Tal y como os contamos en nuestro análisis de God of War, la nueva aventura de Kratos trae bajo el brazo un montón de cambios y novedades que, de primeras, pueden pillarte con la guardia baja. ¿Mundo abierto? ¿Experiencia? ¿Niveles? Por eso hemos preparado estos trucos y consejos para empezar a jugar a God of War, para que te resulte más sencillo recorrer Midgar desde el primer minuto.
Podéis estar tranquilos porque se trata de una guía de consejos generales para empezar a jugar a God of War, en las que no vamos a destripar absolutamente nada de la historia, ni las sorpresas, ni cómo derrotar a tal o cual enemigo.
Dicho esto, sólo nos vamos a centrar en aquello que agradeceréis saber antes de empezar a jugar. Es, en gran medida, todo lo que nos hubiera gustado saber antes de empezar a jugar a God of War. ¿Listos para empezar?
1. Kratos ahora tiene "niveles"
Para ir abriendo boca en esta guía de trucos y consejos para empezar a jugar a God of War, si pulsas el botón Options en cualquier momento, veremos un menú repleto de pestañas dedicadas a las armas, las armaduras... Como podrás ver, tanto el hacha Leviatán como nuestra armadura, tienen sus propios parámetros.
El hacha tiene ahora un nivel numérico de daño, que podemos mejorar en las tiendas de los enanos Brok y Sindri con un objeto específico (que normalmente sueltan los jefes finales). Aparte, podemos equipar un ataque rúnico ligero y otro pesado. Cuando los tengas disponibles, para utilizarlos basta con pulsar L1 + R1 o R2.
Estos ataques rúnicos los vamos aprendiendo por el camino, bien tras derrotar a algunos enemigos específicos o abriendo cofres. Tanto los ligeros como los pesados tienen sus propias características (mayor o menor daño de congelación, aturdimiento...) y requieren tiempo de espera o recarga para volver a utilizarlos.
Al equipar estos ataques puedes ver la animación de Kratos al realizarlos y comprobar si se trata de un ataque de distancia (mayor alcance) o de área (mayor daño en una zona cercana). Así pues, elige los ataques rúnicos que mejor se amolden a tu forma de jugar o a la situación a la que vayas a enfrentarte. A lo mejor la congelación para un enemigo helado sobra, ¿no?
Los ataques rúnicos, como otros elementos del juego que veremos más adelante, también se pueden mejorar utilizando la EXP o puntos de experiencia que vamos ganando a lo largo del juego. Subir de nivel un ataque rúnico puede significar que cause más daño, que el área de impacto sea mayor, que se recargue más rápido...
Por último, en cuanto al hacha Leviatán, otro elemento que determina el daño de nuestros ataques, de los efectos rúnicos y otras características es el pomo del hacha. A lo largo de la aventura encontraremos (o podremos fabricar) distintos pomos, con distintos efectos adicionales.
Antes de cambiar el pomo del hacha, pulsa R3 para comparar lo que vas a ganar y perder respecto al que tienes equipado. Lee también la descripción, porque quizá pierdas algún efecto adicional, como por ejemplo, mejorar el índice de congelación que provocan nuestros combos con el hacha Leviatán.
Y, a todo esto... ¿para qué sirve que el hacha suba de nivel? Pues muy sencillo: aparte de que Leviatán cause más daño, subir de nivel permite ir desbloqueando nuevos movimientos en la pestaña "Habilidades" del menú, como golpes más dañinos, o nuevos ataques mientras que estamos en modo Ira, por ejemplo.
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2. Materiales y mejora del equipo
La armadura de Kratos, al igual que el hacha, también su propia miga. Está compuesta por tres piezas: armadura de pecho, pancera y brazales y no existe un único set, sino que a medida que avanzamos en el juego, abrimos cofres y realizamos tareas opcionales, vamos encontrando nuevas piezas de nuevos sets.
Cada set y cada una de estas piezas, ya sea para los brazos, el estómago o el pecho, tiene unas características únicas, que potencian áreas como la fuerza, los ataques rúnicos o la suerte (con la que podemos ganar más plata o EXP, de la que hablaremos más adelante).
Cada pieza tiene un nivel independiente, que suma para el nivel "global" de Kratos. Es decir, podemos tener una pieza de nivel 7, y que el nivel global de la armadura sea 4. Además, cada pieza tiene un nivel inicial y podemos mejorarla un limitado número de veces (con los pomos del hacha pasa lo mismo).
Cada una de estas mejoras que realizamos tiene un coste en materiales (plata, acero, oro, escamas...), que vamos recogiendo del escenario, al abrir cofres y sarcófagos, de enemigos caídos, al completar misiones opcionales, encontrar tesoros indicados en mapas... etc.
