Los juegos de terror, el clásico "survival horror" son un género muy popular. No hace falta irse a las cifras de ventas de Resident Evil o Silent Hill para cerciorarse de que nos gusta pasar miedo delante de nuestra consola o PC. Pero una cosa es que el juego esté repleto de zombies o criaturas monstruosas y otra muy diferente es que consiga dar miedo de verdad. No sólo es una cuestión de tecnología, sino de ambientación (aquí la música juega un papel importante) y de una construcción de los personajes creíbles.
Esta es la lista de juegos con los que he pasado miedo "de verdad". Sé que me dejo auténticas obras maestras por el camino, en particular Dead Space (que me jugué tres veces seguidas en su momento) o Silent Hill 2 y 3, que fueron auténticos hitos del terror psicológico, pero sólo cuentan los juegos que me lo han hecho pasar mal.
En cada uno de ellos explico por qué me ponían los pelos de punta, y como esto es Halloween, os animo a que os los juguéis durante la próxima noche, con auriculares y la habitación a oscuras... si os atrevéis.
Viernes 13
No hablo de la última adaptación, sino del juego que apareció en microordenadores en 1986. Por aquel entonces yo tenía 9 años, y no había visto ninguna de las películas de Jason Vorhees. Pero a esa edad el morbo me pudo, y me planté frente a mi Amstrad CPC 6128 para jugarlo. Viernes 13 no era un buen juego, había que moverse por las pantallas con los distintos visitantes del campamento Crystal Lake tratando de encontrar a Jason, antes de que él lo hiciese y nos matara de una forma truculenta (que con los gráficos de la época no era gran cosa).
Pero el giro, lo que me hizo levantarme de la silla y apagar el monitor, era su sistema de sustos. A veces, al entrar en una pantalla, aparecía una imagen bastante gráfica de una víctima con un machete clavado en la cabeza, y sonaba un pitido estridente, imitando un grito (con lo que daban de sí los microordenadores). Me llevé tal susto que lo recuerdo como mi primer juego de terror real.
Project Zero
Este caso es mucho más sangrante (valga la expresión en Halloween) porque ya trabajaba en Hobbyconsolas. Me puse a realizar el análisis de Project Zero (o Fatal Frame) en nuestra sala de capturas; una habitación en que jugábamos conectados a un ordenador para sacar pantallas de los juegos... y poco a poco me fui metiendo en la historia. Como además soy un aficionado al cine de terror asiático (Ring, Ju-On, Uzumaki, A Tale of Two Sisters, The Eye...) acabé pasándolo mal. Al contrario que el caso anterior, este "survival horror" de Tecmo sí que es un gran juego, aunque la saga fue perdiendo impacto con cada nueva entrega.
El argumento de Project Zero, ya lo conocéis, trata de una niña que visita una antigua mansión japonesa habitada por fantasmas, y sólo cuenta con una cámara de fotos para defenderse de los espectros.
Siren
Los enemigos que nos persiguen en Siren, los shibito, tenían un rostro muy detallado para la época, y el argumento me recordaba a otra película de terror japonés, Inugami. Así que entre el ambiente rural y oscuro, el sonido de la sirena que da nombre al juego y la imposibilidad de combatir -en este "survival horror" nuestra ventaja es que podíamos ver lo que estaban viendo nuestros enemigos- pasé un mal trago durante el análisis.
Manhunt
Rockstar, los creadores de GTA V y Red Dead Redemption 2, también nos ofreció una nueva perspectiva del terror. Un juego en que una bolsa de plástico se convertía en un arma para asfixiar a un enemigo, o en que podías acribillar con una pistola de clavos a un tipo gordo que chillaba como un cerdo mientras estaba en el water. Era así de crudo... y de intenso. Ningún otro juego de terror ha tenido una atmósfera tan sucia y pegajosa -recuerda bastante al comienzo de la película Irreversible- y ha conseguido que tengamos miedo de nosotros mismos.
Puede que Manhunt se haya quedado algo anticuado por culpa de la técnica, era un juego de hace 15 años, pero el mensaje sigue siendo aterrador. ¿Hasta dónde estaríamos dispuestos a llegar para sobrevivir? Su aspecto de vídeo digital, desde las cámaras CCTV era escalofriante.
P.T. Silent Hills
Sólo era una demo. Sólo era un pasillo. Sólo era el llanto de un niño y un lavabo lleno de sangre... y aquella mujer que se aparecía a tus espaldas cuando menos lo esperabas. Nunca sabremos cómo iba a ser el juego de Hideo Kojima y Guillermo del Toro protagonizado por Norman Reedus, pero esta prueba gratuita ya es una de las experiencias más aterradoras que se puede jugar en una consola.
Su influencia ha sido tan grande, que seguimos recibiendo anuncios de juegos inspirados en P.T. (que por cierto, sólo eran las siglas de "playable teaser").
Resident Evil 7 Biohazard
Después de haberlas pasado "canutas" con la demo The Kitchen para PSVR, se me ocurrió hacer el análisis del juego en realidad virtual, sólo en casa. Claro, la inmersión con el headset es mucho mayor, y además me tocó la fibra sensible porque me encanta el tipo de historia de la familia Baker, muy inspirado en alguna de mis películas del género favoritas, como La matanza de Texas (tanto la original como el remake) y Las colinas tienen ojos (en este caso, prefiero la versión moderna de Alexandre Aja).
Así que me colé en aquella casa, habitada por una familia de caníbales, a buscar a mi esposa desaparecida... y después de un par de horas abandoné la VR y me tuve que pasar el resto del juego en "modo TV". Una vez que me sabía lo que iba a pasar, pude repetir la experiencia de Resident Evil 7 Biohazard sin riesgo de morir de infarto.
Outlast 2
No se trataba tanto de pasar miedo en las partes de "survival horror" como de estar sobrecogido por lo que habían hecho los habitantes de aquel pueblo maldito... y rememorar una historia de abuso infantil (en el juego) realmente escalofriante. Mezclar niños y terror suele dar buen resultado, pero cuando no se trata de fantasmas sino de sacrificios y torturas, la verdad es que revuelve bastante las tripas... que, por otro lado era lo que pretendía Outlast 2. Para colmo, las secuencias con la cámara de infrarrojos ponen la piel de gallina a cualquiera -debe ser un efecto de Blair Witch Project-.
Si tenéis la edad suficiente y os leéis todas las cartas y las páginas del evangelio de Knoth, seguro que a vosotros os deja marcados, como a mí. Una auténtica experiencia de "survival horror" que superó al primero en todos los aspectos.
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