El fallecimiento de Chadwick Boseman, que conocimos desgraciadamente la semana pasada, nos ha dejado huérfanos de un actor que, con tan sólo un par de películas, se ha convertido en una auténtica leyenda. Un icono para una generación, especialmente la afroamericana en Estados Unidos, que vio en él a ese representante de su cultura gracias a la caracterización y la labor que empezó a desempeñar como Black Panther en el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM) hace ahora cuatro años, desde Capitán América: Civil War.
La muerte del actor de 43 años que daba vida a T'Challa ha dejado un vacío enorme en la sociedad cultural estadounidense, pero también en la propia ficción. Un tema peliagudo que tenemos que tratar aquí a la hora de intentar responder, de la manera más profesional posible, al hecho ineludible de qué va a suceder ahora. ¿Qué va a pasar con el personaje de Black Panther en las películas? ¿Cuál sería el movimiento más acertado de Marvel Studios a la hora de actuar? ¿Cambiarán de actor dentro de un tiempo o sería más recomendable "desterrarlo" para siempre del cine?
Como muchos sabéis, Black Panther 2 estaba prevista para dentro de un par de años. Y, dada la situación y el contexto que tenemos por delante en estos momentos, lo más probable es que esa secuela deje de estar en producción y que el personaje se quede en barbecho durante una temporada. Al menos hasta que Kevin Feige y compañía aclaren qué es lo que va a suceder, ya que son ellos los que tendrán que tomar la última decisión con respecto al devenir de Pantera Negra en el cine y lo que harán o dejarán de hacer cuando pase el tiempo necesario, si es que es posible sanar una herida tan profunda como esta.
Chadwick Boseman no tendría que ser sustituido, pero sí debería extenderse su legado
Desde nuestro punto de vista, creemos que Black Panther debería "apartarse" del cine durante una buena temporada. No porque consideremos que un personaje creado en 1966 pertenezca ahora a un actor, sino porque la impronta que ha dejado Chadwick Boseman en la sociedad estadounidense y en la cultura popular occidental de masas es, ciertamente, considerable. No se puede sustituir así como así a una leyenda moderna, símbolo de toda una generación y que deja un importante legado, particularmente en el país norteamericano.
No es la misma situación que cambiar a Terrence Howard como Máquina de Guerra en Iron Man (2008) por su más aclamado actor, Don Cheadle. Ni tampoco se puede comparar con la muerte de Heath Ledger mientras se rodaba El imaginario del Doctor Parnassus (2009), de Terry Gilliam, cuando el actor australiano fue reemplazado por sus amigos Colin Farrell, Jude Law y Johnny Depp, merced a un guion retocado que permitió encajar las piezas y que sirvió como despedida del hombre que interpretó a Joker en El Caballero Oscuro y que nos enamoró a todos con su talento.
Lo más parecido que encontramos recientemente a esta situación es el fallecimiento de Carrie Fisher. Al igual que en el caso de Chadwick Boseman, la actriz dejaba un importante legado (con más años detrás, si cabe) en la figura de Leia Organa, que a su vez estaba en mitad de una trilogía y que supuso un quebradero de cabeza para la conclusión de la misma en Star Wars: El Ascenso de Skywalker. En el caso de Leia, no se sustituyó al personaje ni se recreó a Carrie Fisher con efectos digitales, como sí vimos a una joven Leia al final de Rogue One: Una historia de Star Wars.
El caso de Carrie Fisher con Leia es, honestamente, muy similar al de Chadwick Boseman con Black Panther: son dos actores cuya caracterización como personajes ficticios ha marcado a una o varias generaciones dentro de la cultura popular occidental. Sus fallecimientos, cuando todavía estaban interpretando a sus personajes o había proyectos para ellos, dejan vacíos no sólo a los fans como consumidores de la ficción, sino a la propia ficción en sí. Los proyectos del Universo Marvel tendrán que seguir adelante, pero lo tendrán que hacer sin Pantera Negra.
Quizás, la opción más lógica para el UCM sea honrar la memoria del actor fallecido y del personaje desaparecido manteniendo viva la llama de Black Panther y honrando el legado del Rey de Wakanda con los que siguen en pie, aquí, entre nosotros. En ese sentido, la opción más lógica sería la de Shuri, hermana de T'Challa. La actriz Letitia Wright tiene mucho talento y se ha labrado su propia personalidad dentro de las películas de Marvel. La hermana del rey, heredera de la nación africana, podría ser la mejor elección para la continuidad.
En definitiva, todavía es muy pronto para saber qué es lo que hará Marvel Studios para resolver una situación que ninguno de nosotros había imaginado y que ninguno de nosotros queríamos. El adiós de Chadwick Boseman nos deja completamente desolados. Hemos perdido a un icono de la cultura popular de masas muy pronto, demasiado pronto. No sabemos cómo continuarán su legado, lo que está claro es que su imagen permanecerá en nuestra memoria y siempre que veamos una fotografía suya pensaremos: "Wakanda por siempre".
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