¡Sálvese quien pueda! Si la semana pasada creísteis presenciar los ataques de furia jugona más iracundos de la civilización, cuando los comparéis con los vídeos de hoy, os van a parecer simples rabietas de la 'Vuelta al cole', como las que se están produciendo por toda nuestra geografía en estos instantes. Tal es el grado de impacto de los documentos seleccionados, que hemos tenido que recurrir al sistema de clasificación PEGI, ex pareja de la Rana Gustavo, para adjuntar a cada pieza sus correspondientes indicadores de edad recomendada y descriptores de violencia, lenguaje soez (o so hez), miedo y demás elementos traumáticos. Truco de hoy: posa el cursor sobre los iconos de PEGI para conocer las especificaciones de cada caso.
El grito de guerra de un ganador nato
Ya sabéis que en Hobby Consolas secundamos fervientemente el fenómeno eSports como multitudinaria competición entre jugadores profesionales de todo el mundo, pero existe una ínfima minoría de "ciberatletas" que no saben comportarse en público tan bien como juegan. La primera escena que inaugura las risas de hoy tuvo lugar el pasado mes de diciembre en la Major League Gaming de Estados Unidos, cuyos participantes se especializan en títulos como Halo 3, CoD Modern Warfare, League of Legends, Starcraft II o Super Smash Bros, entre otros. Pero los sujetos de este vídeo confundieron el campo de batalla virtual con el real, al convertirse en una especie de jauría de lobos de Wall Street, pero con la rabia. Atención al varonil grito de guerra (o de "Babe" en el matadero) con el que pretenden amedrentar al equipo rival mientras los demás asistentes se descuajeringan de risa... "¡¡Nunca me ganaréis!!"
Hay dos formas de hacer el ridículo: la que acabamos de ver... y todas las demás. ¿Pero cómo no van a surgir iniciativas como implorar el cese del odio en la comunidad gamer con casos como éste? Por cierto, para despejar dudas; en efecto, el nerd principal es el actor Crispin Glover cuando hizo de padre de Michael J. Fox en Regreso al Futuro, de ahí lo de la esquizofrenia. Y hemos empezado suavecito, así que imaginaos lo que os espera.
Cuando Chuck Norris era informático
¿Quién no ha acabado liándose a puñetazos con su portátil tras la decimocuarta invitación a FarmVille? Pues nuestro siguiente energúmeno la aceptó a la primera, pero tras varias horas intentando pasarse la pantalla de menú sin éxito, decidió "granjearse" la enemistad de su propio ordenador. En realidad, me he inventado la historia, porque ni siquiera él sabe por qué se pilla un rebote que ni los de 'La pregunta caliente' de Saber y Ganar. Lo que sí Sabe este tío es Perder, pero los nervios y el dineral que se acaba de gastar en su difunto laptop. Al menos, el aparato se llevó su merecido, que hay mucho computador vacilón suelto.
Puede que el fragor de la paliza no os haya permitido fijaros en la errata de su camiseta. Pone BillaBong, cuando en realidad se la compró en VillaMong, su pueblo natal. Dudo que ni siquiera supiese encender el ordenador, pero hay que reconocer que nadie lo apaga como él. Cuánto daño hacen al cerebro los estúpidofacientes...
El primer "niño Ratatta" de la historia
Y pasamos de un portátil a una portátil: la imperecedera Game Boy Advance SP. Después del lamentable, indecente e inmoral escándalo de las fotos hackeadas de las actrices en cueros (por cierto, me faltan las de Selena Gómez, enviádmelas por correo ordinario y os paso trucos para el Superman 64), ni los niños se fían ya de iCloud, así que tened cuidado, padres del mundo: ni se os ocurra sacarles una foto con el iPhone mientras se enfrentan a un Rattata de nivel 3 que no les deja vivo ni a Ash. Como si de la señora Pantoja se tratase, el vástago insta a su papá-razzi a no grabarle más: "Don't take a picture of me!!" Ay, animalico, si supieras que en realidad era un vídeo y que lo vamos a ver ahora...
Como bien saben los fanboys de la cámara lenta como John Woo, Zack Snyder, Kojima o el director de fotografía de Los vigilantes de la playa, toda escena reducida a la mitad de su velocidad original resulta el doble de efectista, que no siempre efectiva. Bueno, en este caso sí. Esto es una pillada padre-hijo / hijo-padre y no lo de Skywalker y Vader.
Definición gráfica de "ruptura" jugona
Según Freud, padre del psiconanálisis (y de seis hijos muy guapetes), la ira se apodera de los individuos cuando éstos no ven satisfecha su necesidad de amor, y la mejor prueba de que Segismundo sabía de lo que hablaba está en los llamados "vídeos de novias despechadas con palos de golf a mano". Si el de la semana pasada os escandalizó, el caso de hoy va mucho más allá de romper un monitor "DELL" cabreo: la joven que protagoniza la pieza -o el despiece- se atreve directamente a destrozar la Xbox 360 de su prometido con un ensañamiento inversamente proporcional a la reacción del afectado, cuyo anillo de boda debe de ser rojo y de luz.
Se podría decir que estos dos no vuelven a tocarse ni con un palo. Pero tranquilos, la impasibilidad del pobre hombre duró poco, ya que en realidad estaba tramando su dulce venganza: machacar el portátil de su chica con el mismo objeto del crimen, cuyo resultado os paso en este enlace por si tenéis tiempo, que hoy estoy de cierre. Pero me asalta una duda: ¿de verdad hay alguien en Estados Unidos que compre palos de golf para jugar al golf aparte de Tiger Woods?
