Análisis de Star Wars Episodio I Racer para PS4 y Nintendo Switch
Después de traer de vuelta dos juegazos como Star Wars Jedi Knight II Jedi Oucast y Star Wars Jedi Knight Jedi Academy, Aspyr vuelve a la carga con otro título clásico de Star Wars desarrollado por la extinta LucasArts. Pero esta vez nos olvidamos de las órdenes religiosas y las espadas láser para centrarnos en el deporte más arriesgado de la galaxia: las carreras de vainas.
Star Wars Episodio I Racer es uno de esos juegos que en el mundo actual sería bastante improbable. Porque no hablamos de un juego basado en una película, sino de un juego basado en un pequeño segmento de una película. Y aunque suele haber bastante división en torno a si la carrera de vainas mola o no (así son los fans de Star Wars, les gusta mucho discutir), lo cierto es que el juego salió realmente bien.
Star Wars Episodio I Racer es especialmente recordado por su lanzamiento en Nintendo 64, donde muchos lo conocimos, pero en su día también llegó a PC, a Dreamcast... e incluso a Game Boy. Hubo una secuela para PS2, Star Wars Racer Revenge, aunque es menos recordado (quizás porque ver a un Anakin crecido volviendo a las carreras resultaba un pelín ridículo).
Y ahora lo tenemos de vuelta en plataformas actuales, ¿pero sigue estando a la altura? Vamos a verlo en el análisis de Star Wars Episodio I Racer para PS4 y Nintendo Switch.
Now this is podracing!
Star Wars Episodio I Racer es la clase de juego de conducción arcade que cualquiera puede coger y disfrutar, muy al estilo de títulos de velocidad futurista como F-Zero o WipEout. Al jugar un torneo en la modalidad "aficionado" sólo debemos preocuparnos por acelerar y esquivar obstáculos, pero al subir el nivel de dificultad salen a la luz algunos de los aspectos únicos de este juego.
Porque no olvidemos que aquí no conducimos coches, sino vainas, que vienen a ser los Formula 1 del universo Star Wars. Así que podemos hacer cosas como utilizar un turbo en cualquier momento, aunque su uso prolongado hace que los motores se calienten. Y si nos chocamos contra un obstáculo con el turbo activado... Boom.
Es otra de las gracias de Star Wars Episodio I Racer: al sufrir golpes la vaina puede ser dañada, reduciendo la velocidad, la maniobrabilidad... Pero podemos mantener pulsado el botón R para realizar reparaciones a costa de perder velocidad.
Nos gusta mucho que haya un puntito estratégico, pues con los Truguts (la moneda de los Hutt usada en Tatooine) que ganamos en cada carrera, podemos comprar nuevas piezas en la tienda o en el desguace de Watto para mejorar nuestra vaina. Y dependiendo del circuito al que nos enfrentemos, quizás merezca más la pena dejarse los Tugruts en una modificación que mejore el agarre. Y si el circuito presenta muchas rectas, sin duda nos interesa ir a por la que mejora la velocidad.
Los circuitos son uno de los puntos fuertes de Star Wars Episodio I Racer: en lugar de estar limitados a Tatooine, podemos competir en ocho planetas diferentes. Puede parecer poco -y para los estándares actuales, probablemente lo sea- pero todos los circuitos están muy trabajados, incluyen atajos y caminos secretos que siempre es divertido descubrir, y su estructura cambia en función de la dificultad en la que jugamos.
Además, para invitarnos a seguir compitiendo y mejorando nuestras habilidades, al completar carreras en el modo torneo desbloqueamos nuevos personajes, cada uno con su propia vaina y estadístics. Sebulba es el mejor, y además tiene el añadido de poder usar trampas (está feo, pero aquí es divertido), aunque para desbloquearlo hay que sudar la gota gorda.
Pero basta de hablar del juego; hablemos de esta versión de Star Wars Episodio I Racer para PS4 y Nintendo Switch. Lo cierto es que el que por aquel entonces era su punto fuerte, lo sigue siendo hoy: la sensación de velocidad es alucinante e incluso rivaliza con la de juegos de conducción actuales. LucasArts lo clavó y Aspyr sólo ha tenido que aumentar la resolución y mantener el framerate en unos 60fps siempre estables.
Siendo justos, habría estado bien encontrar más novedades, porque fuera de eso el juego es exactamente el mismo. Por ejemplo, algún modo extra, porque sólo tres se anntojaba escaso entonces y hoy todavía más. La versión de Nintendo Switch, que es la que hemos podido analizar, incluye control por movimiento gracias al giroscopio de los Joycon, pero en un juego que requiere reflejos de Jedi nosotros preferimos confiar en los controles tradicionales.
Oh, os alegrará saber que en Star Wars Episodio I Racer se ha mantenido el multijugador a pantalla partida, aunque sigue siendo sólo para dos personas (de nuevo, algo que podrían haber cambiado). Lo bueno es que en Switch sólo se necesita un Joycon por persona para jugar. Todo un puntazo.
VALORACIÓN:
Aunque no incluya novedades de peso más allá del aumento de resolución, la sensación de velocidad y la adrenalina que desprenden las carreras de vainas no han envejecido ni un ápice.LO MEJOR:
La sensación de velocidad. Gran variedad de vehículos y circuitos. Sólo un Joycon por persona en el modo multijugador.LO PEOR:
El salto a la alta definición no evita que se le noten los años. Sin novedades de peso.Plataformas:
Nintendo Switch,
Retro,
PC,
PS4
Versión comentada: Nintendo Switch
80
Muy buenoDescubre más sobre Álvaro Alonso, autor/a de este artículo.
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