Análisis Tales of Arise para PS5, PS4, Xbox Series X|S, Xbox One y PC: un regalazo de aniversario para los fans del JRPG

La saga Tales of regresa para traernos una nueva entrega que supone un paso más en la dilatada trayectoria de la que ya es una de las franquicias JRPG más consolidadas del mercado. Tales of Arise llega para celebrar el 25 aniversario de la saga (con unos meses de retraso) por todo lo alto.

Pese a haber recibido Tales of Vesperia Definitive Edition hace un par de cursos, los fans de la licencia de Bandai Namco han estado aguardando cuatro años el estreno de una nueva entrega principal tras el bien recibido Tales of Berseria. 

Ahora, ese esperado momento llega con Tales of Arise, que se lanza el 10 de septiembre en PS5, PS4, Xbox Series X|S, Xbox One y PC. Nosotros ya hemos podido jugarlo y en las siguientes líneas, os contamos qué nos ha parecido esta ambiciosa entrega.

La saga Tales of lleva ya unos cuantos años y unas cuantas entregas regalando a los fans del rol más japonés una propuesta realmente distinguida. 

Juego tras juego, siempre se ha buscado sorprender al usuario mediante avances técnicos y cambios en el gameplay que aporten frescura, sin que por ello se pierda la esencia de estos cuentos llenos de fantasía.

Los mejores discos duros que puedes comprar para tu PS5

Si necesitas ampliar la capacidad de tu PS5, estos discos duros son baratos y además te permiten instalar en ellos decenas de juegos.

Ver listado

Y precisamente esto es lo que pretende y consigue Tales of Arise. Bastan unas pocas horas para darse cuenta de que lo nuevo de la saga ha pegado un salto de calidad enorme gracias a un mayor presupuesto, que persigue un claro objetivo: llegar al mayor número de jugadores posible.

La ambición de Bandai Namco y el equipo de desarrollo queda plasmada en casi todos los puntos que definen a Arise. Pero vayamos por partes, que hay mucha tela que cortar en las más de 40 horas que os puede llevar este juego. No temáis, porque aquí no encontraréis spoilers de peso.

Dos pueblos enfrentados, un solo destino

Curiosamente, en lo que menos busca cambiar Tales of Arise es en su narrativa, uno de los apartados más mimados con los años y más representativos. Una nueva historia independiente nos aguarda llena de momentos épicos, drama entre personajes y esencia anime.

El juego nos presenta un conflicto entre los planetas Rena y Dhana. Los habitantes del primero, con una tecnología superior, tomaron a la fuerza el mundo de Dhana hace 300 años y desde entonces sus desdichados pobladores han vivido esclavizados y a la sombra de los renanos.

Sin embargo, todo esto está a punto de cambiar con la llegada de Alphen, un misterioso joven que ha perdido la memoria y que es insensible al dolor. Este, junto a Shionne, una renegada de Rena con una maldición (hacer daño a todo aquel que la toque), buscará devolver la paz a los cinco reinos de Dhana.

Por este camino libertario se nos narrará la relación entre ambos, con un desarrollo de personajes llevado con esmero, marca de la casa, y presentando conflictos de toda clase, mientras seguimos añadiendo héroes a nuestro particular grupo.

Aquí, Tales of Arise toma un dirección más "convencional" con respecto a, por ejemplo, Tales of Berseria. Su héroes son más "buenazos", pero todos cuentan con motivaciones creíbles y arcos narrativos propios.

Si bien es cierto que muchos de los estereotipos del género en cuanto a discurso están presentes, siempre logra sorprender con algún que otro giro antes de llegar a saturar. 

Cinemáticas anime, escenas tomadas con el propio motor del juego y diálogos representados por viñetas a lo manga estarán a la orden del día para contarnos los pasos e inquietudes de los protagonistas.

El juego se apoya en todo tipo de técnicas para que empaticemos emocionalmente con los personajes y sí, evidentemente, hay skits. Una de las señas de la saga aparece con gran frecuencia en forma de estas tiras comiqueras que nos dan a conocer pequeñas conversaciones entre personajes.

Pero no es menos cierto que algunas de estas formas de narración podrían haberse establecido de mejor manera. Por ejemplo, mientras caminamos por el mundo, los personajes hablarán y estas conversaciones aparecerán en pequeño en una esquina de la parte inferior de la pantalla.

El juego cuenta con un gran doblaje al japonés e inglés y con subtítulos en castellano, pero leer este tipo de diálogos a veces no resulta fácil. Lo mismo sucede con las skits, a las que se puede acceder en determinados momentos que aparecerán marcados en la esquina contraria de la pantalla.

Pese a señalizarse, nos ha parecido que algunas escenas y diálogos pueden llegar a pasarse por alto simplemente por un despiste o por que estamos apreciando determinado punto del mapa o del combate.

JRPG clásico renovado

Entrando más de lleno en el gameplay, Tales of Arise apuesta por una renovación en muchos de los aspectos de la serie y pule otros tantos que no habían conseguido alcanzar la mejor de sus formas en pasadas entregas.

Eso sí, aquí estamos ante un JRPG de los pies a la cabeza, por lo que no hay sorpresas en su planteamiento. Nos enfrentamos a un juego donde recorremos un mundo dividido en zonas, y con una progresión marcada por los combates en tiempo real y conversaciones de todo tipo.

La naturaleza más clásica del género nipón se palpa en el ambiente. Nos moveremos por zonas más amplias de lo acostumbrado, pero separadas por segmentos y la exploración se basará en la recogida de ingredientes para cocinar, monedas con las que comprar objetos y la apertura de cofres.

No obstante, Tales of Arise vuelve a tener algo que decir aquí y es que problemas, como los que vimos en Tales of Zestiria con el diseño de su mundo, aquí han quedado bien solventados.

Los JRPG suelen cojear en el diseño de niveles y pese a que los de esta entrega no son una revolución, su amplitud y planteamiento convencen. 

Hay más verticalidad, se pueden acceder a zonas saltando, se puede nadar y la exploración se premia en un mayor grado. Incluso hay coleccionables en forma de búhos que nos otorgarán accesorios cosméticos.

Laberintos pasilleros haberlos hay, pero los aspectos genéricos de anteriores entregas se disimulan mejor, una señal más de como un mayor presupuesto ha acabado beneficiando al juego.

Combate actualizado, frenético y acertado

Es la hora de las tortas y es que toca hablar del sistema de combate, elemento con el que Tales of Arise logrará encandilar a más de uno. Una vez más, lo clásico de la saga y la apuesta por la renovación se unen para formar un híbrido más orientado al hack and slash que es de lo mejorcito del juego.

¿Cuál el siguiente paso en el Linear Motion Battle System de los Tales of? Pues bien, el sonado sistema de combos mediante el uso de ataques básicos y las ya conocidas Artes nos permite "profesionalizar" el gameplay hasta alcanzar cotas de frenetismo altamente satisfactorios.

Una vez entremos al arena de combate cerrada (separada del escenario) podremos atosigar a los diferentes enemigos generando cadenas de combos que ejecutaremos con una mezcla de ataques básicos y tres tipos de Artes (vinculadas a tres botones principales del mando).

Dispondremos de una cantidad de básicos limitada hasta que el personaje se canse y también de una barra de artes que se consumirá cuando realicemos estos ataques especiales. No obstante, todo se recarga muy rápido, por lo que la acción apenas de detendrá una vez la lleguemos a dominar.

A parte de este repertorio, los otros miembros de la party (4 disponibles en combate de los seis presentes) nos ayudarán con ataques potenciados que se irán recargando con el paso del tiempo. Cada uno tiene una utilidad. 

Por ejemplo, Law descargará un potente puñetazo capaz de deshabilitar a los rivales con mejores defensas y Kisara acudirá presta a la batalla con su escudo en ristre para defendernos.

Además de esto, si conseguimos golpear a los enemigos entre todos los miembros del equipo de forma continuada se dispondrá de un ataque devastador y muy espectacular que causará daños muy elevados.

El peso del combate recae sobre Alphen, quien encima, cuenta con una espada de fuego que le permite realizar otros ataques ardientes a cambio de salud. No obstante, podremos manejar a cada uno de los otros cinco integrantes.

Y es aquí donde hay que destacar la diferenciacion de todos y de cómo se ha conseguido que presenten una jugabilidad única, personal e igual de divertida. 

El estilo de Rinwell es mucho más pausado al basar su ofensiva en hechizos, Shionne ataca la larga distancia y se centra en el apoyo mediante artes curativas tirando de los limitados puntos PC y así un largo etcétera.

En materia de añadidos hay mucho más por comentar. Se ha sumado la opción de realizar esquivas y esquivas perfectas (parrys) ante los ataques de los enemigos. Además, si recibimos daño continuado podremos realizar artes místicas (más espectáculo audiovisual a la receta).

La verticalidad también esta presente en el combate y es que también dispondremos de artes únicas para cuando estemos en el aire. El sistema de combos permite artes que levanten al enemigo en volandas para, así, continuar zurrándole desde lo alto.

Por supuesto, la curva de aprendizaje de Arise irá planteando todos sus puntos poco a poco hasta que podamos desarrollar nuestro mayor potencia. Por no hablar de la ingente cantidad de ataques que iremos aprendiendo por el camino. No obstante, hay algunas pegas.

