Películas de superhéroes que hemos olvidado con los años, y ha sido la mejor decisión
El olvido y la pérdida de la memoria suelen ser muy duras. Pero, a veces, resultan todo un alivio. Especialmente, con estas películas de superhéroes.
Las películas de superhéroes no siempre vivieron una época dorada entre la audiencia. La consolidación y el éxito del Universo Cinematográfico de Marvel ha generado la falsa sensación de que el género es una mina de oro. Eso ha provocado que haya tantos estudios apostando por los justicieros con superpoderes o los universos compartidos.
Sin embargo, la historia del cine da la razón a todos aquellos que tienen memoria. Los que han logrado olvidar estos estrenos que vamos a comentar son unos auténticos afortunados. Hay algunas películas de superhéroes que es preferible condenar al olvido por cuestiones de salud mental. Se puede llegar a perder la cordura si nos las tomamos en serio.
Hoy viajamos al pasado (no tan pasado) y rescatamos las peores películas de superhéroes de la historia. Pero no solo por lo malas que han sido, sino porque afortunadamente las hemos ido olvidando con el paso de los años. Por supervivencia o por lo que sea, pero las hemos borrado del imaginario colectivo. Y ha sido la mejor decisión posible.
¡Éstas son las películas de superhéroes que nos hemos obligado a olvidar!
Steel, un héroe de acero (1997)
Dirigida y escrita por Kenneth Johnson a partir de la obra de Louise Simonson y Jon Bogdanove, Steel, un héroe de acero es una de las peores películas de superhéroes que se han hecho jamás.
Fue protagonizada por Shaquille O'Neal, estrella de la NBA por aquella época. Con eso se dice todo. Una terrible experiencia cinematográfica que aún nos provoca pesadillas.
Batman y Robin (1997)
Dirigida por Joel Schumacher y protagonizada por George Clooney, Batman y Robin fue el último clavo en el ataúd de la franquicia noventera del Hombre Murciélago.
El cineasta trató de ofrecer un retrato cómico y banal del personaje, próximo a la serie de los años 60. Sin embargo, el estatus del personaje había cambiado. Y las generaciones, también.
Spawn (1997)
Dirigida por Mark A.Z. Dippé y protagonizada por Michael Jai White, Spawn fue la adaptación fallida de la obra magna de Todd McFarlane. Apostó todas las fichas al despliegue audiovisual de la cinta, pero se olvidó de una historia insulsa y un guion pobre y torpón.
Tendrá una segunda oportunidad próximamente. Mejor, porque esto no hizo justicia al personaje.
Daredevil (2003)
Dirigida por Mark Steven Johnson y protagonizada por Ben Affleck, Daredevil es uno de los mayores fracasos del cine de superhéroes en toda la historia.
Netflix probó que el personaje es fascinante y tiene un potencial enorme. Esta adaptación... En fin. Si acaso, demostró cómo no había que llevar a cabo una traslación del cómic a la gran pantalla.
Catwoman (2004)
Dirigida por Pitof y protagonizada por Halle Berry, Catwoman es uno de los mayores despropósitos que ha dado el género. Nos faltan las palabras para describir la experiencia cinematográfica (si se le puede llamar así) que provoca el visionado de este filme.
Si no lo habéis hecho, si aún no la habéis visto, confiad en nosotros: no lo hagáis. Ver Cats sería una decisión más sabia.
Elektra (2005)
Dirigida por Rob Bowman y protagonizada por Jennifer Garner, Elektra fue el intento fallido de llevar a la asesina a la gran pantalla en solitario.
Teniendo en cuenta que es un spin-off directo de la película Daredevil de Ben Affleck, está dicho todo. Ya salió mal la primera vez, ¿qué esperaban con esta segunda? Eso sí, Jennifer Garner está espectacular como Elektra.
Cuatro Fantásticos (2015)
Dirigida por Josh Trank y protagonizada por Miles Teller, Kate Mara, Michael B. Jordan y Jamie Bell, Cuatro Fantásticos es el gran fracaso moderno en el cine de superhéroes.
Tras dirigir la brillante Chronicle, Trank se postulaba como una elección idónea para este reboot. Pero las decisiones creativas y la pobreza del guion tumbaron definitivamente al cineasta.
¿Echas en falta alguna película en esta lista? ¡Déjanos un comentario con tu aportación!
Descubre más sobre David Lorao, autor/a de este artículo.
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