En 1997 llegaba a los circuitos de la primera PlayStation una de las entregas más importantes de la saga Castlevania: Symphony of the Night. En lugar de limitarse a reproducir la exitosa fórmula que tan rato nos dio en NES, Super Nintendo y Mega Drive, SotN adoptó elementos de la saga Metroid, más concretamente, el tener el mapa completamente abierto desde el principio, pero limitado por barreras que sólo era posible superar tras obtener un objeto o habilidad concretos. A esto se sumó un desarrollo propio de un RPG, con un Alucard que subía de nivel, tenía estadísticas y podía equipar distintas armas y objetos de protección.
La combinación de todos estos elementos funcionó como un reloj suizo, y si bien en su momento Castlevania Symphony of the Night fue vilipendiado por ser un juego 2D en el momento en que las 3D emergían, el tiempo lo ha colocado en su justo lugar, y hoy se lo considera una verdadera obra maestra. No en vano, se trata del primer 'metroidvania' (de ahí el nombre), subgénero que hoy en día tenemos hasta en la sopa.
Symphony of the Night se lanzó también en Saturn, con una versión que aunque incluía novedades, también presentaba unos cuantos problemas. Más tarde, contó con una suerte de reedición, con un nuevo doblaje, en el fantástico Castlevania: The Dracula X Chronicles para PSP. Hoy os acercamos el análisis de Castlevania Symphony of the Night original, tal y como se publicó en el número 75 de Hobby Consolas.
Entrevista con el vampiro
Diez años después de presentar el primer «Castlevania» para NES, Konami nos ofrece lo que podemos considerar como la culminación de una de las sagas con más solera de la historia de los videojuegos.
«Symphony of the Night» supone la primera incursión de la dinastía de los Belmont por los 32 bits y, Obviamente, la potencia de PlayStation ha permitido que Konami despliegue todas sus ideas de la manera más espectacular. Así, en primer lugar nos encontramos con unos gráficos detallistas y variados que, a pesar tomar elementos familiares de otros capítulos de la serie, logran impresionar por su barroquismo y excelente factura. En general todo el juego tiene un estilo fino, elegante, que recrea a la perfección el ambiente vampírico del lujoso castillo de Drácula.
El protagonista de «Symphony of the Night» no es ninguno de los descendientes de la familia Belmont, sino Alucard, el hijo del conde Drácula que apareciera en «Castlevania III». Alertado por la presencia de su padre -al que creía muerto- decide levantarse del ataúd y encaminarse hacia la ominosa construcción dispuesto a acabar de una vez por todas con la amenaza del Conde, lo que allí encontrará... no puedo desvelarlo. tan sólo os diré que os veréis inmersos en una enrevesada trama de la que forman parte la familia Belmont, María -ya más crecida- y por supuesto, Drácula.
Aunque el juego sigue manteniendo la sabia mezcla de aventura, plataformas y "beat'em up" que tan buenos resultados le ha dado en anteriores entregas, se ha introducido un cambio importante en su desarrollo: olvidaos de las típicas fases del «Castlevania» tradicional, ya que esta vez no hay niveles reales, sino que tenemos todo el castillo a nuestra disposición desde el principio, con lo que el juego adquiere una dimensión bien alejada de lo lineal. Con este sistema se aumenta también el componente de aventura, ya que para pasar a determinadas zonas habrá que conseguir los ítems adecuados.
Mención aparte merece la banda sonora, compuesta por numerosas melodías interpretadas con todo tipo de instrumentos, desde los más comunes a los más atípicos, como pianos o clavecines, todo ello encaminado a reforzar la fastuosa ambientación gótica que rezuma el juego. Resumiendo, para mí este juego es el mejor «Castlevania» de la saga y uno de los títulos más atractivos de la temporada.
Un inmenso castillo
El castillo de Drácula es un enorme laberinto compuesto por distintas zonas de distribución irregular que se superponen unas encima de otras. Cada zona tiene una decoración distinta, nuevos monstruos, numerosos misterios ocultos y sitios aparentemente inaccesibles que harán que volváis a explorarlas una y otra vez. Algunas os resultarán conocidas de otras entregas, como la clásica torre del reloj.
¡Puro Rol!
Como si de un juego de rol se tratase, Alucard irá subiendo de nivel y aumentando sus habilidades al mismo tiempo que adquiere todo tipo de armas, ítems, pistas y objetos mágicos en la tienda del bibliotecario.
Esta saga arrastra tras de sí una oscura leyenda en torno al conde Drácula que da origen a uno de los títulos más brillantes del año.
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Los Habitantes
El castillo de Drácula está habitado por todo tipo de criaturas sobrenaturales que intentan impedir que desvelemos el misterio que rodea a esta construcción, pero entre todas ellas destacan peligrosos jefes finales que nos pondrán las cosas bastante difíciles. En las imágenes podéis ver el aterrador aspecto de algunos de ellos, como una extraña hidra de tres cabezas, un minotauro y un hombre lobo que nos retarán a un duelo en la arena del Coliseo, o un pájaro de largas y aterradoras garras.
Manteniendo la filosofía de la saga, Konami ha realizado una versión para 32 bits que resulta tremendamente fresca y atractiva.
Estancias especiales
Los teletransportadores nos servirán para movernos con rapidez de unas zonas a otras del castillo, mientras que ese extraño polígono flotante nos permite salvar las partidas y reponer por completo nuestra energía.
Gráficos: 91
Aunque mantienen la línea de las anteriores entregas, se han aprovechado al máximo las posibilidades de la consola para construir el castillo más bonito que hayáis visto jamás. Los efectos de luz y transparencias, de lujo.
Sonido: 93
Pocas veces habréis escuchado una banda sonora tan bonita, digna de ser disfrutada en el equipo de música. A esto hay que sumarle las voces de los protagonistas, que aunque están en inglés dan ambiente.
Jugabilidad: 93
El movimiento de Alucard es de lo más rápido y preciso que hemos visto. A pesar de la gran cantidad de objetos que puede usar, el control es sencillo y la jugabilidad, instantánea.
Diversión: 93
La variedad de zonas distintas, el gran número de enemigos y las sorpresas que nos esperan a cada paso proporcionan diversión para meses.
Rubén J. Navarro
VALORACIÓN:
Estamos ante un auténtico juegazo. Hacía mucho que nada me enganchaba de esta manera, maravillándome en cada pantalla ante el magnífico trabajo realizado por Konami, quien ha conseguido combinar acción y aventura de una manera magistral. Lástima que no haya sido traducido, pero, en cualquier caso, es un juego que te recomiendo encarecidamente.LO MEJOR:
Diseño artístico, banda sonora, jugabilidad, desarrollo... Prácticamente todo.LO PEOR:
Textos en inglés.Versión comentada: Retro
92
Excelente
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