Paramount Pictures nos ha ofrecido la posibilidad de visionar varias secuencias clave de Géminis (Gemini Man), la nueva película de Ang Lee que en nuestro país se estrenará el 18 de octubre. Y en el formato en el que ha sido filmada y concebida: con un HFR de 120 fotogramas por segundo y en 3D 4K.
El festín visual es difícil de describir: la fluidez del movimiento se asemeja a la realidad de tal manera que es prácticamente indistinguible de la misma y, ojo, los efectos especiales son para quitarse el sombrero.
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La película narra la historia de Henry Brogan (Will Smith), un asesino a sueldo cuya conciencia le obliga a retirarse. Un tiempo después comienza a ser perseguido por un implacable sicario: lo que no puede imaginar es que se trata de su propio clon, 27 años más joven que él. Cuando se encuentran por fin cara a cara, Henry decide luchar contra el sistema que ha creado a su doble, una réplica perfecta de sí mismo. El líder no es otro que su antiguo jefe Clay Varris (Clive Owen).
Lo primero que hay que decir es que las escenas de acción de Géminis cortan el aliento: Ang Lee juega con los tiros de cámara y con la profundidad del espacio para crear vibrantes secuencias en las cuales los reflejos, los espejos y las dualidades cobran una especial relevancia. Pero, en sus propias palabras, el apartado visual "necesita estar al servicio de una historia emocionante". Así que no cabe duda: el cineasta taiwanés sabe de sobra que no debe dejarse deslumbrar por la magia del cine y que su pilar fundamental es la narración.
Y ahí es difícil que se relaje porque tal y como ha expresado en diversas ocasiones, se siente muy identificado con el personaje principal, el maduro Henry, y su crisis existencial.
Géminis nació hace muchos años, en concreto en 1997 en Disney pero los efectos digitales para poder llevarla a cabo directamente ni siquiera existían. La idea era la que ahora sí ha conseguido salir adelante: que un mismo actor interpretara los dos papeles, pero que "el joven", Junior, fuera recreado íntegramente vía CGI del mismo modo que han sido creados de cero los animales que hemos visto en El rey león o tal y como fue creado César en la nueva trilogía de El planeta de los simios.
Ya os hemos hablado en algunas ocasiones de la forma en la que las capturas de movimiento han contribuido a crear personajes ficticios o incluso a aplicar técnicas de rejuvenecimiento o envejecimiento, pero esto es ir un paso más allá al no ser un retoque sino una nueva creación. Ang Lee ya nos dejó boquiabiertos con el tigre deLa vida de Pi, si lo recordáis.
El reto, no obstante, es mayúsculo dado que por la calidad de la imagen, casi cristalina, el nivel de detalle debe ser hiperminucioso y más si tenemos en cuenta que lo que se trata de replicar es un ser humano, su piel, su expresividad facial, su forma de moverse... Y no hará falta resaltar el hecho de que el espectador está muy familiarizado con Will Smith, así que llevar a cabo el "engaño" es aún más meritorio.
Por lo que hemos podido ver, el trabajo es impecable. Seguramente sirvió de entrenamiento la creación de la famosa pelea entre los dos T-800 de Terminator: Génesis, también producida por Skydance, aunque ni decir tiene que desde 2015 hasta hoy el desarrollo de las herramientas ha permitido que el resultado final sea mucho más satisfactorio.
Por supuesto Will Smith no ha dejado pasar la ocasión de bromear al respecto y en el junket de Londres ha dicho que a partir de ahora va a dejar de cuidarse y a engordar un montón, para poder decir "ey, si queréis que haga eso, pedídselo a mi yo digital de Géminis". Ang Lee, por su parte, ha agradecido especialmente al intérprete que haya tenido el coraje, la determinación y el corazón de dejarse escudriñar de tal manera que pudiera recrearse casi cada poro de su piel.
En fin, grandes expectativas de cara al próximo estreno de Gemini Man. Podremos ofreceros una crítica completa tan pronto como la veamos, una vez que sea presentada en Budapest. Hasta entonces, id buscando un cine que le haga justicia a la cinta y que cumpla los requisitos básicos para que la disfrutéis en todo su esplendor. Ang Lee bien lo merece y si nos dejó alucinados con Billy Lynn no esperamos menos en esta ocasión.
Descubre más sobre Raquel Hernández Luján, autor/a de este artículo.
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