¡Qué ganas teníamos de llegar a este capítulo! El episodio 23 de Dragon Ball Zse erige como uno de los más importantes de la serie, no solo por su carga dramática, sino por su gran acabado gráfico y dirección. ¿Estáis preparados para sumergiros en uno de los momentos más impactantes de la franquicia? ¡Vamos allá!
El episodio 23 de Dragon Ball Z rezuma tensión de principio a fin, y para dejar las cosas claras, aquí hay cero diversión. Hay que dejar constancia de ello, pues los memes de Yamcha con su muerte puede que hayan desvirtuado uno de los momentos más solemnes y graves de la historia de la serie. Si tenéis la oportunidad de ver este capítulo a día de hoy, no os garantizo que no soltéis una lágrima con su desenlace. Dicho esto, el capítulo comienza con Piccolo y Krilín enfrentándose a los saibaimen, las terribles criaturas cosechadas por los saiyans.
Gohan contempla aterrorizado el combate, llegando a recibir un duro golpe por uno de estos monstruos. Sin lugar a dudas, un toque de atención para que se vaya poniendo las pilas y deje el asiento del espectador para otra ocasión. Cuando la batalla empezaba a ponerse interesante, todo se interrumpe de nuevo con la llegada de Ten Shin Han, Chaoz y Yamcha.
Ahora sí está el equipo Z completo, a falta de Son Goku, 6 guerreros preparados para combatir contra 6 saibaimen dispuestos a destrozarlos. Lejos de luchar todos a la vez, el combate se antoja por turnos, y Tien es el primero en enfrentarse a una de las criaturas, demostrando que no supone un reto para él.
Pese a todo, el saibaiman tiene más de un as bajo la manga, y es capaz de abrir su cráneo para lanzar un chorro de ácido, provocando un gran agujero en el suelo. El combate es frenético, la dirección es magistral y la música insertada al punto. Qué delicia disfrutar de este nivel añejo de la serie.
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Finalmente, Tien consigue abatir al saibaiman y dejarlo hecho unos zorros, pero el saiyan Vegeta opta por una decisión que nadie espera... ¡Desintegrar él mismo a la criatura! Observad a este despiadado guerrero del espacio:
Ni los saibaimen ni Nappa dan crédito a lo que acaba de suceder, pero pronto se dan cuenta de que ha sido una advertencia, una lección para los demás. Si se confían, morirán. La inyección psicológica que sufre el grupo de saibaimen es muy importante, por lo que de ahora en adelante se verán obligados a darlo todo en los combates.
Y el próximo guerrero Z en dar la cara es Krilín, aunque... ¡Yamcha se niega! Pretende sustituirle con gran valentía, pues le recuerda que si perece no podrá volver a resucitar gracias a las bolas de dragón. Ante tal discurso, Krilín no se puede negar, y cede el testigo al confiado Yamcha. ¡Empieza la segunda ronda!
La velocidad de Yamcha es increíble, así como la de su contrincante, y Gohan es incapaz de seguir sus movimientos visualmente. En ese instante, Piccolo, que nunca deja de adiestrarlo, le recomienda que confíe en todos sus sentidos, que utilice todo su cuerpo como si de un par de ojos se tratara. Tras mucho esfuerzo, Gohan logra sentir a los luchadores y por fin consigue vislumbrarlos. La dirección en este momento también es muy buena, focalizándose en la burbuja interior de Gohan, inundando el silencio absoluto durante la perfección del ki.
Y por fin podemos apreciar el combate de Yamcha en todo su esplendor, donde hace gala de una suerte de movimientos frenéticos. La belleza visual de este combate también es digna de destacar, con una animación realmente dinámica que impregna todo el poderío desplegado. Sin embargo, cuando Yamcha parece que tiene las de ganar, sobre todo tras dejar casi KO al saibaimen con su Kamehameha, ocurre algo inesperado.
La criatura, mientras Yamcha está celebrando la victoria, se levanta de su cráter y abraza el cuerpo de Yamcha. Nada puede hacer el guerrero de la escuela tortuga para deshacerse del saibaimen, que lo tiene aprisionado con sus garras. Se hace el silencio, y la horrible criatura resplandece con fulgor. Explota. Todos se quedan paralizados ante el acto suicida del monstruo, dejando a Yamcha completamente muerto en el suelo. Krilín se acerca y comprueba que sus constantes vitales han dejado de latir, mientras observamos en pantalla grande el símbolo Kame.
Bulma y Puar, que están contemplando el dantesco espectáculo por televisión, al igual que el espectador de la serie, rompen a llorar desconsoladamente. Es uno de los momentos más duros que se recuerdan en la historia de la obra, y esto parece que no ha hecho más que comenzar.
Krilín, lleno de rabia por lo que acaba de suceder, canaliza toda su frustración hacia los saiyans y los saibaimen. Todo apunta a que lanzará un ataque tremendamente poderoso, con el objeto de vengar a su viejo amigo. Hoy se ha marchado un guerrero valeroso y atrevido, con un poder a estas alturas capaz de rivalizar con Raditz. Y no, este episodio no tiene ninguna gracia.
¡CURIOSIDADES!
1- Tal y como afirman los saiyans, cada saibaiman tiene una fuerza de combate de 1200 unidades, exactamente el mismo poder que llegaba a alcanzar Raditz, el hermano mayor de Goku.
2- Lamentablemente se incluye relleno en este episodio. El bueno de Yajirobai explica a los periodistas, a cambio de un buen banquete, quiénes están luchando contra los saiyans.
3- Es muy curioso ver las reacciones de Chichí, la madre de Gohan, y de Bulma, la ex-novia (o puede que no...) de Yamcha , al ver a sus grandes amores en pantalla. Por cierto, el canal que emite el combate es AHO TV, tal y como se puede apreciar en sus equipos analógicos.
¡Y hasta aquí el análisis de esta semana! Esperamos que os haya gustado mucho rememorar un capítulo tan especial de la serie y nosotros volveremos, próximamente, con nuevas entregas Z en Hobby Consolas. ¡Kai, Kai!
VALORACIÓN:
Un capítulo enorme, tanto en el ámbito gráfico como dramático. La tensión es desgarradora, con escenas que quedarán para el recuerdo y que, a día de hoy, siguen poniendo el vello de punta. Una pena que el relleno de Yajirobai desentone, así como algún fallo de doblaje japonés, como Nappa moviendo la boca sin escucharse palabra alguna.LO MEJOR:
Las coreografías. La dirección y tensión del episodio. Una calidad artística maravillosa en casi todos los planos. La dramática muerte de Yamcha.LO PEOR:
El relleno de Yajirobai no tiene sitio en este episodio. Un error fatal de doblaje japonés, con Nappa moviendo la boca unos segundos sin oírse nada.80
Muy bueno
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