Esta crítica de Ocean's 8 nos demuestra que el cine no es matemática pura: aplicar una fórmula repetidas veces puede hacer que se desgaste y, por tanto, el resultado puede ser muy diferente al esperado. La trilogía de Ocean's, dirigida por Steven Soderbergh cuenta con algunos momentos que podríamos clasificar como sublimes. Sus giros de guión finales son brillantes y el ritmo de su montaje y la fuerza de su banda sonora, dos poderosos aliados para que los espectadores sucumban al ingenio de esos robos perfectamente calculados.
Ojo, que para que esto funcione, hay que hacer al espectador partícipe del juego y engañarlo para que en la catarsis final piense "me he tragado el anzuelo".
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Ocean's 8 parte de una premisa un poco bobalicona: la de hacer "lo mismo pero solo con mujeres", algo que podía salir muy bien o muy mal... pero que como excusa argumental era un pelín gratuita (¿de verdad que en el siglo XXI tenemos que reivindicar a la mujer haciendo esto?). La medida la daría el guión y hay que decir que Gary Ross, que además de dirigir la película se ha encargado del libreto (junto a la debutante Olivia Mich), tampoco es que se haya estrujado particularmente las meninges.
¿De qué trata Ocean's 8?
Debbie Ocean, la hermana de Danny, ha cumplido una condena de cinco años en prisión durante la cual ha estado planificando de forma minuciosa un robo. Su objetivo será hacerse con el exclusivo collar que llevará Daphne Kluger (Anne Hathaway) durante la lujosísima Gala del MET (el Costume Institute), un importante evento benéfico anual que marca el inicio de la temporada en la industria de la moda y es conocido por la asistencia de multitud de estrellas y celebridades.
Debbie, ayudada por su mano derecha Lou, reclutará a Nine Ball (Rihanna), Amita (Mindy Kaling), Constance (Awkwafina), Rose (Helena Bonham Carter) y Tammy (Sarah Paulson), un heterogéneo grupo de aliadas con las que repartirse el botín. Las sospechas de un agente de seguros (James Corden) y un episodio sentimental cerrado en falso, pondrán en riesgo la operación con la que podrían conseguir esa joya valorada en 100 millones de dólares.
Robando sobre tacones de aguja
¿Entretiene Ocean's 8? Sí. ¿Es divertida? No es que vayas a retorcerte en carcajadas, pero sí que es simpática, sobre todo gracias al personaje de Anne Hathaway, el mejor de la película. ¿Está bien hecha? Respecto a la ejecución, podemos abrir más el debate.
En lo que a estilo se refiere, hay varios momentos en los que parece que Ross ha querido emular a las películas de Soderbergh y las películas de atracos en general con planos cenitales, zooms, picados... Parece natural si lo que se quiere es buscar cierta continuidad con lo que espera ver en el cine el espectador. Pero ni la banda sonora de Daniel Pemberton ni el interés de la propia acción consiguen alcanzar el mismo nivel. Es emblemático de esta saga el juego con los detectores láser y en esta película hay una secuencia que quiere honrarla, pero se queda tan lejos...
Si estudiamos un poco a los personajes, también encontramos bastantes problemas: da la sensación de que se han masculinizado los roles y además no hay ninguna conexión o química entre las personalidades de cada una de las protagonistas. Dicho de otra manera: ni son verosímiles ni hay cohesión entre ellas, de modo tal que esta banda más que una piña parece un conjunto de piñones.
Además los fichajes son también muy variopintos. Es evidente que Sandra Bullock, Cate Blanchett, Anne Hathaway y Helena Bonham Carter juegan en una liga muy distinta a la de Rihanna o la casi desconocida Awkwafina. Sarah Paulson y Mindy Kaling sí que se ajustan mejor a sus roles.
Pero quizás lo peor de la película es lo mal que ha salido su declaración de intenciones. Es cierto que apenas hay personajes masculinos en Ocean's 8 pero es precisamente un hombre el detonante de toda la trama y encima por un motivo sentimental. ¿Era necesaria una película solo con mujeres? Habrá opiniones para todos los gustos, pero la normalidad parece lejos en cuestiones de género. El día que deje de importarnos que los protagonistas sean masculinos o femeninos, será aquel en el que lleguemos a una igualdad efectiva.
Como os decíamos al comienzo, huele un poco a más de lo mismo y se echa en falta bastante pimienta, además de que la película tarda lo suyo en arrancar. Un punto mayor de picardía y sobre todo una mayor complicidad entre los personajes habrían engrasado Ocean's Eight.
VALORACIÓN:
La saga Ocean's suma un episodio más con sus aciertos y errores, que se percibe como un producto de segunda categoría por su incapacidad para aportar algo nuevo a la fórmula ya conocida.LO MEJOR:
Anne Hathaway está estupendísima: se nota que ha gozado del papel y lo transmite. Junto con Cate Blanchett y Sandra Bullock, forma un trío de oro.LO PEOR:
La trama es inverosímil, la relación entre los personajes apenas funciona y hay secuencias calcadas a películas anteriores pero peor logradas.68
Aceptable
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