New 3DS y New 3DS XL ya llevan medio mes a la venta, y muchos de vosotros ya estáis disfrutando de sus nuevas funciones y de su tecnología mejorada, que perfecciona aún más la experiencia de juego con uno de los mejores catálogos que se han visto en una portátil. Pero aún no ha llegado el primer juego exclusivo para los nuevos modelos, un título tan colosal que difícilmente hubiera podido funcionar en las viejas 3DS. Ese momento llegará en sólo un mes, y será una de las principales razones para que muchos consumidores se decidan a hacerse con una New.
Aunque será exclusivo respecto a los anteriores modelos de 3DS, no será un título que pueda jugarse sólo en New 3DS, ya que se trata de la adaptación de un juego que puede disfrutarse desde hace años en Wii. Pero, por primera vez, será posible degustar este excelente juego de rol japonés (considerado uno de los mejores del género en la última década, si no el mejor) en las pantallas de una portátil.
Monolith Soft (Xenosaga, Baten Kaitos), convertida desde hace unos años en first-party de Nintendo y que actualmente trabaja en Xenoblade Chronicles X para Wii U, se consegró definitivamente como una de las desarrolladoras más relevantes del rol japonés con el primer Xenoblade Chronicles, que vio la luz originalmente para Wii en Japón en 2010 (y al año siguiente en nuestro continente). En esta versión para New 3DS han trabajado los estadounidenses Monster Games, que desarrollaron Pilotwings Resort y ya tienen experiencia adaptando un juego de Wii a portátil (Donkey Kong Country Returns 3D). Pero, ¿hasta qué punto es fiel Xenoblade Chronicles 3D al inolvidable juego original, y qué novedades aporta?
Bionis y Mekonis
El desarrollo de la aventura y la jugabilidad de esta versión son idénticos a lo que vimos en Wii. Ambientado en un enorme y muy especial mundo fantástico, nuestros protagonistas son parte de la raza huma, que se desarrolló sobre el gigantesco cadáver de un titán conocido como Bionis. Pero deben proteger su comunidad de la amenaza de los mekon, unas criaturas de aspecto mecánico que proceden del cuerpo del otro titán, Mekonis. De esta forma, Bionis y Mekonis son los dos grandes continentes en los que transcurre esta aventura de mundo abierto, ambos divididos en numerosas y variadas zonas.
El protagonista de la historia, Shulk, tiene la fortuna de contar con la legendaria espada Monado, especialmente efectiva contra los mekon y capaz de prever el futuro en pleno combate. El sistema de batalla sigue siendo igual de excelente que en Wii: en tiempo real, pero con diferentes comandos que nos permiten sacar el mejor provecho de cada situación. Cada personaje cuenta con movimientos especiales llamados artes, y algunos de ellos son más efectivos cuando atacamos por la espalda o desde un lateral, por ejemplo. También se mantienen el profundo sistema de afinidad entre personajes y sus numerosísimas misiones secundarias.
Novedades
La verdad es que esta versión de Xenoblade Chronicles no añade novedades de mucho peso. Durante la partida, la única novedad que hemos detectado hasta ahora es el uso de la pantalla inferior, en la que visualizaréis el mapa y la información de vuestros personajes.
Por otra parte, en el menú principal encontraréis una nueva opción: Colección. Aquí descubriréis una galería de personajes y las canciones de la banda sonora, y para desbloquear tanto los modelados de personajes como las melodías tendréis que usar unas fichas especiales. Hay tres formas de conseguirlas: a través de encuentros StreetPass, usando la figura amiibo de Shulk y mediante monedas de juego de 3DS. Lo mejor es que si usáis auriculares podréis escuchar la excelente banda sonora aunque cerréis la consola. Sin embargo, lo cierto es que este modo Colección no deja de ser un añadido anecdótico.
Apartado técnico
Monster Games ha hecho un trabajo muy decente en la adaptación, que aprovecha la potencia de New 3DS. El gran mundo de Xenoblade Chronicles está aquí, y la experiencia de mundo abierto sigue intacta, pero aun así las limitaciones de resolución de la pantalla portátil se notan un poco, y además los colores no resultan tan vivos como en Wii.
Sin embargo, de momento nos está pareciendo que como adaptación portátil cumple bien, aunque técnicamente se quede ligeramente por debajo de la versión de Wii. Los escenarios son inmensos, el ciclo de día y noche sigue ahí, y las batallas siguen siendo igual de vibrantes contra enemigos de todo tipo y tamaño. Además, el efecto 3D aporta un valor añadido y una agradable sensación de profundidad.
Por su parte, la estupenda banda sonora sigue brillando, aunque hay una carencia en otro aspecto del apartado sonoro. Al gran público no le parecerá relevante, pero los más puristas lo verán como un inconveniente. Y es que, a diferencia de la versión de Wii, esta edición portátil no incluye la opción de seleccionar el doblaje original en japonés, y sólo cuenta con las voces inglesas.
Es comprensible, dado que los juegos de esta consola no alcanzan la memoria de los discos de Wii (y aún sin las voces japonesas, la versión digital de Xenoblade Chronicles 3D supera los 30.000 bloques), pero no deja de ser un punto en contra para los que preferimos escuchar el doblaje original. De todos modos, hay que decir que el doblaje en inglés está a la altura, así que esto tampoco es un gran problema. Ah, y ya que hablamos de idiomas, por supuesto los textos están en castellano, igual que en Wii.
Una gran aventura se acerca a la nueva portátil
Va a ser todo un placer disfrutar de semejante juegazo en una portátil, especialmente para quienes no pudieron jugarlo en Wii. Largo, de grandes proporciones, con un montón de cosas que hacer y con una ambientación y argumento para el recuerdo, se trata de uno de los mejores juegos de rol japonés de los últimos tiempos, y es muy positivo que reaparezca para una nueva audiencia. Además, parece que lo hará en una adaptación muy digna. Ya queda menos para el 2 de abril.
Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.