Durante la presente generación de consolas se han asentado los mandos inalámbricos. De lo que antes sólo gozaba la televisión y los más derrochadores de pilas, ahora lo hacemos todos, incluso de base, como con los mandos de Wii, PlayStation 3 o Wii U. Como os podéis hacer una idea, las pilas no aguantan el tipo en este sentido, por lo que las baterías pasaron a ser las reinas del cotarro.
El problema surge cuando éstas sufren desperfectos y no podemos acceder a ellas a no ser que sea vía el Servicio de Asistencia Técnica. Nintendo ha tomado nota de la situación e informa que no hará falta pasar por el SAT para cambiarle la batería al GamePad de Wii U.
Para acceder al elemento en cuestión sólo tendremos que desatornillar la tapa trasera del mando, lo que no será demasiado complicado dado que los tornillos serán de los de toda la vida, para facilitar el desmontar el GamePad de Wii U si se presenta la ocasión. Quizá una tapa en vez de tener que desmontar el mando habría sido lo más adecuado, pero menos da una piedra (véase el Duashock 3). Lo que no se sabe es si Nintendo venderá baterías por separado en tiendas físicas o si tendremos que pasar, esta vez sí, por el SAT para cambiarla en caso de necesidad, ya sea por presentar pérdidas o por disminuir su capacidad (tras 500 cargas, la capacidad desciende al 70%).
Lo que está claro es que esta noticia abrirá un pequeño mercado de baterías de otras marcas para Wii U, del que los únicos beneficiarios somos nosotros. Lo que ya es más complicado, por no decir imposible, es que terceras compañías intenten crear mandos para Wii U dado lo ligado que está el GamePad a la consola (aunque estuviera a punto de no llegar a existir), pero ésa ya es otra historia.
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