El juego que justificó la llegada de la nueva generación de consolas es todo un portento técnico pero también jugable. The Witcher 3: Wild Hunt es un juego de rol como los de antes, sin darnos mascada la historia ni los acontecimientos, y suponiendo un reto a cada uno de nuestros pasos. La producción de CD Projekt RED es inmensa, y nos pone en la piel del cazador Geralt de Rivia en busca de su hija adoptiva.
Pero el bueno de Geralt no lo tendrá nada fácil, porque el mundo del juego es traicionero, nada es lo que parece y si tus amigos te mienten, los enemigos, tanto humanos como bestias, no te darán respiro en los combates. Es por ello que para sobrevivir a una cacería que se vuelve contra ti necesitas de consejos, y por eso hemos confeccionado estos trucos para The Witcher 3: Wild Hunt que te van a ayudar en unos primeros pasos en la aventura para comenzar con altas garantías.
Elige bien el nivel de dificultad
Esta es una de las primeras decisiones que debemos tomar en el juego, y versan sobre qué nivel de dificultad queremos y qué consecuencias tiene cada uno. En total hay cuatro niveles de dificultad en The Witcher 3: Wild Hunt, y si bien los dos primeros son los más sencillos, los dos últimos requieren suma destreza suponiendo un gran desafío.
- La Historia y Punto: es el nivel más ‘facilón’ del juego, sólo recomendado si acabas de empezar en el mundo de los videojuegos o tu máxima experiencia en este sector es con Candy Crush.
- La Historia y la Espada, es el nivel de dificultad que nos viene por defecto, y si bien no está mal, aconsejamos que subas a un nivel más si ya has jugado alguna vez a este tipo de juegos. Si por el contrario te ves justo con los RPG tradicionales, puedes optar por elegir este modo.
- Sangre, sudor y lágrimas: aquí los enemigos son más hábiles y encima no recuperas salud al meditar, así que te tocará tirar de pociones y de malgastar tu dinero en recuperación y hechizos. Sólo para jugadores experimentados en el género o en la serie.
- La Marcha de la Muerte: allá tú, pero lo vas a pasar muy mal en este modo. Aconsejable para una segunda partida si tienes la autoestima muy alta tras pasarte el juego una vez.
Aprende a combatir, olvídate de otros juegos
El combate en The Witcher 3: Wild Hunt es diferente a otros títulos del género. Aquí no te vale con atacar de frente, dar dos saltos y echar un hechizo, porque tienes las de perder. No hay pasos predefinidos para realizar buenos combates y depende de los enemigos. En todo caso vas a realizar muchas combinaciones estilo golpear, esquivar, rodar, lanzar hechizos y bloquear. Practica con los enemigos de la primera zona, y nunca te enfrentes a más de uno al mismo tiempo. Diversifica esfuerzos, y no te olvides de hacer evasiones y bloqueos.
Y medita tras la batalla, sólo necesitas de una hora virtual para descansar y tener llena la vitalidad de nuevo.
Conviértete en maestro de las señales
Geralt de Rivia no es un mago al uso, pero es capaz de lanzar pequeños hechizos en forma de señales. En concreto puede lanzar hasta cinco tipos de señales:
- Aard: aturde a los enemigos para atacarles después, es una especie de impacto telequinético.
- Igni: arroja una llamarada, afecta incluso a las armaduras si lo subes de nivel.
- Yrden: es una trampa circular en el suelo, en cuanto caiga un enemigo vete a darle por todos los lados.
- Quen: te rodea de un escudo por 30 segundos, y no sólo te protege, sino que también otorga algo de daño al enemigo. Eso sí, al usarlo no podrás regenerar tu vigor, con lo que no podrás lanzar otro hechizo después.
- Axii: un lavado de cerebro para que los enemigos más débiles se pongan de tu lado.
Pociones y aceites: la alquimia es tu amiga
No ceses en tu búsqueda de recetas de fórmulas, encuentra las marcas de las hojas en el mapa para saber lugares donde recolectar tipos de plantas y materiales para crear pócimas. Antes del combate prepárate mediante la alquimia como la poción ‘rayo’ para aumentar el daño temporalmente, o incluso acelera la recuperación de tu vida.
Equípate a la última
Lee la descripción de las armas y armaduras, para saber qué son su fuerte y a qué son vulnerables. Algunas dan resistencia a ciertos elementos. Recuerda que las armas con color en el menú son las más potentes. No las vendas.
Misiones secundarias
No suelen estar señalizadas y te las tienes que buscar tú mismo. Debes hablar con todo el mundo, incluso con aquellos que no te dijeron nada interesante tiempo atrás. Toma los panfletos en los tableros de trabajo en las aldeas para desbloquear misiones. Recuerda que tus respuestas tienen consecuencias, y eso puede ocasionar un efecto dominó que pueda desbloquear una misión secundaria en un lugar que ya habías visitado antes.
Desbloquea habilidades
Las hay muchas y muy variadas, pero es aconsejable desbloquear las siguientes en el primer tramo de aventura:
- Bloquear flechas enemigas, la mayoría de los enemigos humanos vienen acompañados de algún arquero, así que ya tendrás mucho ganado.
- El Sol y Las estrellas: recuperarás vida gradualmente por el día y adrenalina por la noche.
Saquea todo lo que puedas
Un héroe se aprovisiona, nunca roba. Lo dice la ley de los videojuegos. Así que saquea todo sin sentirte culpable, desde cofres, cajas, hierbas y hasta puedes robar, pero sin que te vean.
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Activa los sentidos
Gracias a ellos verás los objetos relevantes del escenario. Con eso podrás tener una idea de dónde hay misiones secundarias. Encontrarás objetos útiles para usar en la alquimia, y hasta para mejorar las armas y las armaduras.
Combina mutágenos
Cada habilidad viene representada por un color: rojo para el combate, azul para los signos y verde para la alquimia. En el juego encontrarás mutágenos de distintos colores. Asígnalos a las habilidades del mismo color para potenciar su efecto. También vas a poder combinar mutágenos similares para mejorarlos mediante la alquimia.
Y esto son los primeros consejos y trucos para The Witcher 3: Wild Hunt que debes saber sí o sí para comenzar con garantías la dura y apasionante aventura de Geralt de Rivia.
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