En primer lugar, los productores de la serie Juego de tronos decidieron adaptar la saga literaria de "Canción de hielo y fuego" tras leer el capítulo de la boda roja, adaptado en uno de los episodios más criticados y comentados de la tercera temporada. Y, por cierto, ya empiezan a oírse rumores respecto a la boda púrpura, nombre adoptado por los fans para hacer referencia a un enlace de la cuarta temporada en el que el vino tendrá una presencia importante y que promete ser otro de los puntos álgidos de la serie.
Los bastardos de Poniente usan los colores de sus casas de forma invertida, ésa es la razón de que el fiel compañero de Jon Nieve, el lobo huargo Fantasma, sea blanco (el emblema de los Stark es gris). Y, hablando de lobos, Dama, el huargo de Sansa, fue adoptado por la actriz Sophie Turner tras la primera temporada.
Y ¿qué hay de la imaginación en Juego de tronos? Pues es mucha a juzgar por el hecho de que Martin no escribió ni una palabra del dothraki que escuchamos en la serie de televisión. Para acometer esta tarea HBO contrató a David J. Peterson. Si en 2010 existían 2.500 palabras en el "diccionario dothraki" hay que recordar que solo su creador conoce la gramática. Sin embargo, la comunidad sigue creciendo en Internet y hasta tiene su propia web para compartir recursos. Vamos, que lo mismo cualquier mes de septiembre sale un coleccionable de "aprende dothraki en 15 días".
En algunas ocasiones la serie no se aleja de la realidad, por ejemplo, el maestro Aemon Targaryen de la Guardia de la noche, al que da vida Peter Vaughan es casi ciego, como su personaje. Martin también le "compra" alguna idea a sus actores, de hecho la escena en la que Tywin Lannister destripaba a un venado en la primera temporada ni siquiera formaba parte de la planificación inicial.
Y en otras es Juego de tronos la que interfiere en la realidad: en 2012 hasta 120 niños fueron llamados "Khaleesi" a pesar de que no se trata de un nombre propio, sino de un título. También Arya se convisrtió en un nombre popular en Estados Unidos.
También hay guiños a otras obras como sucede cuando se enumera entre los dragones famosos a Vermithrax, cuyo nombre os sonará de Dragonslayer, de 1981.
Pero, lo más curioso de todo es que Martin, debido a una apuesta, tuvo que introducir a un personaje en "Danza con dragones". Atención, porque es de risa: Martin aseguraba que los Dallas Cowboys terminarían la temporada por encima de los New York Giants... Y se equivocó, ganó su amigo Patrick St. Denis, de modo que tuvo que introducir a Patreck de la montaña del rey en "Danza con dragones" cuyo blasón era una estrella azul como el escudo de los Dallas Cowboys. Eso sí, continuando el juego, SPOILER el personaje pierde la vida cuando es atacado por un gigante FIN DEL SPOILER... Muy bueno.
Descubre más sobre Raquel Hernández Luján, autor/a de este artículo.
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