Microsoft ha dado nuevos detalles sobre la arquitectura de su nueva consola, Xbox Series X. La llamada Xbox Velocity Architecture es la tecnología que quiere dar respuesta a el principal desafío de la nueva generación: optimizar la forma en la que cargan los juegos y todos sus componentes.
En una nueva entrada de Xbox Wire, Microsoft ha explicado los componentes de esta tecnología y su función, para dar lugar a nuevas formas de ver, jugar y entender los juegos. Muchos de los juegos modernos requieren cantidades ingentes de datos, con texturas en alta resolución, datos de animación, archivos de audio y vídeo, assets, físicas dinámicas...
Antes, requería de largos tiempos de carga, o en el mejor de los casos, largos pasillos, escaleras o ascensores sin ninguna función aparente en el juego (pero que sirven para cargar en segundo plano todos los archivos de la nueva zona).
Según Jason Ronald, director of program management (principal diseñador de la consola), Xbox Velocity Architecture es una reinvención radical del susbsistema I/O (input, output) tradicional. Consta de cuatro componentes:
- Custom NVME SSD, que ofrece un rendimiento hasta 40 veces más rápido que Xbox One, capaz de cargar 2,4 GB de datos al segundo.
- Hardware Accelerated Decompression: Un compresor de assets personalizado.
- New DirectStorage API, una aplicación que da acceso a los desarrolladores al controlador del disco NVME.
- Sampler Feedback Streaming (SFS), que permite acceder a datos del disco duro bajo demanda, y que actúa como un multiplicador de la memoria, que en el caso de Xbox Series X son 16 GB RAM GDDR6.
Todo esto permitirá generar entornos mucho más vivos que nunca, eliminando prácticamente todos los tiempos de carga. Además, hace posible la función Quick Resume, que permite retomar el juego instantáneamente entre varis juegos abiertos al mismo tiempo.
Fuente: Xbox Wire
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