Afrontamos el análisis de Star Wars Jedi Fallen Order con "una nueva esperanza". Respawn nos ofrece el regreso de la saga con una aventura en tercera persona para un sólo jugador, centrada en las habilidades de un caballero Jedi y ambientada tras La venganza de los Sith.
Respawn Entertainment (el estudio de Vince Zampella) nos ha demostrado su talento en repetidas ocasiones. Son los creadores de Titanfall, Titanfall 2 y Apex Legends, pero ¿son capaces de asumir un proyecto de estas dimensiones? ¿Un juego de Star Wars centrado en el modo historia y para un sólo jugador?
Os hacemos un pequeño spoiler: por supuesto que sí. Lo que han hecho, en resumidas cuentas, es cumplir la fantasía de cualquier fan de la saga; un título que es sobresaliente por méritos propios -no sólo por la ambientación- y que además es fiel al material original (con una historia nueva).
Para conseguir un juego del calibre de Star Wars Jedi Fallen Order, se ha unido a la tripulación Stig Asmussen, el director de God of War III para PS3. Y su trabajo se deja ver en muchos aspectos. En el ritmo de los enfrentamientos, la exploración, los momentos cinematográficos... y la fidelidad al universo creado por George Lucas. Sin desmerecer a títulos como Star Wars Battlefront II (que personalmente considero como un gran "shooter", con campaña, multijugador, modo cooperativo y un apartado técnico que todavía hoy es espectacular) tenemos la impresión de que Fallen Order es el juego que nos merecíamos.
Subid a nuestra nave, la Mantis, y acompañadnos por un viaje apasionante, comenzando por un argumento "que nos rodea, penetra en nosotros y mantiene unida la galaxia".
Hace mucho tiempo, en una galaxia muy lejana
La historia que vertebra Star Wars Jedi Fallen Order es canon. Esto es; a partir de ahora forma parte de la cronología oficial, al igual que las películas o las series The Mandalorian, Clone Wars o Star Wars Rebels. Precisamente por eso, a nosotros nos ha parecido un tanto artificiosa. El juego encaja entre el Episodio III y Rogue One, tratando de arrojar un poco más de información sobre los Jedi, la orden 66 y los caminos de la Fuerza. Como seguro que habéis adivinado, esto le obliga a estar "encorsetado" para no alterar lo que vimos en el cine.
De hecho, las referencias a personajes conocidos no son muy numerosas. Como ya se había revelado, aparecen inquisidores (como en Rebels), se recupera a Saw Gerrera -el personaje interpretado por Forest Whitaker en Rogue One- y se menciona a unos cuantos caballeros muy conocidos. Además de visitar una de las localizaciones del Ep. III. Pero ya sabemos que en los videojuegos lo que mejor ha funcionado era separarse de la historia conocida, como en KOTOR. En este caso, sin alejarnos tanto de la saga de los Skywalker, la verdad es que disfrutamos de una historia que es puro Star Wars.
Nunca habíamos oído hablar de la nave Mantis, de Cere Junda o de Greez Dritus, pero se sienten como una tripulación y su personalidad queda patente después de un par de secuencias. Mención aparte merece el droide BD-1, que es uno de los grandes descubrimientos del juego. Tiene un papel clave en la historia, implica cambios en la jugabilidad y además participa en las secuencias más divertidas junto a nuestro protagonista, Cal Kestis.
Sí, para el final dejamos a nuestro aprendiz de Jedi. Es un personaje interesante, del que iremos conociendo más a medida que jugamos (tanto en los niveles "regulares" como en flashbacks). Como decía Palpatine "seguiremos su carrera con gran interés". Quedaos con que la historia no desmerece comparada con otras obras de la saga, pero claro, tampoco es El imperio contraataca.
