Ya hemos jugado a Tales of Arise, el nuevo juego de Bandai Namco que marca un punto y aparte dentro de esta saga JRPG. En nuestras impresiones, os contamos por qué deberíais dedicarle toda vuestra atención.
En 2021 se cumplen 25 años del lanzamiento de Tales of Phantasia (en Super Famicom), la primera entrega de esta popular saga JRPG de Bandai Namco que nos ha dejado un gran número de juegos memorables.
Para celebrar tal acontecimiento (y debido a un pequeño retraso fruto de la pandemia), este año se lanza la decimoséptima entrega principal: Tales of Arise para PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X|S y PC.
Pero lejos de tratarse de un homenaje a la saga Tales of, este nuevo capítulo viene dispuesto a marcar un punto y aparte, revitalizando la marca para convencer tanto a aquellos que jamás han probado un Tales como a los veteranos más curtidos. ¿Lo habrán conseguido?
Nosotros hemos jugado durante varias horas a una versión preliminar de esta nueva entrega, y en nuestras impresiones de Tales of Arise os contamos por qué creemos que la respuesta es un rotundo sí.
Espíritu JRPG clásico, forma renovada
La demo de Tales of Arise a la que hemos jugado tenía lugar en torno a las primeras 10-20 horas de partida. No se nos aportaba demasiado contexto sobre la historia (mejor, en realidad), así que vamos a pasar muy por encima sobre el argumento.
En Tales of Arise asistimos al conflicto entre Rena, una nación de avances tecnológicos y mágicos que gobierna con mano de hierro sobre Dahna, una región más primitiva y de corte medieval. Originario de Dahna es Alphen, el protagonista enmascarado que porta una espada llameante, mientras que Shionne, la deuteragonista experta en artes curativas y hábil tiradora, pertenece a Rena.
Algo que nos ha llamado bastante la atención es que Tales of Arise se desmarca bastante de los tópicos habituales de esta clase de juegos: resulta muy refrescante ver que Shionne es la tipa dura, la que siempre lleva las riendas de la situación y tiene mano firme para actuar, mientras que Alphen tiene una personalidad más amable e ingenua, con un pequeño toque de humor que contrarresta la aspereza de la joven.
Algo que también nos ha llamado la atención de Tales of Arise es el constante aroma a JRPG clásico que se respira. En cuanto pusimos un pie sobre su mundo nos recibieron unos hermosos paisajes de corte fantástico, con llanuras que se perdían allí donde alcanzaba la vista, lagos de agua cristalina, construcciones naturales con formas y tamaños imposibles y la presencia ominosa de varios astros colosales en el cielo.
Aunque no se trata de un juego de mundo abierto (el mundo está dividido por "secciones"), nos ha sorprendido el tamaño de algunas de las zonas que podíamos explorar en esta demostración, teniendo que recurrir a menudo al mapa para orientarnos. Destacar que la exploración ya no está tan encorsetada como en entregas previas, pues es posible saltar y nadar, lo que confiere una mayor sensación de libertad y movimiento.
El hecho de que la demostración tuviese lugar en un punto relativamente avanzado de la historia atendía a un motivo: tener a nuestra disposición al grupo completo de personajes. Ya os hemos hablado de Alphen y Shionne, los dos protagonistas principales, pero también hemos conocido a Rinwell, una joven hechicera; Law, un muchacho experto en artes marciales; Kisara, una poderosa guerrera que porta un gigantesco escudo; y Dohalim, un hombre de aspecto exótico muy hábil con el bō.
Los seis componen la "party" principal de Tales of Arise, y como suele ser costumbre en la saga, cada personaje se controla de una manera distinta, cuentan con animaciones distintas y artes completamente diferentes. Vamos, que tenemos seis personajes con estilos de juego completamente diferentes, entre los que podemos alternar tanto dentro como fuera del combate.
Al entrar en contacto con los enemigos mientras exploramos empieza la batalla. Con el botón R realizamos ataques básicos (inicialmente un combo de tan solo tres golpes, pero se puede ampliar), mientras que Y, X y A están asociados a las artes de cada personaje.
Hay que tener en cuenta que se diferencia entre artes terrestres y aéreas, lo que significa que, en esencia, podemos tener equipadas seis diferentes al mismo tiempo con cada personaje, lo que da mucho juego a la hora de enlazarlas y crear espectaculares combos. Y eso sin contar con que cada personaje tiene sus entresijos: por ejemplo, con Alphen, si mantenemos pulsado el botón de arte en lugar de pulsarlo una única vez, activamos las habilidades de la espada llameante, causando devastadores daños a costa de la salud del protagonista.
También podemos realizar los ataques especiales de los personajes que nos acompañan con la cruceta (siempre que el medidor esté al completo); esto último tiene un uso bastante interesante, pues cuando los enemigos tienen poca salud podemos recurrir a estos movimientos para efectuar un ataque conjunto que suele poner fin a la vida del rival de manera espectacular. Algunos enemigos cuentan con puntos débiles, así que debemos golpear en ciertas partes de su cuerpo para hacer pupa de verdad.
Inicialmente los combates nos han parecido un tanto caóticos, pues tener a cuatro personajes peleando contra grupos grandes de enemigos, todos desatando técnicas que llenaban la pantalla de efectos de luz y partículas, hacía complicado seguir la acción. Pero pasados unos minutos y una vez acostumbrados, los combates de Tales of Arise nos han parecido realmente satisfactorios; cuando le pillamos el tranquillo y empezamos a encadenar combos de ataques normales con artes, lanzamientos aéreos y ataques conjuntos, se convierte en todo un espectáculo.
También hay que destacar que contamos con un medidor de Puntos de Curación, o PC. Las artes curativas, además de consumir energía de la reserva de arte, requieren una cantidad determinada de estos puntos. Es decir, que es uno de los medidores más importantes y nunca debemos quitarle la vista de encima si no queremos quedarnos "vendidos" en mitad de un combate. Para restaurarlo, podemos consumir objetos o descansar en campamentos.
También, en los campamentos, podemos usar los ingredientes recogidos para cocinar un surtido de platos con diferentes efectos beneficios.
En estos "momentos de campamento" se podía ver a los personajes manteniendo breves diálogos, y a lo largo de toda la demostración hemos presenciado un elevado número de conversaciones en tiempo real, tanto dentro como fuera del combate. En la parte inferior izquierda se muestran los subtítulos, y en ocasiones nos ha costado un poco seguir su ritmo.
Sin embargo esto no son los famosos "skits", las conversaciones entre personajes tan habituales de la saga Tales of. Desde Bandai Namco nos informaban de que por supuesto estarán presentes en la versión final de Tales of Arise, pero que tendremos novedades al respecto muy pronto.
En último lugar, mencionar que Tales of Arise cuenta con un apartado audiovisual a la altura. La presentación mantiene un estilo con toques cel-shading, acercándose al look de la animación japonesa, pero la calidad de los efectos en combate y la belleza de los escenarios hace que luzca de maravilla, mejor que cualquier otro Tales of.
En cuanto a la banda sonora, el legendario Motoi Sakuraba vuelve a dejarnos con fantásticas composiciones, con mucho ritmo y muy pegadizas en el caso de los combates, y calmadas y bellas a la hora de explorar. Pero nunca faltan los violines.
En definitiva: esta demostración de Tales of Arise nos ha dejado un muy buen sabor de boca, y estamos deseando descubrir más de su mundo, su historia y sus personajes. Si vosotros estáis igual, recordad que el 10 de septiembre tenemos una cita con Tales of Arise en PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X|S y PC.
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