Las patentes e invenciones más locas del videojuego que nunca llegaron a materializarse
Todo lo que conocemos, las consolas que jugamos, los mandos, los juegos, los accesorios, nació de una idea. Es la semilla de la que han surgido todos los aparatos que tenemos y usamos. Hayan tenido éxito o no, todos se pueden considerar afortunados de haber pasado la fase embrionaria para materializarse en algo real.
Sin embargo, no todos han tenido tanta suerte. Todo lo que conocemos se ha construido sobre los restos de ideas... que nunca pasaron de la fase patente. En este reportaje vamos a ver algunos de esos aparatos relacionados con videojuegos. Y os advertimos: vais a ver algunas bizarradas importantes.
A decir verdad, hay de todo: desde ideas visionarias que llegaron, en algunos casos, décadas demasiado pronto... a auténticas locuras propias de su tiempo. Si no se llegaron a hacer, es por algo...
Guante protector de videojuegos
Este invento data nada menos que de 1983. El dibujo se explica bastante bien solo: se trata de un guante especialmente diseñado para jugadores de videojuegos (arcade). Se cierra con velcro, y deja las yemas de los dedos libres "para mayor sensibilidad de los controles, a la vez que protege los dedos de abrasiones, cayos y moratones".
No parece mala idea, sobre todo teniendo en cuenta lo duros que podían ser algunas palancas de aquellos tiempos. Ciertamente, hemos visto "guantazos" mucho más sonados...
Divisor de pantalla
¿Cansado de jugar a títulos competitivos multijugador a pantalla dividida y que tu contrincante mire tu lado de la pantalla para saber, por ejemplo, dónde estás escondido y cuántas vidas te quedas? ¡Con este invento hubieras podido evitarlo!
La patente, de 1994, muestra varios tipos de divisores de pantalla, de varios tamaños y materiales, que te aportan la privacidad que necesitas para no perder tu ventaja en Goldeneye. Eso sí, la distancia y colocación de los jugadores puede ser un poco problemática... y al fin y al cabo, esto es algo que fácilmente puedes crear en tu casa como una manualidad.
Vehículo hinchable para simular conducción para Wii
Wii fue una mina de oro para que fabricantes sacasen sus periféricos imitando toda clase de utensilios con el mando alargado de la consola de Nintendo: raquetas, palos de golf, cañas de pesca, escopetas, sartenes...
Esta patente quería llevarlo más lejos, con un vehículo hinchable que maximizaría la inmersión y haría que el volante estuviese en una estructura fija (y no en volandas, como con el Wii Wheel, el periférico oficial de Mario Kart Wii). "Debido a la intensa experiencia del juego de Wii, estas conexiones de seguridad aseguran que el juego se juegue sin caerse si el conductor se excita demasiado".
Aparato para controlar el tiempo que se usa el videojuego
En 1999, antes de que se estandarizasen los controles parentales que permiten a los padres configurar la consola para que solo se pueda usar durante un tiempo determinado y que los hijos no se "envicien", se inventó este dispositivo electrónico que se enchufaría a la consola, y sería capaz de cortar de golpe el suministro de energía pasado un tiempo programado.
Vamos, que si tus padres te dicen que tienes una hora para jugar a Final Fantasy VII, y en esa hora te has quedado pillado en un combate y no te da tiempo a llegar a un punto de guardado... adiós muy buenas. ¿Y por qué no desenchufarlo? La propia patente aconseja que se pegue con pegamento a la consola tras la primera instalación. ¿Qué podría salir mal?
Desbloqueando los secretos de los videojuegos
Así de misterioso es el título de este invento... que en realidad no es más que un sistema que hace que dependiendo del mando que enchufemos, podamos desbloquear contenido exclusivo bloqueado en el juego, "creando una sinergia entre el videojuego y el mando, lo que hará que el usuario prefiera elegir un mando determinado en lugar de otro disponible en el mercado". Una estratagema de marketing de una era pre-DLC, que no hubiera tenido mucho futuro, la verdad...
Método y aparato para producir juegos personalizados usando CDs
Esta patente data de 1993, y lo cierto es que se adelantó a algunos juegos como Eye Toy, o incluso la idea de los avatares personalizados como los Mii. El objetivo es usar una cámara pasa sacarte una fotografía que luego puedas incorporar al juego, para ponerle tu cara al protagonista, por ejemplo.
Eso era posible gracias a la popularización del CD, aunque requeriría un aparato con lector y dos CDs: uno con el juego y otro, un CD pregrabable que contuviera los datos personalizados.
Soporte para el mando para jugar sentado
Este envejeció rápido. De hecho, data nada menos que de 1982, y se trata básicamente de un soporte para poder jugar sentado colocando el mando entre las piernas. Claro, estaba pensado para los joystick de la época. Pero aún así, ¿realmente era necesario algo así?
Videojuegos hablados con conflicto vocal
Lo de "vocal conflict" aparece mucho en esta patente de 1995, que detalla un videojuego que, en esencia, no es muy diferente a las aventuras gráficas o conversacionales con varias ramas de diálogo... solo que aquí todas estarían animadas y con voces reales, y la peculiaridad de que el jugador tendría un mando con tres botones para elegir qué línea decir.
Plataforma móvil para videojuegos de carreras y simulación de vuelos
Quizás demasiado ambicioso como para ser real, esta patente intentaba recrear en casa las sensaciones de muebles arcade como After Burner, cuya cabina se movía para simular que de verdad estabas pilotando un caza. El mecanismo viene minuciosamente detallado en diagramas. Casi te sale más sencillo robar el mueble del arcade que construirlo...
Cambiador de discos automático
Este artilugio sería capaz de cambiar el disco de tu juego automáticamente, sin necesidad de levantarte y cambiarlo tu, casi como un tocadiscos.
Una idea muy loca, pero adelantada a su tiempo, ya que al fin y al cabo es uno de los beneficios de los juegos digitales: poder cambiarlos sin necesidad de levantarte, buscar la caja y meterlo en la consola. ¿Visionario? Bueno... si os decimos que el invento data de 2012, ¿cómo os quedáis?
Fuente: VentureBeat
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