Un prodigio de diseño
Puede que Jedi Fallen Order no invente nada, y sin embargo, no hemos disfrutado de muchos juegos con un diseño de niveles tan afinado en muchísimo tiempo. Delante de nosotros se despliega un equilibrio perfecto (ojo, que esta palabra no se puede tomar a la ligera) entre exploración, combates, subida de nivel... que se ha conseguido mediante la combinación de distintos estilos de juego. Es como si Respawn hubiese dado con la receta magistral, con elementos de Uncharted, de Metroid y de Dark Souls para que la aventura de Cal Kestis tuviese un sabor único, que conquistase a todo el mundo.
Construye tu propio sable láser con este kit
A lo largo del juego visitamos 7 planetas diferentes (de los cuales, sólo Kashyyyk, el planeta de origen de los wookies, ha aparecido en las películas). Alguno de estos mundos tienen una incidencia argumental, y sólo podemos visitarlos en un momento determinado, pero el núcleo del juego está formado por cuatro niveles: Bogano, Zeffo, Kashyyyk y Dathomir, sobre los que podemos volver. La estructura de estos escenarios está construida como en la saga Dark Souls.
Esto significa, en primer lugar, que son escenarios retorcidos, llenos de caminos alternativos, y en los que tenemos que ir abriendo atajos. En Jedi Fallen Order no tenemos hogueras para salvar la partida, recuperar la energía y hacer que los enemigos reaparezcan... pero sí que contamos con puntos de meditación, que tienen la misma función (y que también nos permiten mejorar nuestras habilidades). Cuando muere un Jedi, su cuerpo desaparece, así que si queremos recuperar la experiencia que nos haya quitado un enemigo, lo que tenemos que hacer es volver a encontrarle (está marcado por un resplandor) y golpearle.
Un elemento que seguro que agradecen los jóvenes padawan es que podemos consultar el mapa en cualquier momento (está inserto en la memoria de nuestro androide BD-1) y que nos indica qué caminos podemos recorrer, y cuáles están bloqueados porque nos falta una habilidad. Y aquí es donde encontramos el segundo de los pilares que conforman el diseño de escenarios. Como si se tratase de Metroid, las habilidades de la Fuerza, las piezas de equipo (como el respirador submarino o unos guantes especiales) y las modificaciones de BD-1 abren nuevos caminos que al comienzo del juego estaban bloqueados.
Esto nos da la posibilidad de regresar sobre nuestros pasos para conseguir más objetos. Pero no penséis que, al contar con varios planetas nos vamos a sentir perdidos. Jedi Fallen Order nos permite libertad de exploración, pero siempre nos mantiene informados sobre cuál debería ser nuestro próximo movimiento.
Y hablando de movimientos, la navegación por los escenarios tiene mucho de Uncharted o la trilogía Tomb Raider. De hecho, todo el sistema de "plataformeo" resulta muy familiar: el uso de cuerdas, trepar por paredes y cornisas, resbalar por pendientes de barro y hielo... en este caso, las habilidades de la Fuerza, como el doble salto, empujar objetos a distancias o "congelar" temporalmente las máquinas añaden una capa adicional a la navegación por los escenarios. Nathan Drake y Lara Croft también estarían orgullosos del modo en que Cal Kestis se enfrenta a los puzles.
Si bien es cierto que no son muy numerosos, nos hemos encontrado con un par de rompecabezas en el juego que requieren de nuestro ingenio y habilidad, y estaban perfectamente integrados en el entorno. Conseguían esa sensación de descubrimiento que teníamos cuando veíamos a Luke entrenarse en Dagobah en El imperio contraataca o cuando Rey recorría los caminos de la Fuerza en Ahch-To, en Star Wars Los últimos Jedi.
Para el final, dejamos algunos momentos "cinematográficos" de los que no pueden faltar en un juego del género. Nada acelera el pulso como una persecución, la aparición por sorpresa de una criatura gigante o una huída in extremis, mientras todo se desmorona a nuestro alrededor. Podéis contar con que también están en el juego, sin abusar, junto a los enemigos finales y momentos "especiales" como la secuencia del AT-AT que se mostró en el anuncio del juego durante el pasado E3. En general, Fallen Order tiene un ritmo ascendente, que consigue mantenernos pegados a la pantalla... hasta que se acaba (entre 6 y 10 horas, según nuestra habilidad).
