John Bruno se encargó de llevar a cabo una presentación en la GDC Next titulada "On Demand Compute: Power For Games" en la que reveló algunos datos interesantes sobre la nube de Microsoft. Según Bruno, ha estado en desarrollo durante 18 meses y se deriva de Windows Azure.
Xbox Live Compute es el nombre elegido para referirse a la nube de Xbox One, cuyos inicios fueron difíciles por las críticas recibidas por parte de algunos editores como Ubisoft, aunque no sucedió lo mismo con Respawn Entertainment, responsables de Titanfall, un juego que se basa mucho en Xbox Live Compute al descargar los cálculos de los NCP y la inteligencia artificial en ella.
Estas fueron algunas de sus declaraciones sobre su funcionamiento y en concreto, sus actualizaciones: "De vez en cuando, con bastante frecuencia en realidad, el sistema operativo anfitrión (servidor) requerirá una actualización, es decir, la máquina física se va a reiniciar, aunque el código se encuentre en ejecución. Eso es algo problemático para un juego, y a veces ocurre en medio de una sesión multijugador, hemos trabajado muy duro para evitarlo, pero esto no quiere decir que vaya a pasar en todos los casos."
También hizo alusión a lo que podría pasar en juegos que dependen de la nube y que por algún motivo ésta dejase de funcionar:
"No puedo responder a eso. No sé lo que los chicos de Titanfall han incorporado a su juego. Todo depende de los desarrolladores. Si quieren confiar más en nuestro servicio, estaremos encantados de apoyarles. Proporcionamos una plataforma para que puedan conservar los datos, pero es responsabilidad del desarrollador la forma de utilizarlo".
¿Creéis que los juegos dejarían de funcionar si la nube cae por algún motivo? ¿No sería un atraso en lugar de un avance?
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