Si Mirror's Edge y Dead Island Riptide tuvieran un idilio amoroso y de su relación saliera un hijo que fuera adoptado por The Walking Dead Survival Instinct, dicho descendiente se parecería mucho a Dying Light, el nuevo título cuyo desarrollo acaba de revelar Techland tanto para la presente generación como para la próxima.
Siguiendo la moda de los apocalipsis zombi, en Dying Light nos encontraremos ante un mundo abierto que recorrer a nuestro antojo repleto de infectados y otras criaturas que desearán que seamos su almuerzo. Nuestros instintos de supervivencia nos llevarán a luchar con ferocidad las batallas que podamos ganar con armas creadas por nosotros mismos y a escapar en todas las direcciones de las que sea imposible salir vivos.
En esta ocasión no será Deep Silver la que se encargue de la distribución de Dying Light, sino Warner Bros., que será la responsable de que este nuevo título llegue a Xbox 360, Xbox One, PC, PlayStation 3 y PlayStation 4 el año que viene, ofreciendo muchas ventajas la nueva generación en el concepto que ofrece el nuevo título de Techland. Y es que gracias a la potencia de XO y PS4, los límites a la hora de desarrollar Dying Light dejan de ser un problema, permitiendo crear con facilidad un ciclo de día y noche que cambie totalmente el escenario y la jugabilidad, además de poder desarrollar un escenario enorme abierto a ser explorado y repleto de recursos y objetos que podremos utilizar en nuestra aventura de supervivencia.
La duda es si, teniendo en cuenta las facilidades de las consolas que están por llegar, las versiones de 360 y PS3 de Dying Light dejarán mucho que desear (y y ya no sólo en el aspecto gráfico) respecto a las versiones next gen. Esperamos que Techland nos brinde más detalles al respecto muy pronto y podamos ver su nuevo desarrollo en movimiento.
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