La espada de luz, un arma noble para tiempos más civilizados
El sistema de combate es una parte fundamental del juego de Respawn, y quizá una de las más complejas de conseguir. Por una parte, el sable láser en manos de un caballero Jedi (tú no, Finn) es un arma demoledora, capaz de atravesar cualquier superficie, detener -y devolver- disparos y cercenar extremidades de monstruos y humanos. Si tenemos en cuenta que también tenemos a nuestra disposición los poderes de la Fuerza, el resultado es que somos demasiado poderosos para cualquier enemigo que se nos ponga por delante (más o menos lo que pasaba en las dos entregas de Star Wars El poder de la Fuerza). Por eso se ha optado por un estilo de combate muy similar a Sekiro Shadows Die Twice, que nos pone las cosas un poco más difíciles.
Os refrescamos la memoria; en Sekiro, el combate se basa en acabar con la "postura" de nuestro enemigo para que resulte vulnerable (bien mediante repetidos ataques o parando los suyos en el momento justo). Pues bien, este sistema funciona igual en Jedi Fallen Order. Los guardias de asalto y las bestias no pueden detener nuestros ataques, como es lógico, pero en cuanto subimos un poco el nivel: los scout trooper, purge trooper y otros enemigos que no vamos a desvelar para evitar los spoiler, son capaces de parar nuestra espada.
Con ellos tenemos que hacer parries en el momento adecuado y esquivas, con las que aumentar nuestro medidor de Fuerza y hacerlos vulnerables. Cuando les hemos quitado suficiente vida, como en Sekiro, podemos ejecutar movimientos finales para acabar con ellos. (estos sí que incluyen desmembramientos con droides y monstruos).
En cuanto a los enemigos finales (y las bestias únicas que aparecen repartidas por los planetas), la verdad es que es otro de los aspectos en que Fallen Order se nos ha quedado corto. La galaxia Star Wars es rica en criaturas y las filas del Imperio cuentan con tropas de alto rango... y sin embargo, nos han parecido un poco "desaprovechadas". Entre todos, rescatamos el papel de la Segunda Hermana (la inquisidora que hace de antagonista principal de Cal Kestis y que además de ser un enemigo duro, tiene un interesante trasfondo).
Deberás ir al planeta Dagobah, si has de aprender los caminos de la Fuerza
Al fin y al cabo, Star Wars Jedi Fallen Order es la historia de cómo Cal Kestis se convierte en caballero Jedi y por tanto el sistema de "aprendizaje" es uno de los puntos clave. No sólo está vinculado a nuestro avance en el juego -recordad que hay zonas que sólo son accesibles cuando aprendemos alguna habilidad- sino que influye en las acciones más básicas: nuestra forma de combatir, de movernos por los escenarios...
El progreso se desglosa en diferentes ramas. Por una parte, tenemos un árbol de habilidades que se desbloquean con puntos (Cal no sube niveles) y que nos otorgan nuevos ataques, mayores niveles de Fuerza o más energía. Son las acciones vinculadas directamente con nuestra experiencia, y de las que no depende nuestro avance. A éstas, hay que sumar poderes Jedi que se revelan de forma argumental (al llegar a cierto punto del juego, tener una visión o derrotar a un enemigo) y que sí abren nuevos caminos. Funcionan igual que las mejoras añadidas a BD-1, como sobrecargar circuitos o hackear interruptores, y que accesorios como los guantes de escalada.
También podemos encontrar estimulantes que aumentan nuestras posibilidades de curación (muy del estilo de la calabaza de Sekiro) y coleccionables que aumentan nuestra barra de energía y de Fuerza. Además de una mejora para el sable láser que afecta a nuestra manera de luchar.