Si tienes varios sets o piezas de armadura para evolucionar, fíjate bien cuál te ofrece más recorrido o capacidad de mejora, porque a lo mejor no compensa potenciar por completo una pieza, si ya tienes una mejor y con mejores posibilidades de evolución (¿para qué gastar los limitados recursos en algo que vas a dejar de usar?).
Para comparar qué ganas y qué pierdes al elegir una u otra pieza de armadura, pulsa R3 y aparecerán las características de ambas (indicando en verde qué ganamos, y en rojo qué perdemos). Fijate también en los niveles, y en la posibilidad de crecimiento de cada pieza, para contribuir a que el nivel de Kratos suba.
Además, muchas de estas piezas de armadura (al principio del juego, sobre todo, tras mejorarlas) nos permiten insertar "encantamientos", que son otro objeto que encontramos o compramos, y que nos permite beneficiarnos de efectos extra (más daño al lanzar el hacha, recibir menos daño por ataques de fuego o hielo...).
El listado es francamente enorme, y muchos de estos encantamientos los obtendremos por realizar tareas totalmente opcionales, de las que no diremos nada por evitar spoilers. Pero, como hemos dicho, merece la pena perder tiempo en el mundo para encontrar este tipo de ayudas.
También existe un cuarto hueco, al final de selección de armadura, en el que podemos insertar un "talismán" que, de nuevo, nos confiere alguna habilidad extra. Dependiendo del talismán Puede activarse pulsando R3 (por ejemplo, para ralentizar el tiempo al lanzar el hacha), o pulsando L1+Círculo para activar una pequeña recuperación de vida o ira. Lee las descripciones de cada talismán, porque los hay de muchísimos tipos.
3. EXP para aprender habilidades
¿Recuerdas cómo se mejoraban las armas de Kratos en los anteriores God of War, con los orbes rojos que absorbíamos de los enemigos? Pues bien, como ya has visto, aquí se mantiene más bien poco de lo que conoces por anteriores entregas de la saga.
Aquí, la moneda de cambio es la EXP o experiencia, que son los puntos que obtenemos tras derrotar enemigos y realizar muchas otras opciones, como os contamos en esta otra guía para obtener más EXP, plata y oro en God of War.
Esta EXP sirve no sólo para desbloquear las habilidades que vamos desbloqueando con las subidas de nivel de Kratos, sino que también nos permite mejorar otras habilidades, como el nivel de los ataques rúnicos o ciertas técnicas que aprende Atreus en la aventura (y que omitimos para evitar destripes).
Así pues, valora qué mejorarás primero, porque quizá no neceistas, o vas a utilizar, todos los ataques y técnicas disponibles en combate. Si tiras más de ataques rúnicos, quizá te interese mejorarlos antes, pero eso depende de cómo juegue cada uno.
4. Mundo abierto: explora siempre que puedas
Por si aún no lo hemos dicho suficientes en esta guía de consejos y trucos para empezar a jugar a God of War veces, el mejor consejo que os podamos dar una vez más es que no tengáis miedo a perderos por Midgar, y "alejaros" de la misión principal para explorar los alrededores.
Las ventajas de hacerlo son muchas, muy variadas, y están ligadas con todo lo que os hemos contado hasta ahora. Encontrarás nuevas piezas de equipo, encantamientos o talismanes que te ayudarán a progresar y enfrentarte a enemigos más difíciles.
También te permitirá encontrar más materiales para mejorar el equipo, misiones y tareas opcionales con las que ganar más EXP y, en definitiva, todo redundará en que conseguirás más y mejor equipo.
De hecho, tienes un "checklist" o listado que recoge la progresión de muchas de las tareas opcionales, o incluso las que aún no has descubierto. Si eso no te incita a explorar, no sabemos qué más puede hacerlo...
Lee nuestro análisis de God of War: el espectacular regreso de Kratos
5. Cofres de las Nornas
Junto a los cofres y tumbas "normales", de las que podrás obtener objetos, existen otras que entrañan algún tipo de puzle o dificultad extra. No lo dudes, y dedica el tiempo que sea necesario para resolverlos, al menos la gran mayoría (algunos son complicados, o quizá no tengas una habilidad necesaria), aunque eso ralentice tu avance.
El porqué es muy sencillo: muchos de estos cofres encierran cuernos de hidromiel sangrienta o manzanas de Idunn. Reúne tres de cada, y conseguirás aumentar el indicador de Ira y el de vida, respectivamente.
Identificarás estos cofres especiales porque suelen tener tres runas, que se van apagando a medida que realizamos tareas como golpear campanas con símbolos, lanzar hachas a runas que hay brillando escondidas en el escenario y similares.
Aunque podamos parecer pesados, insistimos: dedica tiempo a abrir estos cofres, porque también ayudan a que la progresión sea más sencilla. A veces también tendrás que pensar cómo explorar el escenario de manera distinta (por ejemplo, averiguando como subir a un tejado con pinchos que cae del techo).
