Análisis de Wii Party U

Dependiendo del tiempo que nos apetezca jugar, el número de jugadores que seamos o del tipo de juego que nos guste, Wii Party Use ajusta a cualquier opción. Solo tenemos que encender los WiiMotes y el juego hará el resto. Y si no consigues ponerte de acuerdo con tus compañeros de juego, eligiendo la opción “sugerencias”, nuestro anfitrión Paco Party puede aconsejaros las partidas que mejor vayan con vuestros deseos.

Dadle las gracias al mando de Wii U porque esta temporada es imposible que nos aburramos con sus juegos. Mientras tus amigos juegan con sus mandos de Wii, tú puedes dirigir la acción desde el pad. Si lo prefieres, puedes utilizar el GamePad como mando principal junto a un amigo y “luchar” en la misma pantalla. O puedes combinar los dos mandos según lo que te apetezca. Por supuesto, puedes jugar tú solo con el Off-TV y el juego generará a tus oponentes virtuales.

Una fiesta sin fin

Wii Party U es un juego para disfrutar con amigos o en familia, y en el salón, algo que ha ido perdiéndose por el juego online. Es genial y muy agradecido recordar formas de juego en compañía que cuenten con tanta variedad de opciones para pasar horas y horas de diversión. Wii U necesitaba un juego que reuniera a la gente en el salón, y es un paso adelante comparado con Nintendo Land: tiene más minijuegos, explota todavía más las bondades del mando y está totalmente pensado para el grupo.

Además, su estructura es más inteligente. Tiene tres modos principales: los juegos de fiesta son largos y están diseñados para montar una fiesta en toda regla; Fiesta en Casa es un modo pensado para que la acción no se limite solo a las pantallas, sino que todo tu salón se convertirá en un cuarto de juegos. Por último, en los juegos de GamePad solo se usa éste y son perfectos si la televisión está ocupada y nos apetece echar una partida con alguien.

Aunque no lo parezca, la pérdida de inhibiciones con este título es una gran baza. Mientras la simplicidad de la que Nintendo bien sabe enorgullecerse funciona a las mil maravillas en un juego como este, nosotros (o mejor, los más peques) vamos a perder la vergüenza y ni siquiera vamos a enterarnos. Entre toda la variedad que ofrece Wii Party U, cualquiera va a ser capaz de encontrar su minijuego de oro. Y dentro de esta diversidad, algunos minijuegos funcionan mucho mejor que otros, pero estos últimos encontrarán a su público.

Los minijuegos

Fuera de los tres modos principales está la colección de minijuegos, donde pueden elegirse a la carta y disfrutar de los que más nos han gustado o practicar los que se nos han resistido. Dentro de los minijuegos hay desafíos y batallas en las que se pueden desbloquear nuevos niveles para más jugadores o pantallas más complicadas. En general, los minijuegos son muy breves, pero muy adictivos, así que no importa cuántas veces ganes o pierdas: siempre querrás más. Eso sí: a veces quince segundos de minijuego (en modo libre) se quedan cortos.

Podemos volar, hacer carreras de animales, arreglar robots, dibujar, jugar al futbolín, hacer snowboard e incluso poner "carazas". Uno de los minijuegos más divertidos de Wii Party U se centra en la expresividad de las caras: los jugadores eligen una expresión de una lista e intentan que el resto adivine de cuál se trata. Por ejemplo, si nos toca representar la frase "¡Mira, un gatito!", tendremos que poner cara de amor. O de odio, según tu personalidad. A este "¡Qué caretos!" le siguen de cerca los juegos de fiesta, como "Isla GamePad", un juego en el que hay que avanzar por un tablero virtual que se encuentra en una isla tropical llena de obstáculos. Con compañía, Wii Party U brilla.

Lo que tenemos claro es que es un título lleno de variedad donde cada minijuego puede sorprenderte de una manera diferente. Te avisamos de que no vas a sacar el juego de la consola en una temporadita. Tenlo preparado cuando recibas visitas o al menos hazte a la idea de que te invadan la casa.