El organismo gubernamental británico 'Information Commissioners Office (ICO)' ha condenado a Sony a pagar 250.000 Libras (casi 300.000€) en concepto de multa por los problemas de seguridad que sufrió la multinacional nipona en 2011, cuando un grupo de 'hackers' atacaron sus servidores provocando importantes problemas en el servicio PlayStation Network, así como comprometiendo la privacidad de miles de usuarios.
Para David Smith, responsable de información de ICO, estos hechos acontecidos en 2011 suponen "la brecha en la seguridad más grave acontecida en los últimos años" y, además, carga contra la gestión de Sony afirmando que "todo se podía haber evitado si, en su momento, se hubieran tomado las medidas de seguridad necesarias".
No contento con este par de 'palos' a Sony, el responsable de ICO ha sido especialmente duro respecto a este caso y ha manifestado su 'sorpresa' por que una compañía de este calibre tenga ese tipo de problemas en un mercado que "deberían dominar a la perfección".
Sony, por su parte, aunque ha reconocido los hechos, también ha recordado que hizo un gran esfuerzo para mejorar la seguridad de todos sus servicios y por compensar a los usuarios afectados, por lo que recurrirá la sanción impuesta por el organismo británico.
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