6. Trucos y consejos para el combate en God of War
El combate es, sin duda, otro de los aspectos que más ha cambiado respecto a anteriores entregas de la saga God of War. Nuestro arma principal es el hacha Leviatán, con la que podemos liberar ataques rápidos con R1 y pesados con R2. Presiona L2 y podrás apuntar para lanzar el hacha (útil sobre todo con enemigos que nos pongan en aprietos). Podrás lanzarla a dos velocidades, dependiendo de si pulsas R1 o R2.
También podemos bloquear ataques con L1 (si pulsamos en el momento justo, aturdiremos al enemigo), realizar esquivas con X o pelear con los puños desnudos pulsando derecha en la cruceta. Esto último es especialmente útil para aturdir a los enemigos (aparecerá un aura roja sobre su cabeza), y podremos rematarles pulsando R3.
Utilizar los puños es casi obligatorio cuando nos enfrentamos a enemigos que, o bien son resistentes a los hachazos (que los hay), o bien están congelados por nuestra hacha. Por ejemplo, una de las metas de combate que podemos cumplir es acabar con X enemigos congelados, por lo que tendrás que usar tus puños sí o sí.
También hay otro tipo de metas, como hacer que los enemigos caigan (lanza el hacha a sus piernas), así que no dejes de experimentar con las posibilidades que abre el hacha, y cada nueva habilidad, encantamiento y talisman que conseguimos.
Como hemos dicho antes, los enemigos morados suelen tener mayor nivel que nosotros... pero se les puede vencer con paciencia y utilizando los anteriores recursos (esquivas, bloqueos, lanzamientos de hacha...).
Si el enemigo es afín a algún elemento, equipa encantamientos que reduzcan el daño por ese elemento, y sobre todo, fíjate en los indicadores visuales que nos alertan de los ataques más fuertes de ciertos enemigos. Si el indicador es rojo, huye; si es amarillo, bloquea para aturdir en el momento justo.
Otros enemigos pueden tener un punto débil, como unos gigantes de piedra o hielo, que abren su pecho antes de disparar proyectiles. Arroja el hacha al pecho abierto, recoge los fragmentos que liberan, y lánzaselos de vuelta para causarle más daño.
Pero, sin duda, el mejor consejo que podemos darte es que, si un enemigo se te atraviesa y te mata constantemente, lo mejor es cambiar por completo la táctica (puedes buscar en el códice información sobre como derrotarle, modificar tus ataques rúnicos y afinidades). Si nada funciona, y el enemigo es opcional, lo mejor es irse y volver a intentarlo más adelante, cuando tengas mejor equipo.
7. Atreus no es un inútil
Si no hemos dicho hasta ahora nada de Atreus, el hijo de Kratos, es porque lo dejábamos para el final. Pese a ser un niño, te resultará de gran ayuda, y también podemos mejorar su equipo (arco, carcaj...) y habilidades, algo que acaba resultando de enorme ayuda según avanzamos en la aventura.
Primero, porque te permitirá descifrar las runas que encuentres por el mundo del juego (algunas para entender mejor el universo del juego), e incluso para abrir determinadas puertas y mecanismos.
Por no sólo eso. Como irás comprobando a medida que avanza la aventura, también se convertirá en un importante aliado en combate. Te encontrarás enemigos a los que resulta casi imposible vencerlos sin su ayuda o situaciones que sólo superarás con su arco (apunta con L2, y ordena a Atreus que lance la flecha con cuadrado).
A pesar de lo que puedas pensar, invierte también EXP en mejorar sus habilidades, desde causar mayor daño con el arco a una regeneración de las flechas más rápidas (tras lanzar una, debemos esperar a que la "reponga"), o incluso sus habilidades que requieren tiempo de recuperación (no decimos cuáles, por no destripar nada).
Dicho esto, también puede subirse a los enemigos para inmovilizarlos, apuñalarlos... aunque todo depende de qué faceta quieras potenciar con el equipo que le compres o fabriques. Puedes, por ejemplo, conseguir potenciar otras habilidades, como que encuentre recargas de vida y otros objetos con mayor asiduidad. Fíjate bien en la descripción de lo que vas a mejorar para saber qué habilidades potenciará.
Con esta guía de inicio de God of War podrás empezar a jugar sin que algunos cambios o novedades en sus sistemas de juego te pillen por sorpresa. Si necesitas más ayuda con God of War, no dejes de consultar los trucos y consejos para ganar más EXP, plata y oro, dónde encontrar todos los hallazgos o coleccionables del juego, dónde encontrar y cómo abrir todos los cofres de las Nornas, como conseguir todas las armaduras especiales, dónde encontrar todos los cuervos de Odín, dónde encontrar y cómo derrotar a las valquirias o dónde encontrar los mejores encantamientos.
Descubre más sobre Alberto Lloret, autor/a de este artículo.
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