George RR Martin explica por qué es tan importante matar a los personajes más queridos

Tenemos multitud de series y películas tanto en televisión, en los cines como en varios servicios donde la narrativa es bastante plana, sabiendo ya que los buenos van a ganar y los malos perder, o incluso cosas peores. Pero "por suerte" las cosas están cambiando.

Y es que las grandes series y películas que han pasado a la historia siempre han realizado giros de guion inesperados, sobre todo con muertes de personajes principales que mucha gente no se esperaba, y que todavía muchos directores de cine o de series evitan realizar, quizás por miedo a que parte de su audiencia se acabe enfadando.

Pero si has visto Juego de Tronos, seguro que una de las cosas que más te llamaron la atención fue la muerte de muchos de los personajes principales a lo largo de las temporadas, algo criticado, pero que también ha llevado a esta serie a ser una de las más prolíficas de toda la historia.

Y el propio creador de la franquicia, George R.R. Martin, ha hablado a The Independent sobre cierto disgusto por la narración de historias de bajo riesgo, algo marcado desde su infancia cuando no estaba satisfecho con los cómics de superhéroes que estaba leyendo en la época, con historias previsibles que no iban a ninguna parte, y ya sabías cómo iban a acabar.

Pero comenta que luego llegó Stan Lee o Jack Kirby quienes comenzaron a publicar historias en Marvel y cambió todo, con guiones que daban giros inesperados y donde se empezaban a matar a personajes queridos.

Por supuesto, el caso más famoso de George RR Martin con Juego de Tronos fue en la llamada Boda Roja, donde pasaron a mejor vida una serie de personajes principales que no te desvelaremos por si todavía no has visto la serie.

El propio George RR Martin afirma que su reputación como asesino de personajes en la serie ha sido exagerada, y que por ejemplo en Star Wars han muerto muchísimos más personajes que en cualquier otra licencia, recordando al momento donde explota todo el planeta de Alderaan.