Precisamente el sable de luz nos ofrece unas enormes posibilidades de personalización. Podemos acudir a un banco de trabajo para cambiar el color, el emisor, empuñadura, material e interruptor... aunque sólo tiene un efecto cosmético. Lo mismo que el cambio de indumentaria para Cal y que los colores de BD-1 y de la nave Mantis. Estas opciones cosméticas, que se desbloquean encontrado los cofres ocultos por todo el mapa, tampoco son un gran aliciente para explorar.
No es tan abyecto como las armas láser
El apartado técnico de Star Wars Jedi Fallen Order es irregular. Nosotros lo hemos jugado en PS4 PRO (nos da opciones de resolución o de rendimiento, a 1080p pero con una tasa de frames más estable) pero en ambos casos nos hemos encontrado con problemas. El primero de ellos está en los propios modelos del juego, a los que le falta detalle. Respawn ha apostado por el uso del motor Unreal (en lugar de Frostbite, que se usa en el resto de producciones de EA) y la verdad es que el resultado ha quedado por debajo de lo esperado. Las texturas flojean y algunos escenarios parecen vacíos. También nos hemos encontrado ralentizaciones y tiempos de carga bastante largos.
Pero en el lado luminoso, hay que destacar las animaciones de combate. Star Wars JFO es el juego que mejor ha captado el uso del sable láser... tal y como lo vimos en Episodio III La venganza de los Sith. Esto es, son coreografías rápidas y espectaculares que lucen muy bien en pantalla. Por otro lado, también aplaudimos el apartado sonoro. Además de recuperar tres temas compuestos por John Williams para el cine (no os decimos cuáles son por no revelar demasiado). se han introducido variaciones que encajan perfectamente con el tono de la saga.
Y además, el juego está bien doblado al castellano (aunque algunas frases genéricas de Kestis no encajan en la situación). En resumen, se trata de un apartado técnico notable. Pero si lo ponemos "en contexto" comparado con otros elementos del juego -como el diseño o el sistema de combate- se convierte en uno de sus puntos flacos. En cuanto a la línea artística, el respeto a la saga creada por George Lucas es impecable; las nuevas localizaciones, máquinas y criaturas encajan a la perfección en este universo.
Valoración final
Ha merecido la pena esperar todo este tiempo para disfrutar de Jedi Fallen Order. La premisa que nos dejó Respawn (una aventura centrada en la historia para un jugador, sin modo online) casi nos devolvía a los tiempos de Star Wars KOTOR o la saga Dark Forces "antes de estos tiempos oscuros, antes del Imperio". Lo mejor de todo no es que sea fiel a la saga -esa es la parte fácil- o que añada más riqueza al universo expandido. En realidad lo que más nos ha gustado es su desarrollo, como videojuego, capaz de atrapar a cualquiera que vaya buscando una buena aventura.
La combinación de escenarios tipo Dark Souls, la navegación de Uncharted, unos combates como en Sekiro... con una ambientación impecable y genial banda sonora dan como resultado un juego brillante, que sólo ha tropezado por su escasa duración y por un apartado visual que no está a la altura de otros juegos actuales.
VALORACIÓN:
Fallen Order es el juego que cualquier fan de Star Wars estaba esperando: una aventura para un jugador fiel a la saga, y que brilla por méritos propios. La combinación de combates (al estilo de Sekiro), exploración y un diseño de niveles inspirado en Dark Souls, funciona perfectamente. Sólo flojea la duración y un apartado gráfico "justo".LO MEJOR:
Un diseño de niveles brillante, el sistema de combate con la Fuerza y el sable de luz, y un gran uso de la licencia Star Wars.LO PEOR:
Se queda corto (lo podemos completar en menos de 10 horas). El apartado gráfico parece anticuado.Versión comentada: PS4
90
ExcelenteDescubre más sobre David Martínez, autor/a de este artículo.
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