Cosas muy molestas que PS5 y Xbox Series X no deberían hacer
PS5 y Xbox Series X son los grandes protagonistas del año 2020. Las consolas abanderadas de la nueva generación vienen a revolucionar la industria del videojuego y para ello van a necesitar establecer unos cuantos cambios.
La actual generación ha establecido una serie de costumbres que han terminado siendo algo molestas para muchos jugadores. Por eso, con el cambio de aires que pretenden dar PlayStation 5 y Xbox Series X, no estaría mal que solucionasen algunos aspectos de este tipo.
En la lista de hoy hablaremos de cosas muy molestas que PS5 y Xbox Series X deberían de cambiar o por lo menos no deberían de hacer.
Pases de batalla llenos de misiones y desafíos
Durante los dos últimos años, los sistemas de recompensas dentro de los videojuegos se han visto cambiados por la llegada de Fortnite y los pases de batalla. Esta evolución de pago ha hecho que muchos otros juegos busquen una fórmula similar o igual de lo que hemos visto en el juego de Epic Games.
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Tras un tiempo con este sistema, la nueva generación de consolas podría realizar un cambio en él, puesto que en muchas ocasiones, la gran cantidad de desafíos, recompensas y otras decenas de estímulos hacen sentir la experiencia de juego un tanto artificial y desvía la atención hacia conseguir objetos y cosméticos en vez de potenciar la diversión.
Los largos tiempos de carga
Cada generación da un pasito más hacia la completa inmersión dentro de los juegos. Poco a poco hemos ido alcanzando niveles y estándares de calidad realmente altos en cuanto a la potenciación de la experiencia de juego, pero aún nos queda dar un último paso.
Uno de los obstáculos más grandes en lo que se refiere a este aspecto son los tiempos de carga. Dadas las capacidades técnicas de las consolas de hoy en día y a la gran calidad de los juegos, estos son imprescindibles para cargar las grandes líneas de código de todos ellos. Sin embargo, PS5 y Xbox Series X han prometido que los tiempos de carga se van a reducir de maneras abismales, algo que celebramos sin duda.
Tener que esperar a la instalación de los juegos
Una de las grandes fallas de las consolas es que cuando compras un título y estás ansioso por jugarlo una enorme barra de carga te impide hacer en muchas ocasiones. Los procesos de instalación de juegos son algo que desespera a más de un jugador y con razón.
Los títulos cada vez pesan más y esto se traduce en mayores tiempos de instalación que impiden disfrutar de ellos al momento. En una época en la que todo lo que se hace es instantáneo, este factor debería de ser potenciado en la nueva generación de consolas.
Ports y remasters constantes
No nos confundamos, traer de vuelta los viejos clásicos y darles una buena capa de pintura es algo que nunca viene mal. Realizar remasters y ports a otras consolas de títulos que salieron hace mucho es algo que tiene sus cosas buenas, pero también su punto negativo.
El lanzamiento de remasters impide que esos mismo estudios desarrollen nuevas ideas y, como decíamos, no es una mala acción, pero se ha vuelto demasiado común dentro de la industria. La llegada de la insinuada retrocompatibilidad prácticamente sustituye esta práctica.
Actualizaciones de la comunidad
El poder de los jugadores y usuarios de los títulos multijugador ha ido aumentando gracias a plataformas como las redes sociales. Los cambios dictaminados por los jugadores y las peticiones de nuevas características son cada vez más oídas por las desarrolladoras.
Pese a que esto se ha implementado en los últimos años, los títulos que salgan para PS5 y Xbox Series X deben seguir potenciando las actualizaciones de la comunidad. Si los videojuegos evolucionan hacia un producto de servicio, por lo menos, que sean los usuarios quienes tengan un mayor poder.
Anunciar juegos mucho antes de que estén listos
Los anuncios de videojuegos o de títulos muy esperados por la comunidad en conferencias y ferias como el E3, siempre son bombazos que animan a este sector. Mola ver la tipografía de distintos juegos unida a una espectacular cinemática.
Por desgracia, esta práctica se a extrapolado a la presentación o el anuncio de juegos años antes de su lanzamiento. Esto, al final, es perjudicial tanto para los jugadores como para las compañías anunciantes, puesto que lo que se vende acaba siendo humo, por no olvidar los retrasos también. PS5 y Xbox Series X deberían de intentar que sus juegos no se anunciasen con tanta pomposidad si ni siquiera cuentan con un material sólido a sus espaldas.
Memoria interna de las consolas
Desde luego, si algo hay que se puede potenciar enPS5 y Xbox Series X son sus memorias y capacidad interna. Actualmente, las consolas de Microsoft y Sony cuentan con memorias que necesitan el uso de discos duros externos a mínimo que tengas unos cuantos juegos instalados.
Además, se espera que la potencia de los juegos de nueva generación sea mucho mayor y por tanto, el peso de dichos títulos también aumente. Esta es una de las razones adicionales por la que las nuevas consolas deberían de aumentar su memoria interna.
Control con los parches y actualizaciones
Muchos grandes títulos que salen al mercado llegan con unos cuantos bugs, problemas o glitches que ocasionan problemas a los jugadores que compran esos juegos de lanzamiento. Las compañías trabajan muy duro para sacar sus juegos, pero las precipitaciones en algunos lanzamientos ocasión que los juegos no salgan en el estado óptimo.
La nueva generación de consolas debería hacer que todos esos parches de correcciones y demás actualizaciones tuviesen menos impacto sobre el jugador. Parece que los nuevos SSD van a hacer maravillas con este tipo de asuntos.
Toma de decisiones
Conforme a ido avanzando más la generación, muchas compañías se han ido estableciendo y asentando en un modelo de juego y han podido dejar de lado apuestas más arriesgadas en favor a un desarrollo de títulos más comerciales. Al final, los indies han sido lo que más fórmulas variadas proponen y para esta nueva generación, no estaría nada mal que los grandes estudios desarrolladores creasen títulos con mecánicas y propuestas que nunca antes habíamos visto.
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Estas serían algunas de las cosas que PS5 y Xbox Series X deberían de cambiar con esta nueva generación que se aproxima.
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