Oculus Rift acaba de anunciar la adquisición de una empresa israelí, Pebbles Interfaces, que basa su trabajo en la detección de manos en 3D. Gracias a esta compra Oculus podrá desarrollar un sistema óptico para detectar la posición y el movimiento de los brazos del usuario y utilizar dicha información para proyectarlos dentro del mundo virtual.
Según Oculus, con esta tecnología podrán "Ofrecer nuevos métodos de interacción humana en la realidad virtual y revolucionar la manera en la que la gente se comunica dentro de ella."
Por otro lado, los responsables de esta hazaña afirman que "en Pebble Interfaces nos hemos centrado en probar los límites de la tecnología de detección digital para acelerar el futuro de la interacción entre humanos y ordenadores. A través de micro óptica y visión virtual, esperamos mejorar la información que puede ser extraída de los sensores ópticos, lo que ayudaría a llevar la realidad virtual al siguiente nivel."
"Siempre hemos creído que la realidad virtual será la siguiente gran plataforma de nuestro tiempo y estamos muy contentos de poder unirnos al equipo de Oculus para lograr nuestra visión de ese futuro", explicaba Nadav Grossinger de Pebbles.
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