El Clon regresa. Ben Reilly, el gemelo genético de Peter Parker, vuelve de entre los muertos. Tras casi quince años desaparecido, el clon de Spider-man es rescatado del club de los personajes desechados por los editores. Pero ojo, porque su regreso no ocurrirá en la colección madre de la "spider-familia", Superior Spider-man, sino que Reilly volverá en Araña Escarlata, la colección protagonizada por el otro clon de Spidey, Kaine.
O al menos eso es lo que sugiere la ilustración de Ryan Stegman, que sirve de portada al número 21 de Scarlet Spider (Araña Escarlata) de la tirada estadounidense, ejemplar que saldra a la venta en EEUU en los próximos meses.
Y aunque se trate de un simple dibujo, lo cierto es que esta ilustración ha encendido muchos fuegos en los foros de Internet. Hay quien sugiere que se trata de una alegoría que muestra la lucha entre la Araña Escarlata original (Reilly) y la actual (Kaine). Otros, que supone el regreso del personaje a Marvel; e incluso hay quien dice que no se trata de Ben Reilly, sino de otra persona.
De todas formas, aún quedan unos meses para que lo descubramos, por lo que la historia de este Scarlet Spider nº 21 de Christopher Yost y Carlos Barberi seguirá siendo aún un misterio para los fans. ¿Pero, vosotros qué créeís? ¿Será el regreso de Ben Reilly o un simple señuelo para hacer picar a los nostálgicos?
¿Pero qué es eso del clon de Spider-man?
Ojo, spoilers y "proto-spoilers" varios. ¡Si no estás al día con Spidey y quieres hacerlo por tu cuenta, no sigas leyendo!
Posiblemente, llegados a este punto no tengáis mucha idea de quién es Reilly. Si es así, no os preocupéis, porque en breve pasamos a explicaros un poco sobre él.
Odiado por unos, querido por otros, Ben Reilly fue la respuesta de Marvel para regenerar las anquilosadas cuatro series de Spider-man en los años 90. Se trata de un clon creado en las historias de la década de los 70 por un villano llamado el Chacal (Jackal). Reilly volvió a NY en un momento bastante chungo para Peter, y como no podía evitar la llamada del deber, se confeccionó un traje con el que luchar contra el crimen, el cual consistía en una versión completamente roja del uniforme de Spider-man, y una sudadera azul, así como algún nuevo gadget. Había nacido la Araña Escarlata.
De este modo arrancaba la Saga del Clon, uno de los más controvertidos arcos argumentales de Spider-man. Posteriormente, al cabo de unos números unas pruebas genéticas revelaron que Ben era el verdadero Peter Parker, al tiempo que se mostraba que el Spider-man que habíamos conocido desde los años 70 no era otra cosa que un doble genético. Y para solucionar este embrollo, Peter y MJ se iban de la ciudad, entregando la identidad de Spider-man a Ben, como el nuevo-viejo trepamuros.
Esta salida, que posiblemente hubiera jubilado muy bien al Peter Parker tradicional, fue acogida en su momento con abucheos por los fans. Al final la presión desde la propia editorial condujo al turbulento final de la Saga del Clon con artificios bastante toscos que se basaron en la muerte de Reilly a manos de un reciente resucitado Norman Osborn y el descubrimiento de que Peter Parker había sido siempre el Spider-man real, entre otras cosas.
Con este cutre pase de ilusionismo, Marvel volvía a la tranquilidad con Spider-man, y siguió torturando a Peter Parker unos años más, hasta la conclusión de Amazing Spider-man nº 700, de la cual ya os hablamos en Navidad y que dio como paso a la época del Doctor Octopus reconvertido en justiciero.
El caso, volviendo a Reilly, es que con el tiempo el Clon se acabó convirtiendo en un personaje de culto, en uno de esos personajes noventeros que fueron desechados, pero que dejó huella en la memoria de los fans. Tanto que su regreso sigue siendo algo demandado, aunque no se trate de una corriente con fuerza dentro del fandom.
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