La tradición manda y ya desde bien temprano muchos han hecho cola para poder ser maquillados por profesionales en las carpas del paseo marítimo. Esta es la calma que precede a la tempestad: si de 12 a 19 todos se preparaban para ser aterradores, ya os imaginais lo que viene después...
Los más madrugadores han acudido puntuales a coger sitio para poder lucir sus disfraces bien pringados en sangre de pega y con trozos de carne desparramados por aquí y por allá.
Ya lo anunciaba el spot de la Zombie Walk: en el fin del mundo todos seremos zombis...
Y, a partir de las 20:30 se ha desatado el caos. Da igual la edad cuando uno tiene ganas de divertirse, así que los zombis salían de cualquier rincón con ganas de asustar a cualquiera que pasara por allí: enfermeras asesinas, militares no-muertos, boy-scouts con ganas de comer carne humana...
Ni siquiera el aguacero que nos ha caído encima ha podido apaciguar a la legión de zombis que ha tomado Sitges esta noche. Después del desfile, esperamos que todo vuelva a la normalidad, pero eso solo podremos confirmarlo mañana ¡Larga vida a la Zombie Walk!
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