Análisis de El asedio de París, el último y correcto DLC de Assassin's Creed Valhalla

La saga vikinga de Eivor Matalobos aún no ha terminado y el vikingo más viajero aún guardaba un destino más en la recámara: las inmediaciones de París, en Francia. Ya está aquí El asedio de París, el segundo y último DLC del pase de temporada para el estupendo Assassin's Creed Valhalla.

Si el anterior La ira de los druidas nos sumergía en el misticismo de las tierras irlandesas, esta vez nos metemos en una lucha por el territorio franco, en la que conocemos a personajes históricos como Carlos el Gordo, Eudes o Ricarda de Andlau. El leit motiv de la historia es ese asedio a la ciudad franca del título, que efectivamente tuvo lugar en el siglo IX y "corrió por cuenta" de los vikingos.

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Uno de los aspectos más interesantes de este DLC para Assassin's Creed Valhalla es que, aunque lógicamente se toma sus libertades, en realidad es bastante fiel a los acontecimientos y personajes que existieron allí (un rey Carlos cobarde y excéntrico, un Eudes valiente y honorable...), por lo que puede ser una interesante "lección de historia" al estilo AC.

A nivel jugable, El asedio de París no os va a sorprender demasiado, pues a grandes rasgos sigue las pautas del juego principal, pero en la nueva región de Francia, a la que viajamos tras una pequeña introducción en Ravensthorne. Aún así, se han añadido un par de novedades que tienen su puntito.

Por un lado, dado que la peste azotaba Europa en aquellos tiempos, se ha añadido una especie de mini reto en el que oleadas de ratas pueden atacarnos al investigar en ciertas zonas. Esos grupos de ratas no se pueden matar, solo ahuyentar, por lo que debemos dar espadazos para que se escondan en rendijas y alcantarillas, para luego tapar esos huecos.

El cambio más relevante tiene que ver con la forma en la que hemos de asesinar a nuestros objetivos principales. Estos suelen estar en lugares muy fortificados, a los que podremos acceder buscando llaves de caminos alternativos, convenciendo a ciertas personas para que nos den paso... Nosotros podemos diseñar nuestra estrategia a partir de varias alternativas.

Este planteamiento recuerda enormemente a cómo dábamos caza a nuestros objetivos en Assassin's Creed Unity... ¿Será casualidad o homenaje que ambos juegos tengan lugar en París y planteen una dinámica de "caza" tan parecida? En cualquier caso, esto implica que, aunque tendremos mucha acción, las labores de investigación e infiltración ganan enteros.

Esto quizá no sea del gusto de los que busquen acción más directa, pero desde luego contribuye a que el tiempo de juego de este DLC sea tan largo como la de La ira de los druidas, incluso aunque vayamos solo al grano con las misiones principales. En esta ocasión, hemos tardado unas 6 horas en llegar al final de la historia, lo cual es una cifra de lo más respetable.

Con todo, es cierto que se hubieran agradecido más novedades interesantes, pues a grandes rasgos este DLC de AC Valhalla parece más de lo mismo, solo que en otro sitio. Al menos, conseguimos algún arma nueva que otra, como una impactante guadaña. Por cierto, aunque aproximadamente pide un nivel 200, el DLC adaptará automáticamente su dificultad si vuestro Eivor tiene un nivel más alto.

El diseño de los escenarios muestra desde la podredumbre de las alcantarillas y los apestados hasta las lujosas mansiones rodeadas de flores y la representación de los personajes más importantes es muy impactante. Por cierto, dato curioso: el actor de doblaje en castellano de Eudes es Luis Reina, quien  en el pasado había prestado su carismática voz al mismísimo Ezio Auditore.

En conjunto, el DLC The Siege of Paris nos ha parecido satisfactorio, no tanto por lo que supone a nivel jugable sino por su cuidada historia, diálogos y personajes, que nos llevan a una época en la que las supersticiones, los puñales por la espalda y la ambición palaciega eran moneda común.

Con esto, parece cerrarse una importante etapa para Assassin's Creed Valhalla. Es de esperar que pronto Ubisoft anuncie novedades de peso sobre el futuro de la franquicia, pero... ¿Habremos visto ya todo lo que hay que contar sobre las historias de Eivor Matalobos del Clan del Cuervo? Nos da en la nariz que no es la última vez que gritamos ¡skal! junto a él...