En un principio, la nueva trilogía de películas de Star Wars iba a estar dirigida cada una de ellas por un director diferente, empezando por J.J. Abrams, siguiendo por Rian Johnson y terminando por Colin Trevorrow, pero los planes no han salido como se esperaban y Carrie Fisher lo sabía antes de fallecer.
Así lo ha revelado el propio director de El ascenso de Skywalker, J.J. Abrams, durante su aparición en el programa de Stephen Colbert, en el que ha recordado una extraña dedicatoria de la propia Carrie Fisher en su autobiografía The Princess Diarist, en la que ya se olía que iba a ser Abrams el que terminase la saga Skywalker con el Episodio IX.
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"Se suponía que yo no iba a trabajar en esta película. Carrie falleció antes de que se estrenase Los últimos Jedi. Pero en su autobiografía, The Princess Diarist, escribió al final: "un agradecimiento especial a J.J. Abrams por haberme aguantado dos veces". Yo nunca había trabajado con ella antes de El despertar de la fuerza y no se suponía que fuese a dirigir el Episodio IX. Es algo muy Carrie haber escrito algo así, que parece que de alguna forma sabía. Es muy extraño", contaba sorprendido el director.
Carrie Fisher fallecía el 27 de diciembre de 2016, cuando, todavía, se suponía que iba a ser Colin Trevorrow el que iba a dirigir la última entrega de la nueva trilogía en la que llevaba trabajando casi dos años. No obstante, sin desmerecer los poderes adivinatorios de la Princesa Leia, Fisher ya debía de estar imaginándose que el director de Jurassic World no iba a durar mucho en Lucasfilm después de que Tony Gilroy fuese contratado para "arreglar" Rogue One, que había dirigido Gareth Edwards, y Phil Lord y Chris Miller fuesen despedidos en pleno rodaje de Han Solo y sustituidos por Ron Howard. Al fin y al cabo, ¿quién puede conocer mejor los entresijos de Star Wars que la General Leia Organa?
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