Análisis de Digimon World Next Order para PlayStation 4

En estos meses, todos estamos un poco locos con el universo de Pokémon, pero la saga de Digimon, que va a cumplir 20 años, también sigue en la brecha con una legión de seguidores muy fieles. Prueba de ello es la llegada de este Digimon World Next Order, una nueva entrega que llegó hace unos mesecitos a Japón y ahora desembarca en occidente.

Originalmente, era un juego para PS Vita y luego fue adaptado a PS4. Es esa última versión la que llega hasta nosotros (nos quedamos sin versión Vita, pero a cambio esta versión tiene más misiones), para regocijo de todos los jugones aficionados a acabar las cosas en -mon. Si habéis probado Digimon World en el pasado, ya sabéis por donde van los tiros: nuestro personaje entrenador recorre el mundo acompañado del digimon que haya elegido como compañaro para librar batallas contra otros monstruos y superar misiones secundarios. Un momento... ¿He dicho "del digimon"? ¡No, esta vez hay que decir "de los digimon"! En esta ocasión, no tenemos un compañero a nuestro lado, sino dos.

Nos movemos por un mapeado abierto, dividido en áreas. En todo momento vemos a nuestro entrenador (podemos elegir si es chico o chica, pero no modificar su aspecto) y a nuestros dos digimon compañeros, así como al resto de digimon que haya en la zona. Algunos serán aliados y simplemente conversaremos con ellos para recibir consejos o tareas, pero la mayoría de los que nos encontremos serán hostiles y correrán para atacarnos cuando nos vean.

En ese momento dará comienzo un combate en tiempo real. El personaje principal no pelea, sino que se queda al borde del "ring", animando a sus dos digimon. También podemos pausar el combate para navegar por nuestro inventario y usar objetos de ayuda. A base de animar a los digimon, podemos ganar acumular Poder de Orden. Cuando cada digimon tiene el suficiente acumulado, tenemos la oportunidad de ordenarles que ejecuten movimientos especiales, desde cargar energía para golpear más fuerte hasta lanzar demoledores ataques finales. A base de entrenamiento, podremos amasar suficientes puntos como para desencadenar los movimientos ExE, que consisten en fusionar ambos digimon en una criatura aún más poderosa.

Si perdemos el combate, seremos devueltos a Floatia, la ciudad que nos sirve de base de operaciones. Esta ciudad es crucial en el desarrollo, ya que hemos de mejorarla poco a poco. A base de superar misiones secundarias, los diferentes digimon que las encargan decidirán quedarse en la ciudad y mejorarla de diferentes formas: abriendo tiendas, dándonos items de vez en cuando... Aumentar la prosperidad de esta urbe servirá para que se desencadenen nuevas misiones.

Y hablando de items, estos resultan cruciales para la otra gran faceta del juego: el cuidado de nuestros dos digimon. Además de entrenar con ellos para que sean mejores luchadores, hay que vigilar constantemente sus ganas de comer, dormir o ir al baño, o curarlos si tienen alguna herida que les reste salud paulatinamente. En realidad, este ha sido uno de los mayores encantos de la saga, pero los jugadores menos acostumbrados pueden resultar algo desesperante tener que parar la aventura cada dos por tres porque el bichito de turno tiene que hacer caca. Es más, debido a su esperanza de vida o a que los "maltratemos" más de la cuenta, nuestros digimon pueden morirse de la noche a la mañana. Si eso sucede, volvemos automáticamente al pueblo y nos toca elegir 2 nuevos compañeros, con cuyo entrenamiento hemos de empezar de cero.

Así las cosas, los primeros compases de Digimon World Next Order pueden resultar un poco hostiles para los jugadores novatos o ajenos a los jrpgs más "hardcore", pero en realidad tanto los combates como la navegación están bastante más optimizados en su fluidez que en entregas previas. Eso no quita, por supuesto, que el título resulte bastante más "difícil de tragar" que otros juegos de rol similares, pero los usuarios más pacientes se verán cada vez más satisfechos, a medida que avanza la historia y descubrimos todo lo que puede aportar este mundo.

La historia no es particularmente innovadora (nuestro personaje es "arrastrado" misteriosamente al mundo de los digimon después de hacer un gran papel en un torneo y ha de averiguar por qué el Digiworld está patas arriba), si bien mantiene cierto aura de misterio en los primeros compases que resulta interesante. Las voces, por cierto, están en inglés con textos y subtítulos en castellano. Lo más atractivo de Digimon World Next Order, como siempre, es conocer y dominar las 230 especies diferentes que esconde. ¿Cómo se evolucionan? ¿Qué ataques puede dominar cada uno? ¿Qué alimentos le favorecen más? Dependiendo de lo que coman, lo que entrenen y su nivel de vinculación, podrán evolucionar a una especie u otra. A la par que avanzamos en esas facetas, nuestro personaje también gana puntos como entrenador, lo que le sirve para aprender nuevas habilidades que ayuden a sus digimon (encontrar más objetos, propiciar que recuperen más salud cuando descansan, etc).

El apartado técnico se ve resentido por el hecho de venir de Vita. Los gráficos, aunque coloridos, son bastante limitados en el detalle de los escenarios y personajes secundarios, así como en las animaciones. Los efectos especiales también son bastante sosetes, pero para compensar, la expresividad de los digimon sí resulta simpática cuando los felicitamos, regañamos o damos de comer. Desde luego, todo está a un nivel que no aprovecha en absoluto las posibilidades de PS4.

En definitiva, Digimon World Next Order es un título que no rompe moldes en ningún sentido y que incluso está anticuado en más de un aspecto (los gráficos y una dinámica basada en entrenamientos algo tediosa), pero a la vez ofrece una diversidad de retos y un encanto propio en su universo que sabrá satisfacer a los fans de toda la vida, a sabiendas de que el anterior Digimon Story Cber Sleuth nos pareció algo más redondo. Quizá no sea un juego para ti, pero nunca se sabe cuándo puedes estar sentado al lado de un digifan...