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Metal Gear Solid V, cuatro años después. Víctimas y daños colaterales

Metal Gear Solid V

Se cumplen 4 años del lanzamiento de Metal Gear Solid 5 The Phantom Pain tanto en la generación actual de consolas como en la anterior. El juego de Hideo Kojima, todavía en colaboración con Konami, no dejó a nadie indiferente y estuvo rodeado de polémica. Para celebrar esta aniversario quiero recordar a las víctimas y los daños colaterales de este lanzamiento: el propio desarrollo, Konami, Hideo Kojima, otros proyectos paralelos, como Silent Hills P.T. y sobre todo, nosotros, los jugadores. 

Metal Gear Solid V

Y que conste que todo esto no está reñido con la calidad del desarrollo, que todavía considero como uno de los mejores juegos de infiltración militar de esta generación; Metal Gear Solid V introduce mecánicas nunca vistas en el género, permitía una enorme libertad para afrontar cada una de las misiones, era técnicamente impecable, y añadía todavía mayor profundidad a una historia legendaria. A día de hoy, este sandbox se defiende muy bien en las versiones de PS4, Xbox One y PC.

Metal Gear Solid V 4

Análisis de MGS V The Phantom Pain

Pero su desarrollo accidentado -y un lanzamiento prematuro provocado por la editora- dejaron un río de cadáveres tras de sí. Aquel 2 de septiembre de 2015 no fue la fiesta que todos esperábamos. La primera víctima fue el propio juego. Se le puede acusar de ser repetitivo en el desarrollo, de tener una narrativa inconexa, y de obligar a los jugadores a navegar sin rumbo por el capítulo 2, hasta conseguir desbloquear aquellas misiones 46 y 51, para ver el final.

Metal Gear Solid V 3

Pero era un juego inacabado. Estos elementos que acabamos de repasar son las "cicatrices" de haberlo lanzado demasiado pronto, sin todas las misiones previstas, y sobre todo sin el capítulo 3: Paz, que era la verdadera guinda de este desarrollo. Después supimos que Kojima Productions también estuvo obligada a recortar el modo multijugador en la campaña por la presión de la editora. 

Konami prohibe a Kojima acudir a The Videogame Awards

Otra víctima fue Hideo Kojima. El creador del juego, y una de las mayores personalidades de la industria japonesa, vio como su nombre se borraba del título. No fue lo único que le arrebataron. Cuando Kojima abandonó Konami, la compañía también se quedó con el motor gráfico que había desarrollado para Metal Gear Solid V, el FOX Engine. Es el motor que se ha utilizado durante las últimas entregas de Pro Evolution Soccer. Esto ha obligado a que Kojima tenga que recurrir a un nuevo engine gráfico para realizar Death Stranding: el Decima Engine propiedad de Guerrilla Software (Horizon Zero Dawn, Killzone).

Hideo Kojima abandona Konami

Kojima perdió la oportunidad de presentarse como candidato al premio Nobel de la Paz, que era uno de sus planes. Podéis leer esta historia exclusiva mundial en Hobbyconsolas, relacionada con un trofeo secreto en el modo multijugador, en que si recordáis, podíamos construir nuestra base y armarla hasta con cabezas nucleares. A día de hoy, todavía es una de las historias más extravagantes que nos han dejado los videojuegos. 

Metal Gear Solid V 5

El premio nobel de Hideo Kojima

Las víctimas de MGS 5 no se acaban ahí. Quizá la principal damnificada con este accidentado lanzamiento fuera la propia Konami. Perdió a uno de sus creadores con mayor talento, y la siguiente entrega, Metal Gear Survive (que reciclaba gran parte del trabajo de MGS V) no estuvo a la altura de las entregas canónicas de la serie. Por otra parte, el juego de terror Silent Hills P.T. que también estaba desarrollando Hideo Kojima junto a Guillermo del Toro y el actor Norman Reedus, también se perdió para siempre.

Os recordamos que había guiños a P.T. en Metal Gear Solid, y que Del Toro y Reedus ahora forman parte del equipo que ha desarrollado Death Stranding. El destino de ambos juegos estaba entrelazado, y tampoco tenemos claro cuándo volveremos a disfrutar de una entrega de Silent Hill. 

Metal Gear Solid V 2

De modo que el lanzamiento de Metal Gear 5 estuvo lleno de infortunios. Sufrió el mismo juego, su desarrollador, la compañía que lo lanzó e incluso otros desarrollos paralelos. Y como suele ocurrir en estos casos, los daños colaterales fuimos nosotros, los jugones, que nunca podremos ver el final del juego, ni afrontar la campaña en modo cooperativo. No podremos jugar a PT (que se retiró después de PS Network) ni saber cómo hubiera sido Death Stranding realizado con el FOX Engine

Con todo, si no lo habéis jugado, cuatro años después todavía hay magia en el desarrollo de The Phantom Pain, y puede ser un excelente prólogo antes de jugar Death Stranding.

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