande.