Para los jugadores de PC, el ratón es una herramienta fundamental y sumamente necesaria en infinidad de videojuegos. Para disfrutar de un control y un manejo lo más acertados posibles, el ratón debe contar con una serie de características.
Si eres un jugador que disfruta de propuestas competitivas, títulos multijugador donde los reflejos y las reacciones instantáneas son muy importantes, contar con un buen equipamiento "gamer" podría salvarte la papeleta en tus partidas más decisivas.
En juegos como Call of Duty Warzone, League of Legends o Counter-Strike, todo se mide en milisegundos y eso puede marcar la diferencia entre esa lograda victoria o una aplastante derrota. Los ratones influyen en esto y vamos a ver el por qué.
Los ratones han evolucionado mucho con el paso delos años y se han convertido en dispositivos altamente precisos capaces de medir los movimientos de la mano del usuario con suma claridad y presteza. Esto se debe a que los sistemas ópticos y de láser que se han implementado gozan de una alta capacidad de medición.
El proceso en el que el ratón calcula la dirección en la que se desplaza y ejecuta ese comando de movimiento es instantáneo; gracias a esa lucecita roja que ves en la parte inferior de cada uno de estos dispositivos. Una pequeña cámara realiza decenas y decenas de tomas por segundo para poder determinar los parámetros de movimiento del ratón y así enviar esa información al PC.
Aquí es donde entran en escena los famosos DPI. Lo primero de todo... ¿Qué significa DPI? Pues bien, estas siglas a los puntos por pulgada o Dot per inch en inglés. Los puntos de pulgada de un ratón sirven para establecer parte de la sensibilidad de este. Por lo tanto, hablamos de un término que se refiere a unidades numéricas.
Cuanto más DPI tenga un ratón, más sensible será y esto se trasladará a la velocidad a la que se ejecutan los movimientos del cursor en pantalla y a la precisión de estos. Es decir, cuantos más DPI tenga un ratón, menos movimiento requerirá para desplazarse. Para que quede claro, os ponemos un ejemplo, si un ratón cuenta con 1000 DPI, este moverá el cursos 1000 píxeles por pulgada. Normalmente, un mayor DPI se experimenta mejor con un monitor con una mayor densidad de píxeles por pulgada.
Ya os estaréis imaginando las repercusiones que tiene esto en el mundo de los videojuegos. Al fin y al cabo estamos hablando de productividad. A más DPI de un ratón, menos tendrá que moverse nuestra mano para desplazar el cursor por la pantalla. No obstante, esto no significa que jugar a videojuegos requiera un DPI extremadamente alto; es más, incluso se puede volver en contra de un jugador.
Tomemos el caso de Valorant, el shooter táctico en primera persona de Riot Games. Se trata de un juego donde la precisión es fundamental, así que debemos recurrir a una configuración apropiada para poder apuntar y disparar con un alto índice de éxito.
Contar con una gran cantidad de DPI en un ratón se traduce en un control de cámara rápido con muy pocos movimientos del ratón. Así, si estás apuntando a un objetivo y este se desplaza, para ajustar de nuevo tu puntería solo precisarás de un leve toque en tu ratón. No obstante, demasiado DPI puede hacer que tu arma se vuelva completamente imprecisa. Piensa que el más mínimo movimiento puede alterar el ángulo de tu cámara o de tu arma.
Análisis de Valorant, el shooter competitivo que aspira a asaltar los eSports
Por lo tanto, en la justa medida está la clave del éxito, como en la gran mayoría de aspectos. Normalmente, la configuración del DPI depende mucho del jugador, ya que hay quien prefiere DPI bajos (entre 400 a 800) con alfombrillas de gran tamaño para desplazar el ratón de un lado a otro y otros se decantan por ratones con más DPI para medir mucho más sus movimientos.
Entonces, ¿dónde podemos saber cuánto DPI tiene un ratón? La forma más fácil de averiguar este valor es consultando las especificaciones técnicas del producto. Normalmente viene indicado como uno de los valores más especiales, aunque, como ya habéis visto no siempre es algo que marque la diferencia. Algunos ratones también ofrecen la posibilidad de ajustar el número de DPIs, ya sea por niveles o de manera manual.
Ahora ya tienes una excusa para cuando no des ni una sola skillshot en League of Legends o no atines un disparo en la cabeza en CS:GO. Siempre te quedará decir "este ratón no tiene un buen DPI" o "me han cambiado los ajustes del DPI del ratón".
Descubre más sobre David Rodríguez, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.