Crítica de Mr. Link: el origen perdido, nueva película de Laika

Los estudios Laika tienen la capacidad de sumergirnos en mundos llenos de sabores peculiares. Así sucedió conEl alucinante mundo de Norman, Los Boxtrolls o Kubo y las dos cuerdas mágicas y previamente en otros trabajos como Los mundos de Coraline.

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Todo el aspecto visual de los personajes retratados en dichas películas, el atrezzo en miniatura y la dirección artística reman en la dirección de crear un enclave muy cohesionado y coherente con la historia narrada, de tal manera que forma y contenido se hermanan de forma indisoluble. En el caso de Mr. Link: el origen perdido, no nos hallamos frente a una excepción.

Toca el turno a las sociedades científicas inglesas y al mundo de los exploradores que, como Indiana Jones, viajan por el mundo en pos de lo desconocido. No hacemos alusión a una de las grandes sagas de aventuras de Spielberg por casualidad: el propio director, Chris Butler (responsable asimismo de El alucinante mundo de Norman) ha reconocido que hay mucho del personaje en Sir Lionel Frost, el protagonista de esta película cuyo fin es el de encontrar y demostrar la existencia de criaturas que se consideran mitológicas.

En Mr. Link: el origen perdido, después de regresar con las manos vacías de una travesía en la que encuentra al monstruo del Lago Ness, Frost recibe las burlas de sus colegas científicos. Sin embargo, poco después, una extraña misiva lo emplaza a desplazarse a Norteamérica para revelar la existencia del Sasquatch. Espoleado por la curiosidad y por la recompensa que le supondría encontrar al eslabón perdido que une al hombre con sus ancestros simiescos (ni más ni menos que formar parte de la sociedad de exploradores a la que tanto admira), se lanza a una nueva aventura que lo lleva al noroeste de los Estados Unidos. 

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Sin embargo, uno de sus celosos compañeros tratará a toda costa de torpedear su viaje, que lo llevará a descubrir que, para su sorpresa, el Sasquatch no solo es un ser peludo y descomunal sino que sabe hablar y se siente solo. Su plan será entonces el de cruzar el mundo hasta viajar al Himalaya, donde se encuentran los Yetis, sus "primos". Para ello necesitan la ayuda de la aventurera Adelina Fortnight, que cuenta con los mapas que podrían llevarlos hasta el recóndito lugar en el que habitarían dichas criaturas.

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Mr. Link: el origen perdido - Galería de imágenes I (4 imágenes)

Una de las grandes fortalezas de Mr. Link: el origen perdido en su versión original es una de las grandes debilidades en la versión española: el doblaje de uno de los personajes principales. Brays Efe se ha estrenado como actor de doblaje prestándole su voz a Mr. Link... Y no pega demasiado. Si has visto Paquita Salas, es inevitable verla cada vez que la criatura abre la boca, algo que te saca por completo de la película. Por su parte, Arturo Valls y Maggie Civantos defienden bastante bien sus respectivas plazas, en especial el primero, más habituado a jugar con el registro de su voz en diversas películas previas como la saga Madagascar, en la que se encargaba de Kowalski, Cigüeñas o Futbolín.

Por lo demás, hay diversas secuencias que son no solo divertidas, sino también una verdadera pasada, teniendo en cuenta que se han creado mediante la trabajosa técnica de stop-motion. En concreto, la multitudinaria pelea del saloon (hay algún que otro guiño al western) y la de la zozobra del barco, en la que los personajes se mueven incluso trepando por las paredes, como en Origen.

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Mr. Link: el origen perdido - Galería de imágenes II (4 imágenes)

Sí que se aprecia que ha habido cierta premura en la producción de la película, así como una mayor dependencia del CGI en la creación de los espacios abiertos y de las texturas como el agua. Abrir tanto los horizontes hace que esto sea casi indispensable para cumplir plazos (tengamos en cuenta que es una película con menos sets cerrados y con más espacios naturales) pero, si sois amantes de esta técnica de trabajo, podéis despreocuparos, porque Laika sigue teniendo intacta su capacidad de asombrarnos con su trabajo artesanal.

Y también Mr. Link: el origen perdido tiene sus pildoritas para actualizar la historia. Romper la dinámica de que la damisela caiga en brazos del héroe sin convertirlo en un villano es una gozada extra. "No te lo tomes a mal, pero creo que me merezco algo más"... Chapeau! Estamos, a todas luces, ante una película de entretenimiento familiar que puede que sea una de las más enfocadas al público infantil de esta factoría, pero que en el discurso se rompan ciertos clichés, hará también gustoso el visionado a los adultos.