Una vez le tomamos el pulso al combate de Arise vuelve a suceder algo que ya ha ocurrido en anteriores entregas: el nivel de desafío se nos antoja un tanto bajo en la dificultad estándar, por lo que recomendamos elevarla prácticamente de entrada, si se busca algo de reto en el juego, pese a que portábamos algunos potenciadores.

Además, la inteligencia artificial de nuestros compañeros flojea en bastantes situaciones, pese a que podamos establecer algunos de sus patrones de comportamiento. La IA enemiga también es un tanto cuestionable, aunque nada que llegue a lastrar el gameplay. 

En lo que respecta a las esquivas, la acción no está del todo bien llevada y algunas veces resulta complicado hacerla a propósito. Por último, en determinados momentos, la lucha era demasiado caótica con una sobredosis de estímulos visuales en pantalla.

7 juegos de rol japoneses que te ayudarán a aliviar la espera de 'Final Fantasy VII parte 2'

Pese a esto, el resultado de todo lo descrito nos deja un sistema de combate versátil, divertido, con profundidad y que sobretodo invita a pegarse una y otra vez siempre que veamos un grupo de enemigos. Una vez más, logra captar la atención de veteranos y primerizos.

Elementos roleros clásicos tampoco faltan, como podría ser la cocina, que será fundamental para potenciar a nuestros personajes. También encontramos compra de armaduras, presencia de elementos, ataques físicos o especiales... por haber hay hasta pequeñas mecánicas de gestión de granja.

Nuestros paseos por el mundo de Dhana han evidenciado la importancia de los campamentos en los que descansar, para recuperar vida, PC y de paso ganarnos el afecto de los miembros del grupo con pequeñas conversaciones y enternecedoras escenas mudas.

El progreso del juego se mide por niveles a los que llegamos mediante la experiencia ganada en combates. Esto nos otorgará puntos para desbloquear mejoras en un árbol de habilidades con un esquema de celdillas. Con ellos también podremos obtener los ya característicos Títulos de esta saga.

Como veis contenido tendremos para dar y tomar y las tareas que van más allá de las principales aportan un buen puñado de horas extra. Por desgracia, en materia de secundarias, Arise sigue arrastrando los problemas de este género al presentar actividades casi irrelevantes y repetitivas.

Todos los elementos que forman el juego responden ante una interfaz minimalista y clara que no apabulla pese a la gran cantidad de opciones que hay en apartados como la personalización o la configuración.

Tales of Arise en lo técnico

¿Ha habido downgrade en Tales of Arise? Por supuesto, los primeros vistazos mostrados y el resultado final remarcan que sí, pero visto con perspectiva, también resulta evidente que este juego no necesita ser un portento gráfico para atrapar a sus jugadores.

El "Atmospheric Shader" introducido, que entremezcla cel shading, estética anime y un toque de acuarela hace que los escenarios luzcan de lujo y con una personalidad y color que invitan a ser disfrutados desde el primer momento.

Los cinco reinos de Dhana presentan un estilo radicalmente distinto entre si y vienen a identificarse con diferentes biomas que aportan distintivos toques a la vistosa paleta de colores del juego.

El mundo de Tales of Arise resulta encantador en lo visual gracias a Unreal Engine 4 y es acompañado por una banda sonora que cumple de sobra con lo que se espera de ella, aunque con algún que otro tema más genérico.

No obstante, en lo que respecta a aspectos técnicos, nos hemos cruzado con algún que otro problema en la carga de texturas y esporádicas caídas de frames. Siempre son aspectos que suelen acompañar a esta saga.

Por suerte, el modelado de los personajes y sus animaciones han mejorado significativamente, especialmente en las animaciones en las que se tira del propio motor del juego, aunque sigue pecando de ser algo estático en ciertos momentos.

Hemos realizado el análisis de Tales of Arise en PS5, lo que nos ha permitido escoger entre dos modos de rendimiento (priorizar resolución 4K o 60 fps) algo que es de agradecer. Además, ocupa 20 GB menos de peso. También hay que hacer una mención especial a los tiempos de carga reducidos.

Desde el menú de inicio al propio gameplay se tardan escasos seis segundos en cargar y el paso de la exploración al combate es un parpadeo. La utilidad de los SSD se ha quedado patente.

Lo que nos queda con Tales of Arise es un juego que volverá a hacer vibrar a los fans del JRPG, a los fieles seguidores de la saga y también a aquellos que se inicien en esta, porque esta nueva entrega resulta un gran punto de entrada a esta franquicia.

El rol japonés entra en una generación o sale de otra, según como queráis verlo, con fuerza gracias a Tale of Arise; un juego que convence en lo narrativo, destaca en su sistema de combate, pule aspectos como el diseño de su mundo y aporta impulso al género en todos sus aspectos. ¡A disfrutar!