Cómo estresar a tu varón
Sin dejar el tema de las "rupturas", os mostramos el ejemplo de una dama aún más retorcida, de la que podéis tomar nota todas las novias de viciados que nos estéis leyendo, o sea, dos. Existe un sistema mucho más eficaz que no requiere palos, sino esperar a que sea él quien se cargue su propia consola u ordenador. Los pasos a seguir son tan sencillos como esperar a que la víctima salga a la calle, aprovechar que se ha dejado la pantalla encendida y borrarle todos los personajes de World of Warcraft. Para terminar, basta con dejar una cámara grabando y esperar al ansiado "golpe de gracia", aunque no parezca hacerle mucha. Id a la mitad del vídeo para ahorraros el papeleo...
Eso le pasa por amar los videojuegos (eso es bueno), ser fumador y salir a por tabaco (eso es malo), confiar en su novia (eso es bueno) y dejarle el WoW en bandeja... Eso es malo. Y utilizo esta "bromística" prestada del capítulo-parodia que Los Simpsons dedicaron a Los Gremlins para mostraros a uno de carne y hueso.
Nunca expongas a un Gremlin a la luz... de su fracaso
Pues va a ser verdad que los peques no deberían jugar a Call of Duty: Black Ops, pero porque no les llegan los dedos a los gatillos del mando, y luego pasa lo que pasa. El tipo de ira al que nos enfrentamos deriva directamente de la frustración, capaz de transformar a un adorable Mohawk como Gizmo en una maligna y furibunda criatura como Stripe, que va viendo aumentada su cólera cuanta más luz artificial recibe. Pero su inconsciente padre parece disfrutar activándola desde el interruptor mientras el zajal insiste en apagarla para eludir los focos de la fama. Esto sí que es fotofobia y no lo del chavalín del coche.
Baneado de Xbox Live... y de GameStop
¿Alguna vez os han baneado de Xbox Live o PS Network por mala conducta, por trollear al personal o por enviar un equipo de SWATS a casa de vuestro contrincante? Tranquilos, aquí no seréis juzgados: os habla alguien a quien amonestaron en Miiverse el día que compró la Wii U por escribir "Hola guapa, ¿tienes novio?" en la plaza WarraWarra (y en mi barrio las hay peores). Por eso, siento cierta empatía hacia este personaje, que pretendía devolver su Xbox 360 por la que supuestamente iba a recibir 100 dólares... hasta que la dependienta corroboró que estaba baneado de Xbox Live. Adiós billetes, y adiós consola. Así decide el susodicho poner fin al problema: autobaneándose de la tienda a grito "pelao" (como su bolsillo ahora) y devolviendo los componentes de su máquina a la Madre Tierra.
SuperChan, el vengador del consumidor
Y hablando de cajas X, dadas las cifras de ventas que está registrando la consola de Microsoft en Japón, no me extrañaría que el siguiente individuo fuese su único comprador volviendo a la tienda después de no encontrar ni al Tato-San conectado en el online. Bueno, en realidad, lo que vais a ver no ocurrió en las tierras de Godzilla (aunque su prota lo parezca), sino en el estado de Sabah, Malasia, cuando un chino chinado con el encargado irrumpe en una importante tienda de electrónica arrasando con todo lo que pilla a su paso. ¿El motivo? Vengar los continuos "engaños" y "prácticas deshonestas" del establecimiento, según berrea el tronchante kaiju humano, capaz de detener a todo el personal de seguridad con la mirada, y no al revés. Mi momento favorito: cuando revienta un teclado en dos mil pedazos (minuto 4:14) como diciendo: ¡hala, ya habéis conseguido lo que queríais!
Creo haber encontrado la causa real de la locura: ese tinte de pelo. Tanto platino no puede ser bueno. Los análisis que nos llegan del laboratorio también dejan claro que las del polo no son las únicas rayas que lleva encima este señor. ¿Y qué me decís del instane en el que extiende la mano para dar el alto al guardia como si le fuese a lanzar un hadouken? Se iba a hinchar este crack repartiendo justicia en ciertas tiendas occidentales por vender juegos sin precintar.
Y el mayor Histé/órico es: ¡El niño alemán loco!
Por petición popular, cerramos el artículo con el Histé/órico por excelencia, el primer Youtuber de la era digital y uno de los vídeos más reproducidos de la historia de Internet (sin contar las tertulias y directos de Hobby). Todo en él es un clásico: desde los psicotrópicos bailes y cánticos aleatorios, pasando por el desguace paulatino de su escritorio, en un éxtasis de locura sin precedentes causado por su adicción al Unreal Tournament. Un documento que debería estudiarse en todas las Facultades de Psicología y Medicina para que esto no se vuelva a repetir. Con todos ustedes, Deutsch verrückt junge! (¡el niño alemán loco!).
Pese a la corriente escéptica que pretende desmontar la autenticidad de este vídeo (gracias a nuestros lectores por compartirlo), me niego a creer que exista un actor más convincente que Marlon Brando en El Padrino. Si de verdad se trataba de una parodia de todos los nerds rabiosos sacada de contexto, sigue mereciendo el primer puesto. No he visto a nadie fingir mejor ni en la cama.
Bonus stage: la sorpresa final
Tranquilo, defensor del menor atisbo de veracidad: este vídeo es 100% fake, aunque parezca el único real de todos los repasados. Y no se me ocurre mejor forma de concluir este doble decálogo de brotes psicóticos que estampar mi propio teclado contra la pantalla del ordenador de la oficina mientras adelanto, de forma excepcional, el tema de la semana que viene.
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